Capítulo 9

12.2K 1.2K 96
                                    

En el pasado

________ Gormsson

Al amanecer, me di cuenta de que tenía lágrimas en los ojos. 

Había soñado con mis padres. Ellos que siempre cuidaron de mi y me dieron protección, alimento, un techo para vivir, sobre todo me dieron amor. 

Supongo que es cierto. Nunca te das cuenta de lo que tienes hasta que lo pierdes. 

Deimos estaba a mi lado, expectante ante mis lágrimas. 

 —Esta bien,  no es nada para preocuparse, amigo —le dije al dragón mientras acariciaba su cabeza. Aunque Deimos aún se notaba tenso ante mi tacto— Oh, lo lamento —aparté la mano rápidamente. 

Supongo que es cuestión de tiempo antes de que se acostumbre. 

 —¿Crees que en otras islas hayan mejores oportunidades? aquí apenas hay animales para cazar —dije con pesadez. 

Deimos comenzó a rugir, y a dar vueltas en círculos, luego empezó a brincar en su lugar. Lo observé con extrañeza, hasta que él me indico su lomo con su cabeza. 

¿Quiere que lo monte?

Deimos comenzó  a repetir el gesto reiterada veces. 

Es cierto, nunca he montado un dragón. Pero siempre hay una primera vez. 

Con torpeza me subí sobre el lomo del dragón. Me aferré a su largo cuello con temor, y rápidamente el dragón comenzó a ascender por las alturas. 

No pude evitar soltar gritos ante la situación. Eran gritos de temor. 

.

.

.

Hiccup Haddock. 

Fue sorprenderte todo lo que sucedió el día de ayer. 

Chimuelo llegó a tratar de salvarme del pesadilla monstruosa, debido a eso, fue capturado por mi padre. Todos los vikingos, junto a mi amigo, Chimuelo, fueron en barcos en la búsqueda del nido de los dragones. 

 No podía quedarme de brazos cruzados. Brutacio fue a tratar de levantarme el animo con estúpidas bromas. Al ver que no tenía resultados, se puso serio y me dio un discurso realmente motivador. Lo que más me llamo la atención de aquel discurso fue: ¿Qué querría que hiciera _____? Ella habría querido que hiciera lo que yo estimaba correcto. Lo correcto para mi era no dejar que mi amigo sufriera a manos de mi padre. Además el nido de los dragones era peligroso, posiblemente los Berkianos no habrían salido con vida. 

Los chicos: Astrid, Patán, Patapez, Brutilda y Brutacio, montaron dragones. Todo gracias a Brutacio que los convenció.

Al final, salvé a Chimuelo. Posteriormente, debí luchar contra ese gran dragón para que todos estuvieran a salvo.

Vaya día.

Estaba en mi cama, y por todo lo vivido ayer no quería salir de ella. 

Si _______ estuviera aquí, me habría dado ánimos para salir de la cama. Pero ella no estaba. 

Me giré y vi a Chimuelo. 

Oh no, él no podía estar aquí.

 —¡Amigo! ¿Cómo entraste? ¡Mi padre va a matarte! —Lancé muchas exclamaciones mientras salia de la cama. 

Me percate de algo extraño. No sentía mi pie. 

Baje la vista y me faltaba parte de mi pierna. En sustitución tenía una prótesis.

Vaya ______, si supieras todo lo que ha pasado. 

Suspire y me puse de pie para caminar, no debía ser tan malo, a fin de cuentas tengo una prótesis. 

Al dar un paso, casi me caigo. Chimuelo me sostuvo a tiempo. Caminamos hasta la puerta. La abrí y vi dragones. La cerré rápidamente asustado. 

—Por todos los Dioses, hay dragones —exclamé asustado— Siempre vienen en la noche. 

Volví a abrir la puerta. Los chicos estaban montando dragones. 

Mi padre fue a recibirme con los demás con los brazos abiertos y sonriente. 

No lo puedo creer, no es un sueño. Estoy seguro de que estoy realmente despierto. 

Logré cambiar Berk. Logré hacerlo y ______ ya se había ido. Si tan solo ella hubiera sido más paciente, si tan solo hubiera esperado más tiempo. Si tan solo ella volviera. 







Buscándote [Hiccup y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora