1_23 Andy's coming...[Parte 2]

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Narra _____:

   Todo parecía tan de cuentos. Las velas, las estrellas, él... no me lo hubiera imaginado. Una sensación de calor invadió todo mi cuerpo cuando escuche que ponían una música de fondo. Era Malcolm, escondido detras de una planta. Reí.

-Sería un placer...- respondí a su pregunta, extendiendo mi mano. Él la tomó para guiarme a la mesa.

   Las horas pasaban, y la comida ya se había terminado, pero con la buena charla era suficiente para ambos. Sin embargo, el sonido de una notificación en mi celular llamó mi atención. Era papá. Creo que no estaba dentro de los planes que volviera temprano.

-Es papá...- afirmé ante su rostro dudoso, que pasó a ser de preocupación. Un mensaje iluminaba mi pantalla avisando que estaba a un par de cuadras. No había tiempo que perder. Levantamos rápidamente los platos y cubiertos, arrojamos la basura y corrimos a mi habitación. Cerré la puerta ante el sonido de las llaves en la puerta principal, le ordené a Finn que se escondiera en el armario mientras yo buscaba un pijama.

El hecho de que tuviera que cambiarme enfrente de él, aunque probablemente ni siquiera estuviera viendo, me incomodó. Antes de hacerlo le pedí que no viera por la ranura, y me prometió que no lo haría.

Cuando escuché que tocaban mi puerta agarré un libro, me puse mis anteojos y con mi mejor pinta de entre casa, con pantalones de Hello Kitty y medias de sandías, la abrí.

Narra Finn:

Tenía el corazón en la boca. Entre los nervios que me había causado la cena, con el terror que me producía que Andy me encontrara en el armario de su hija (quien a pesar de no haberla visto, estuvo literalmente semidesnuda enfrente mío), probablemente me enfermaría por estres después de hoy. Pero eso ahora no importaba, lo que importaba era no hacer ningun tipo de sonido ni movimiento brusco. Empecé a ver lo que tenía alrededor. Aquel armario parecía un mundo paralelo, había de todo. Al lado de mi pie había un ukelele y cajas de zapatos, a mi lado estaban colgadas muchas camisas y vestidos y del otro lado, en el suelo, vi algunos repuestos de el skate de Ty, un estuche de cámara y una caja mediana que decía "Mamá", con letras desprolijas. Esto último me llamó la atención, Ty jamás había mencionado a su madre.

Mi burbuja de pensamiento se pinchó cuando escuché a Andy hablar. Sin embargo, no estaba hablando inglés, por lo que no entendí que fue lo que decía, solo pude rescatar algunas palabras.
Andy:-... Sheela...- deben estar hablando sobre la tarde. Respiré muy despacio.
Tiny:-...doctor... bien...-.
A:-...cena... Lydia...- hablaban sobre la madre de Malcolm.
T:-...leer... libro... dormir...-sospeche que estaba inventando algo para que Andy se fuera. En el mismo instante maldecí mentalmente no haber dado algún curso de español.
A:-...fotos...viaje...cámara...- entonces sentí como alguno de los dos se acercaba al armario. Hice lo posible para arrinconarme y camuflarme con la ropa que había allí adentro. Entonces vi a Ty abrir una de las puertas del armario lentamente, y aliviada por ver que no estaba cerca, tomó el estuche de cámara que estaba sobre la caja.

Luego de escuchar a Andy despedirse y que la puerta se cerrara con llave, Ty tocó la puerta del armario diciendo que ya podía salir. Al abrir la puerta y ver que ya era seguro, mis nervios bajaron, pero automáticamente un nuevo pensamiento vino a mi cabeza; "Bueno Finn, ahora ¿Cómo piensas irte sin que te descubran?". Me golpeé mentalmente.
Tiny:- Bueno, supongo que tu plan se arruinó ¿Verdad?- dijo mientras caminaba lentamente a la ventana, que daba a un pequeño balcón.
Finn:- No necesariamente...- hice una pausa para llegar hasta donde estaba ella. Abrió las ventanas para dejar relucir una noche de luna llena, que nos sonreía. La luz de aquella gran luna logró demostrarme lo que ya sabía, pero nunca estaba de más recordar. Su rostro, con pecas perfectamente esparcidas. Ojos que me derretían. Sonrisa que me enamoraba. Y labios que moría por besar. Toda ella era increíble. Parecia un espejismo. Era transparente, y no guardaba rencores. La tomé de la mano y ambos salimos al balcón. Éste a penas tenía espacio para que ambos estuvieramos allí, pero era perfecto.

