Esta vez el desayuno no eran risas y felicidad, creo que habían notado que no estaba bien y por respeto guardaron silencio.
¿Por qué le estábamos haciendo esto a Irina?
Ella no lo merecía.
Terminamos de comer, y Irina no dejo que recogiera mi plato, de verdad era mejor persona de lo que había imaginado.
A Irina de repente le entró una llamada y la contesto de inmediato.
Rubén y yo cruzabamos miradas de vez en cuando.
—Tengo que irme a una sesión, fue un gusto conocerte, veré si mañana puedo enseñarte con Rubén la ciudad.
— Vale —Dijo Rubén llevándola hasta la puerta y se despidieron con un beso en la mejilla.
Rubén cerró la puerta y se quedó frente a ella por unos minutos.
— Creo que será mejor que me vaya —Me acerqué para abrirla pero Rubén me cargó con fuerza y me sentó arriba de la mesa, quedando frente de mi.
— ¿Que tienes?
— ¿No es obvio?
— No puedo entenderte, dices que me quieres pero cuando le iba a decir a Irina que se fuera, tu le mientes y le dices que eres mi prima —Lo soltó sin más, podía notar que estaba molesto por los gestos que hacía y la forma de como novia su boca —Que más da, ella lo olvidará al día siguiente... pero tú y yo no.
— Tú la amas Rubén, te estás confundiendo... a mí me quieres por qué soy tu fan, estás confundiendo todo eso, con ella eres feliz, yo no te merezco, no por que estemos atrapados los dos en un mismo día, significa que tienes que pasarla conmigo lo que nos resta de vida, tú no sa...
Sentí sus suaves labios sobre los míos de golpe, el me había besado para callarme (jajaja al volver a escribir esta parte me morí de risa, recordé la escena de una novela donde la calla besándola jajaja).
Quería empujarlo y sacarlo de mi, pero era imposible, no podía resistirme a el, era Rubén.
Cerré los ojos con lentitud y puse mis brazos sobre sus hombros al sentir que el ponía sus manos en mi cadera.
Se separó poco a poco, a solo unos cuantos centímetros de mi cara.
— Me gustas tú, te quiero a ti, te amo a ti, provocas cosas en mi, tantas, que jamás había sentido por alguien.
Sus ojos me miraban fijamente.
—Ella no se merece que la hagamos esto...
— Yo no me merezco tener que estar con una mujer cuando a la que amo es a otra —Quede sorprendida ante sus palabras (yo también quede sorprendida, no sabía que antes escribía cosas así, hasta a mí me dolió)— Irina es una buena chica, pero hace tiempo deje de verla como pareja, ahora la veo más como una hermana o una amiga (me dolió más, Irina te amamos <3), tiene semanas que no la beso en los labios, tuve que ensayar mi rutina para evitarla la mayor de veces posibles y solo por qué a la única que quiero cerca es a ti.
— Rubén...
— Dime que no me amas y te aseguro que te dejare irte, no te buscaré más, intentaré no pensaste, no llamarte, intentaré de todo con tal de que desaparezca de tu vida, por más imposible que sea.
— Yo no puedo decirte que no te amo, por qué te amo y mucho, no sé cómo explicar todo lo que siento por ti.
El volvió a unir sus labios con los míos, de esa forma tan dulce.
Sus labios junto a los míos me daban vida.
Sentía pequeñas risas cada vez que el los depositaba en mi boca.
Se sentía tan bien.
— Sabes ... No termine de decirlo... Pero tenerte así de cerca me pone tan nervioso —Dijo besándome de nuevo— Siento cosquillas por todas partes, me tiemblan las piernas y las manos, no puedo evitar ponerme rojo y no puedo evitar enamorarme más de ti... ¿Y sabes algo? Tienes razón, eres mi fantasía, una fantasía que se está volviendo realidad.
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Iba a continuar este cap y hacerlo más largo, pero no sabía si hacer esto o consultárselo a ustedes antes... (Jajaja la Jozy del futuro ya lo hizo más largo, ya no te tomes la molestia mi vida).
¿Les gustaría un capítulo salseante? (Nel, ya no, está ya es una novela cristiana, para eso está inevitable jajaja).
No olviden que los amo, espero que les haya gustado, tampoco olviden votar y Comentar que me ayudaría muchísimo <3
