El poder es algo que siempre he tenido, todo se destruyo, todo en lo que creía fue derrumbado por nada mas que ambición.
Me jure a mi mismo destruir todo sentimiento albergando.
Solo infundiría temor y respeto pero...
Ella cambio mi vida, tan dulce...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
NO NO NO NO
ESTO NO PUEDE ESTAR PASANDO
TIENE QUE SER UNA JODIDA BROMA
No puedo creer que ella está aquí jamás pensé volver a verla esta mujer esta muerta para mi, la furia se apodera de mi cuerpo mi vista se nubla por la corriente de ira que ahora inunda mi cuerpo.
-¿QUE MIERDA HACES AQUÍ?.-espeto molesto tomándola fuertemente del brazo logrando así que suelte un quejido de dolor.
Los demás lobos observan la escena sin intervenir haga o no lo correcto saben perfectamente que no pueden intervenir en las decisiones de su alfa.
-No deberías de tratar así a tu madre.- escupe con veneno por lo que rio sin humor ¿enserio? Tiene el cinismo de llamarse mi madre después de todo el daño que nos hizo.
-MADRE.- rio sin humor soltándola fuertemente logrando que se desestabilice sin que nadie la ayude.- Si que eres una sínica Luciana ese papel te queda demasiado grande para una víbora como tú.
-No te permito que me hables de esa manera.- se acerca a mí.
-Y YO NO TE PERMITO QUE ME DIRIJAS LA PALABRA.- grito fuertemente logrando que de un respingo Mark se acerca a mi.- ¿A qué mierdas has venido?.- pregunto tratando de tranquilizarme.
-Vine por ustedes.- rio sin humor.- Todos estos años me han hecho demasiada falta he vivido un infierno día y noche sin saber de mis pequeños.- confiesa si como no y la luna es de queso.
-Deja el teatrito y dime cuanto quieres para largarte de aquí.-sus ojos comienzan a cristalizarse.
-¿Cómo puedes preguntarme algo como eso?.-pregunta de manera ofendida por lo que pongo los ojos en blanco.- Volví por ustedes no existió día alguno en el que no pensara en ustedes son todo lo que me queda.
-Si si si muy bonitas palabras.- suspiro cansado.-¿Qué quieres?.
-Volver a su lado que no es obvio.- sus lagrimas caen por sus ojos pero no me causan nada más que repulsión.
-Estamos muy bien sin ti Luciana así que será mejor que regreses por donde viniste.
-No tengo a donde ir Dalton, no tengo dinero, ropa a un lugar en el cual quedarme.- confiesa tratando de conmoverme.
-No es mi problema.- respondo fríamente.
-¿No sientes compasión por tu madre?.- pregunta ofendida por lo que aprieto mis puños con fuerza acercándome amenazadoramente hacia ella.
-Siento lo mismo que tu sentiste aquella noche por nosotros.- agacha la mirada avergonzada.
-No sabes cómo me arrepiento.- susurra.
-Dalton.- me giro a mi hermano.- Por favor.- no puede estar pidiéndome esto.
-Alfa Dalton.- llega una de las mujeres de servicio de mi mansión.