Cuando la ví, ella miraba para arriba. No estaba rezando ni hablando, era más bien como que buscaba algo. Una esperanza, una idea, una noticia.
Finn:- ¿Ty?- la llamé, sacandola de su trance.
Tiny:- ¿Sí?- preguntó, mirándome.
Finn:- ¿Qué pasó con tu madre?- cuando lo pregunté, ella quitó la mirada. Fue muy repentina, y me di cuenta de que la había tomado por sorpresa cuando ella se quedó en blanco.- ¿Ella esta viva?-.
Tiny:- Bueno, si. Cuando yo era muy pequeña se fue...- hizo una pausa para pensar, o recordar.- Cuando le pregunto a papá, siempre dice que la maternidad no era su camino, y se dio cuenta tarde, pero nunca quise creer que realmente me abandonó así nada más... ¿Qué clase de monstruo sería?- mordió su labio inferior y miró la ciudad que vivía por debajo de nosotros. Parecía que buscaba las palabras.- Por eso guardo algunas de las cosas que dejó cuando se fue.- al terminar me miró. No podía leer del todo su mirada. Era más bien triste, decepcionada. Y yo estaba atónito. Realmente me confió esta información a mi, solo así.
Finn:- ¿Alguna vez hablaste con ella?- tal vez era una pregunta estúpida, pero no podía dejar el tema así nada más. Sin embargo no sabía que decir.
Tiny:- De vez en cuando habla con papá, y solo lo sé porque llegue a verlo en su teléfono, pero conmigo nunca habla.- se quedó pensativa mirando la ciudad. Luego de unos segundos agitó su cabeza para liberarla de aquellos pensamientos y me miró. No parecía muy cómoda hablando de eso, así que la dejé hablar -Tenemos que sacarte de aquí. Papá en cualquier momento puede llegar a entrar y verte, y no puedes quedarte en mi armario para siempre.-
Finn:- Es verdad.- le contesté, tomando mi teléfono. Llamé a Nick para que viniera por mí. Me contestó con algo como "Ya me tomas por taxista niño, pronto te enseñaré a conducir".

En primer lugar salió de la habitación Tiny, asegurandose de que su padre ya estuviera en su habitación. Me tomó de la mano y rápidos pero silencios bajamos las escaleras. Corrimos hacia las puertas del departamento, dejando expuesta la puerta del ascensor, donde me subí solo, pero antes tuve que hacer algo. No podía dejar pasar esta oportunidad. La adrenalina estaba al máximo, y tenía que convencerme a mi mismo de que no era un cobarde. Por supuesto que no lo era. Y no podía arrepentirme mañana de haber perdido esta oportunidad.

Tomé el rostro de Ty con ambas manos, con la mayor suavidad que pude reunir. Conté hasta tres en mi mente, suspirando profundamente, y la besé. Puede que no haya sido bajo la lluvia, o en una playa como en las películas viejas, pero ese momento fue nuestro y solo nuestro. El mundo ya no giraba, y todos estaban manteniendo la respiración. Era como si todo hubiera conducido a aquel momento, y ya no quedaba nada más que nosotros, junto a un ascensor, escapando de su padre.

Allí me di cuenta de que había caído en su hechizo. En el hechizo de sus ojos. De su pelo. De sus labios. De su mente. Había caído, y no habia vuelta atrás. Me quedé mirando aquellos ojos oscuros, profundos.

Finn:- ¿Qué me hiciste, ____?- y entonces, el ascensor empezó a bajar solamente conmigo adentro.

Narra _____:

¿Qué acaba de pasar? No lo sé. Mi corazón empezó a dar un concierto de rock en mi pecho. No sentía que fuera yo misma, era como si estuviese viendo la escena desde otro ángulo.

Cuando al fin pude reaccionar, me di cuenta de que Finn ya no estaba, se había ido, y me había dejado en este caótico estado. Esta vez no fue una actuación. Esta vez realmente ME BESÓ. Claramente esta noche no voy a poder dormir.

[...]

Eran las 12:30 y yo escribía lo que me pasó. Escribia para no explotar, ni olvidar ningún detalle. Además a esa hora nadie a quién pudiese contarle estaba despierto. Necesitaba dejar registro de que aquello había pasado, y de que no era un sueño. Y por otro lado, una parte de mi necesitaba recibir algún mensaje, algo que me dejara más tranquila, que calmara un poco mis pensamientos. Y de la nada un mensaje inesperado llegó.

Johnny O.🤪: Hola _____😁
Johnny O.🤪: Este Viernes haré una fiesta en casa
Johnny O.🤪: Vienes?

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Your City Girl - [Finn Wolfhard y tú]Where stories live. Discover now