IR PARA NO VOLVER

CAPÍTULO 18

¿Qué me he perdido?
"Capullos" pensé,  con mucho cariño,  cuando miraron a su alrededor para comprobar que no había nadie mirando mientras se daban el lote ahí en medio. "¿Qué coño me he perdido?" Me dije a mi misma y salí lo antes posible para pillarles con las manos en la masa, aunque su momento no duró tanto como me esperaba. Aun así estaban lo suficientemente cerca como para que una persona que no había visto lo que yo hace pocos segundos se extrañase. Tosí para llamar su atención y por fin pude articular la pregunta que tenía en mi cabeza dando vueltas y que no me permitía pensar en mas cosas:
-¿Qué me he perdido? O sea, ¿qué ha pasado entre vosotros dos y no me habeis contado? -no puedo evitar que la sonrisa de mi rostro se ensanche, la idea de que las personas que mejor he conocido estén juntas aunque en la distancia, me alegra.

-Emmm.. pues... -las mejillas de Nora están cada vez más y más rojas. Así es ella, que a la mínima que le hables de novios o que le pilles sin que se de cuenta, los calores se le suben a la cara.

Al verla, Matt le toma la palabra:

-Pues bueno, ya que me hablaste mucho de ella, investigué y al final conseguí su twitter. Empezamos a hablar, pasamos al whatsapp...

-Y luego, como mi padre y tu padre, Carol, trabajan en algo parecido, le mandaron al puesto que tu padre dejo libre en Florida. Hace poco que fuimos, así que queríamos darte la sorpresa de que, aparte de que vivimos al lado y vamos al mismo instituto. -dijo Nora, entusiasmada.

Por un momento, sentí un enorme nudo en la garganta, que atrapaba todas mis entrañas, llegando hasta el estómago. Ójala no estuviesen juntos, de novios digo. Porque eso implicará que Matt le puso los cuernos conmigo, y no soportaría ese sentimiento de culpabilidad. Y menos teniendo a los dos tortolitos en mi casa.

-Aunque, si te lo confieso, este ha sido nuestro primer beso. -su cara se vuelve de un rojo más intenso aún al hablar de estos temas, típico de ella.

-Oh, pues me alegro. -mi nudo se deshizo. Ya no me sentía tan culpable, y además, ¿sólo fue un beso de despedida/reencuentro, no? Despedida de lo que antes eramos, y de esa química que teníamos, y reencuentro como amigos sin derechos. Y es que de verdad que me alegraba por ellos, aunque la verdad que la idea de que mi mejor amiga a distancia estuviese con mi mejor amigo, a distancia también, me resultaba extraña, dejando a un lado todo lo pasado entre Matt y yo. -Celebrémoslo, ¿no?

Imité el típico gesto de descorchar la botella de champán abriendo una botella de kas de limón.

-¡Que empiece la fiesta mañanera!- Exclamé, cogiendo vasos y llenándolos hasta arriba.

Entonces, en mi móvil suenó somebody to you, indicando que alguien me estaba llamando.