El club de las seis

Aguateros

Terminaron las dos horas de "teoria de los clanes" y Agustin y Florian,salian del salon arrastrando los pies, les tocaba entrenamiento con el profesor Mc Carter, un hombre bajito, pero agarrado. Tenia el cabello negro y ensortijado, era uno de los profesores más estrictos en todo el castillo. Los muchachos se dirigian al salon de entrenamiento para comenzar las clases, tenian que llegar a tiempo o si no el profesor los usaba como aguateros. Ahi verian a Aaron, bueno si tambien habia ido a clases.

Ya llegaban al vestidor cuando Agustin paró a su amigo cogiendolo del hombro.

- habla, ¿quien de todas es? - interrogó Agustin a su amigo levantando una ceja.

- ¿que? no entiendo de que hablas - dijo Florian haciendose el confundido y mirando de lado a lado - tenemos que llegar a tiempo, sino quieres ser aguatero

- vamos Florian, sabes de qué hablo - insistió el chico soltando el hombro de su amigo

- no es Rose - contestó Florian burlandose un poco, caminó más rápido, alejandose de Agustin. Pero este no se quedo atras y siguio al muchacho de ojos verdes

Llegaron a los vestidores y no se sorprendieron mucho al percatarse de que ya no habia casi nadie. Entraron a cambiarse lo más rápido posible. No bastó. Cuando salieron el profesor los esperaba con los bolsos que contenian todas las botellas de agua. Serian aguateros. Se las pusieron y empezaron a dar las vueltas de calentamiento, las bolsas les pesaban demasiado y asi se cansaban más, estaban muriendose en la cuarta vuelta, habian visto a Aaron, sin embargo no habian conversado con él porque estaba muy adelante.

- aguateros - gritó un chico alto y musculoso. Se llamaba Brad y era unos de los más populares y atractivo en el internado, todas las chicas se derretian por él, con sus ojos entre azules y grises, sus delgados rasgos y su cabello castaño claro. Si bien Florian, más que Agustin o Aaron, era guapo, Brad tenia más popularidad y eso lo hacia "per-fec-to".

- ten - dijo Agustin arrojandole la botella a las manos

- uy, el doctorcito se enojó - se burló Brad mientras que sus amigos le festejaban

- te podria partir la cara si quisiera - le espetó Agustin con rabia

- no - lo calmó Florian - ahora no es el momento - Jaló a su amigo para que se valla de ese lugar, se sentaron en las bancas. Aaron tambien estaba ahi y los saludó con un movimiento de cabeza, ellos respondieron con el mismo movimiento.

- oye, disculpa... - comenzó Agustin

- no importa - dijo Aaron esbozando una sonrisa amable

- encontramos a tu hermana, y es Annie - intervino Florian cambiando el tema - es gracioso porque cuando se vieron Majo dijo que podrian ser hermanos y ¡miren, son hermanos de verdad! - bromeó

Se quedaron un rato en silencio, con la cabeza agachada. Era incómodo. Permanecieron asi hasta que el profesor les pidió que se acerquen porque empezarian las pruebas de cuerpo a cuerpo.

- elijan parejas, de su mismo clan - ordenó el profesor Mc Carter con voz firme

- doctorcito, ¿que te parece si luchamos? - preguntó Brad con sorna

Agustin aceptó y alentado por sus dos amigos se colocó dentro del circulo dibujado con tiza, en medio del salon de entrenamiento. Brad tenia una sonrisa burlona en su rostro.

- bien, conocen las reglas, el que saca del circulo a su oponente gana, no se vale morder ni pellizcos - explicó rápidamente el profesor - ¿Listos? A luchar - grito el profesor, haciendo sonar su silbato

Brad se le avalanzó a Agustin, pero este fue mas rapido y lo esquivó, cayendo Brad al suelo y golpeandose estrepitosamente su hombro. El chico crugio los dientes mientras se levantaba, miró a Agustin con rabia. Le quizo dar un golpe en la cara, sin embargo otra vez lo esquivó cogiendole de muñeca y haciendo que Brad dara una vuelta en el aire y vuelva a caer, esta vez de cara. Quedandose inmovil, Agustin se volteó para mirar a los demas muchachos que estaban muy sorprendidos. Tambien habian llegado las chicas que los miraban de la misma manera. "parate Brad" se escuchó una voz chillona en medio del silencio. Brad hizo caso y se paró y volvio a arremeter contra Agustin que lo agarró del brazo se lo dobló y se le propinó una patada en la espalda que lo hizo volver a caer, esta vez fuera del circulo. La sala se invadió de silencio. Otra voz aguda rompio el silencio "bravoooo" grito y todos rodearon a Agustin para felicitarlo.

- buena lucha - dijo Brad a regañadientes, recien se levantaba del suelo

- igualmente - contestó Agustin amablemente