Cap 36.

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Pov. Sasuke

Saizo, mi hijo de cabello rosa y ojos jade, había despertado el Sharingan hace unos meses y a los 10 años. Al parecer fue causa de que Sakura acabó en el hospital, o eso me dijo Saizo dejándome con el niño porque ella no quería hablar conmigo.

Saizo no se quiso despegar de ella pero ella lo convenció de quedarse conmigo un momento.

Ninguno de los dos mencionaba casi nada. ¿Qué podía hablar con un niño de 10 años. No parecía muy interesado ya que quería más a su madre.

-Esta es la casa. ¿Es La misma dónde vivías con nosotros?

-Sí.

Saizo asintió y caminó guiándome en mi casa de hace años.

Casi nada había cambiado. A excepción de que ya no había ninguna foto o retrato de mí. Todavía había oro pero nada que demostrara que yo era su padre, de todas formas él con verse en un espejo ya tiene la prueba de que soy su padre.

-¡Mami! ¡Ya llegué! -gritó Saizo

-Tu mamá no está aquí -Sasuke sentía el chakra y el de su madre no se sentía, por lo que aún no había llegado.

-Ella dijo que vendría -se sorprendió -. Ella no miente.

-¿Seguro no tiene cosas que hacer?

-¡Ella no es como tú!

Me sorprendió el hecho de que me gritó y corrió buscando a Sakura en la cocina y luego toda la casa. Me quedé parado viendo como el corría por toda la casa.

-¿Necesitas algo Saizo?. Porque yo sé claramente que Sakura no vendrá aún.

Es algo molesto, tiene el físico de su madre pero tiene muchos de mis rasgos físico y personalidad. Vestido de azul marino y rojo.

-¡Déjame! ¡No quiero nada!

Lo dejé que se desquitara todo lo que él quería, seguro lo necesitaba. Lo que después ví fue que él corrió arriba seguro a su habitación.

Ya había pasado unos cuantos minutos. Me daría cuenta si el niño estaría llorando pero era mejor dejarlo sólo, yo no sé consolar a los niños. No soy ni buen esposo ni buen padre.

Siempre quise una familia, pero la familia se gana y ahora entiendo eso... He hecho cosas malas y cosas buenas. Aún me arrepiento de haberlos dejado, sé que hubieran muerto si nos quedábamos. Los Akatsuki tuvieron que convencer a Orochimaru de no buscarnos y asesinarnos. Y hasta ahora me pregunto, ¿Qué fue lo que pasó con Akatsuki?, Itachi, mi hermano mayor ¿dónde estaba metido?

-Primero cambiarme y después ir a la reunión -corrió Sarada apareciendo en la sala tratando de correr hasta las escaleras pero se detiene en la mitad de la sala observando al hombre de capa y ojos negros -. ¿He?... Eh ... ¿Quién es usted?.

No era como ella. Ella no usaba lentes. Estaba mojada y vestía de rojo como su madre. Miré la foto de ella cuando ella tenía cuatro años y la volví a mirar.

-¿Eres ella?

Sarada me miró con ojos entrecerrados para después observar la foto que señalé y ella asintió.

-¿Podemos hablar?

Escuché las pisadas rápidas de Saizo y él abrazó a Sarada llorando.

-¿Qué haces aquí Saizo?

Escuché sólo el llanto de mi hijo menor mientras él abrazaba a su hermana. Me pregunté si en verdad fui gentil con él o fui más serio de lo habitual. Tal vez fui terrible en dejarlo sólo.

Paraíso Terrenal Where stories live. Discover now