Capítulo 7

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En el pasado

Hiccup Haddock

_______ no se había presentado en nuestro último entrenamiento.

Efectivamente, yo tendría el honor de matar al dragón.

No podía hacerlo, y _______ no estaba en ningún lugar.

Tal vez estaba enferma, podría ir a preguntarles a sus padres, o tal vez mi amiga fue a pasear por el bosque, o está dibujado algo.

Sí, mi amiga.

Como odio esa palabra.

—¡Hiccup! ¡Sigue afilando esa espada! —exclamó Bocón— ¡Sé que tienes el honor de matar al dragón, pero debes terminar esto!

Es verdad, debía terminar mis labores en la herrería.

Seguí afilando las espadas, hasta que ya no hubo nada que afilar.

Salí de la herrería, y cuando ya estuve internado en el bosque, recordé que no me había despedido de Bocón.

Llegué al lugar donde estaba Chimuelo.

—Amigo, es todo, nos vamos —le deje peces frescos al frente— podría decirle a ______ que escape con nosotros, pero claro, tiene la linda costumbre de desaparecer.

Chimuelo me observó extrañado y luego comenzó a devorar el pescado.

—No, no es una linda costumbre —corregí mi anterior frase— es una terrible costumbre. ¿Sabes qué? Iré a buscarla, quédate aquí amigo.

Corrí por el bosque, mientras el cielo adquiría colores cálidos gracias al atardecer.

Al llegar a la aldea, vi a los padres de ______ hablando con mi padre.

—¡Hiccup! ¡Ven! —exclamó mi padre al verme.

Me acerqué asustado. La última vez que había pasado esto era porque ______ se había fracturado una pierna saltando desde un árbol con la esperanza de caer en el lago. Se enojaron conmigo por no oponerme ante su idea.

—¿Qué sucede? —pregunté nervioso una vez que me acerqué a ellos.

—Niño ¿Sabes adónde pudo ir _____? —preguntó el padre de mi amiga con tono molesto.

—¿Cómo que adónde fue? —pregunté extrañado— No lo sé, ella suele caminar por el bosque y dibujar...

—No, no estás entendiendo —replicó el padre de ______.

—Hijo, _______ Gormsson huyó de Berk —explicó mi padre en una breve oración.

Ella no pudo haber hecho eso, no sin decirme.

Dioses, no pudo haber hecho algo así.

Observé a los padres de ______, estaban con expresiones tristes en sus rostros, su madre había llorado.

Corrí a mi hogar, quizás ______ habría dejado algo allí. Llegué corriendo a mi habitación. Sobre mi cama yacía un pergamino. Corrí hasta él y lo tomé entre mis manos, leyendo rápidamente su contenido:

Hiccup, lo lamento, de verdad.
No pertenezco a Berk, creo que nunca podré encajar, por lo que tome la decisión de huir y alejarme de todo esto. Quizás sea el único modo en el cual descubra en que soy buena.
Sé que tú podrás lograr grandes cosas, eres inteligente, valiente, obstinado, determinando. Dioses, demasiadas cualidades por las que me enamoré de ti.
Lamento no haberlo dicho antes.
Vuelvo a reiterar lo anterior: Hiccup, sé que lograrás grandes cosas, no lo dudes.

Siempre te querré.
________ Gormsson.


No, no, no.

¿Ella sí lo hizo?

¿Se fue de Berk?

Dioses, no. La única persona que me entendía, la única persona que quería realmente. Esa persona de fue dejándome solo. Ni siquiera se despidió de mi en persona.

Fue tan cobarde que me dejó una carta.

Hay tantas cosas que no pude decirle, tantas cosas que nunca podré decir.

¿Lograr grandes cosas? Vaya forma de levantarme el ánimo luego de que me dejara destrozado.

Sequé las lágrimas que salieron de mi rostro. No me había dado cuenta de que había llorado.

Salí de mi hogar enfurecido y triste.

—¡Hiccup! ¡Dicen que _____ se fue! ¿Es cierto? —Brutacio llegó corriendo hacia mi alterado.

Me había olvidado de que ellos eran amigos.

—Sí, se fue de Berk para no volver —al decir estás palabras, toda la situación se volvía demasiado real. Realmente ella no volvería. Sentí un nudo en mi garganta y sentí como mis ojos volvían a humedecerse. Brutacio me observó expectante— ¿Qué? ¿Quieres burlarte porque voy a llorar? ¡Adelante! ¡Hazlo! —le grité enfurecido, sin poder contener las lágrimas— ¡De todas formas es lo que tú y tus amigos saben hacer mejor!

Brutacio negó con la cabeza y me abrazó, él también había comenzado a llorar sobre mi hombro.

—Lamento lo que he hecho. —dijo sobre mi hombros.

Suspiré y lo abracé.

Al parecer alguien más entendía mi dolor.


Buscándote [Hiccup y Tú]Onde as histórias ganham vida. Descobre agora