XXV

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—Mhh... No...— Se remueve en la cama jadeando y quejándose — Un traidor...— balbucea entre el sueño, sus traumas de la guerra y pesadillas volvían a atormentarlo. Estaba completamente sudado y la temperatura de su cuerpo era alta, le dolían los músculos, su respiración se agitaba conforme las pesadillas eran más molestas. Frunce el ceño y vuelve a removerse — Traidor... Traidor...— Repite y se despierta agitado, se sienta en la cama y siente el dolor punzante en su cabeza.
Recuerda las tortuosas pesadillas y niega con la cabeza, no sabía cuándo acabaría el calvario que estaba viviendo por las noches. La única vez dónde pudo dormir en paz fue cuando Jimin durmió en el mismo techo que él luego del beso. Lo necesitaba con él en ese preciso momento, pero no iría a buscarlo y menos a esa hora, eran al rededor de las cuatro de la madrugada.
Pero si no tenía a Jimin, sabía cómo calmar su angustia.

Enciende un cigarrillo y le da una calada a este mismo mientras camina por los pasillos de la mansión llegando a la bodega donde habían algunos tipos de vinos, cervezas y otras bebidas. Agarra una botella de whisky y se sienta en su sofá para comenzar a tomar del pico.

Se encontraba sin remera gracias a que estaba sudado tuvo que quitársela.
Varias preguntas y dudas divagaban por su mente, deseando que fuesen aclaradas con facilidad, pero al ritmo que iba las respuestas serían más difíciles de conseguir.



—Te dije que no te tardaras — Jimin se coloca su boina y comienza a caminar con el menor hacia el punto de encuentro que tendrían con su jefe.

— Perdón — Jungkook se disculpa y camina detrás de Jimin mientras fuma un cigarrillo.

—El jefe debe estar esperándonos — Jimin se detiene frente a un restaurante bastante lujoso y junto a Jungkook ingresan no sin antes mirar a sus lados para notar que nadie los seguía. Le dicen sus nombres al hombre de la recepción y este los lleva a la zona privada que estaba reservada especialmente para ellos. Al ingresar ven a un hombre de no más de treinta años, cabello rubio y ojos verdes, vestía un traje bastante elegante y tenía un cigarrillo en sus labios. Jimin y Jungkook se sientan juntos frente a él y este es el primero en hablar.

—Buenos días — dice el hombre de mirada tranquila y despreocupada, quitando el cigarrillo de sus labios y posandolo en el cenicero.— ¿Tienen información para mí?

—Si, oficial Myers — Jimin se quita su boina y la deja sobre la mesa.— Los Montana efectivamente tienen lo que usted está buscando, he logrado la forma de entrar en su residencia. Busqué por todos lados, no encontré nada, pero... Es que allí no tienen ningún tipo de evidencias del robo que han hecho, tras una larga investigación pude darme cuenta de que esconden lo que estamos buscando en el bar que se ubica en el centro de la ciudad.— Jimin enciende un cigarrillo y comienza a fumar.

—¿Y tú Jungkook?— dice el oficial mirando al menor.

—Creyeron absolutamente todo lo que les dije de mí, sobre el trabajo, la edad, todo. Creen que estoy estudiando una carrera y tengo veinte años. — Jungkook hace una pequeña sonrisa con sus labios— Los Montana ahora se encuentran en la mansión de ellos, pero no es conveniente que hagan allanamiento en ese lugar, como dijo mi compañero, no hay evidencia allí.

—Pero, tengo buena información — Jimin interrumpe — Los Montana se reúnen todos los lunes a las siete de la tarde en aquel bar que les mencioné. Necesita la orden del juez para poder allanar aquel lugar. Las armas y el dinero robado está allí.

— Muy bien, en unos tres días estaré completamente al mando de la policía de la ciudad. Así que la primera orden que daré será meter en prisión a los tres cabecillas de los Montana. — Dice el hombre para luego soltar una leve tos.

— Señor Myers ¿Que ocurre si los Montana llegan a salirse con la suya y se escapan?— pregunta Jimin.

— Pues estarán en problemas más graves, aunque ya tendremos las armas.— dice el oficial.

—Oh, está bien. Prometo ayudar con el caso hasta que los Montana estén en prisión. Pero luego de eso, no regresaré al trabajo, así que le daré mi placa y renunciaré a ésto.— Jimin le avisa a su jefe.

—¿Y por qué lo harías?—

—Me he dado cuenta que esto no es lo mío y quiero estudiar otra cosa que me haga feliz — Jimin se levanta de su asiento y Jungkook hace lo mismo. — Ya no tengo nada más para aportar señor Myers si me disculpa, me retiro.

—Adelante, nos vemos en tres días cuando asuma mi cargo — ambos se despiden del que había sido su principal jefe todo éste tiempo. Habían estado trabajando para él mucho antes de conocer a los Montana, habían reunido muchísima información sobre ellos hasta que llegó el día de conocerlos. Jimin y Jungkook eran compañeros de trabajo desde el inicio, ambos tenían la misma edad solo que Jimin era el mayor por unos meses. El trabajo de Jungkook en el periódico y el de Jimin en la comisaría eran toda una farsa, un plan que habían hecho para poder acercarse a los Montana.  Obviamente Jimin nunca se esperó que la vida de un giro rotundo y en realidad Tony y Hope sean sus amigos de la infancia. Pero eso no desviaría su propósito, los Montana eran acusados de robar armas militares y muchísimo dinero del banco. Si Jimin se echaba para atrás su trabajo habría sido en vano y los mafiosos seguirían saliéndose con la suya.
Aunque ahora su plan había cambiado bastante, su único propósito era que devuelvan esas armas militares y el dinero robado para así la policía no los moleste más. Era más que obvio que irían a prisión luego de eso, pero Jimin sabía cómo ganarse la confianza de Yoongi cuándo eso pase y en el fondo, sabía que este lo perdonaría.
Aunque hace un día atrás Jimin le prometió no traicionarlo, lo correcto era hacerlo si no quería tener consecuencias peores.

Si Jimin dejaba la investigación, tarde o temprano su jefe iría por el y las cosas empeorarían. No sabría cómo ayudar a Yoongi. Así que lo único que esperaba era que su plan salga a la perfección, así que estaba siguiendo cada uno de sus pasos adecuadamente.

El día que habló con Jungkook sobre dejar de ser detective se refería a su trabajo que todos conocían, el trabajo fingido, el que Yoongi descubrió. Sería sumamente obvio y no lo beneficiaría en nada trabajar para la policía. Entonces decidió dejar eso para seguir junto a Yoongi, pero sabía fingir muy bien, entonces veía a su jefe una vez al mes para darle información sobre los Montana.

Se sentía dentro de un gran lío pero tenía la clave para salir y solo esperaba que funcione como esperaba.

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Todxs se enojan porque Jimin traicionó a Yoongi pero nadie se enojó cuando Yoongi obligó a Jimin a cortar una mano.

LES PROMETO QUE NO VAN A SUFRIR.

Yo nunca rompo mis promesas siempre las cumplo.
;)

(Si encuentran faltas ortográficas o algo así es porque son las 5:00 AM en Argentina y tengo mucho sueño pero esta es la hora donde más me gusta escribir, que descansen bien y tengan un lindo fin de semana.)

 ❝Glory Nights; 1930❞ ﹙Yoonmin﹚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora