Estás despedida! [Skip Beat]

Capítulo 23 - Yo soy yo

Él no respondía.

– Ah... supongo que te dejaré dormir

Kyoko observaba en silencio a su amado, por fin el ambiente ya se había relajado. De a poco iba atardeciendo y el cielo se tornó de un anaranjado iluminando toda la habitación.

"¿Qué hago...? Tal vez deba prepararle algo..."

No se dio cuenta de que el sillón era demasiado cómodo y se durmió igualmente.

La pantalla encendida, la noche cayendo y ambos descansando plácidamente como si no hubiera nada que hacer. Al cabo de un par de horas Kuon abrió los ojos lentamente y cuando se dio cuenta se encontró a una chica durmiendo cerca de él.

"Que linda es...

Y tan cerca..."

No pudo evitar acercarse a ella y alargar su mano para tocarla, cuando de repente paró en seco. De alguna manera algo no se lo permitía, era como si su brazo tuviera un tic que no le permitía avanzar más allá.

"Oye, oye, debes estar bromeando

"¿Por qué?"

Al final pudo posar su mano entre su pelo, pero alguna razón estaba demasiado avergonzado como para siquiera tocar su cabeza, era como si cada pelo sedoso le hiciera cosquillas a cada uno de sus dedos.

No sabía que le pasaba, hace poco había conocido a esa chica, pero su cuerpo reaccionaba solo, era como si su mente y cuerpo no coordinaran, como si su cuerpo tuviera memoria, eso lo aterró.

– ¿Ren? – dijo involuntariamente. Al momento Kyoko reaccionó y se encontró a un Kuon que casi se abalanzaba a ella.

Ella se alejó algo asustada.

– ¿Kuon pasa algo...? ¡EH! ¡Es de noche! – se dio cuenta la chica al ver el cielo enormemente gris

– Nos quedamos dormidos – dijo inmutable tratando de que ella no sospechara nada

– No alcancé a preparar na...– Kyoko se paró en seco al ver a Kuon rojo – ¿Tienes fiebre...? – despreocupadamente posó la mano sobre su frente – ¡Estás ardiendo!

– ¿Enserio...?

– Ya se me hacía extraño que te hubieras dormido de la nada, siempre tienes que estar haciendo algo

Ella lo arrastró hacia su pieza cubriéndolo como un bebé con ropa y todo.

– Ahora descansa, iré a prepararte una sopa que te hará sentir mejor... por mientras duerme

– B-bien...

Kuon quedó en silencio dentro de la habitación.

"Es tan cálido..."

"Me gusta..."

"Me quedaré así para siempre, contigo Mogami-san..."

Al otro día Kyoko se hallaba haciendo sus trabajos, había dejado a Kuon descansar por su fiebre y ella había vuelto a su cotidianidad.

Kuon se hallaba con los ojos abiertos, no quería ver más doramas, tan solo se conformaba con mirar el techo blanco. Pronto recibiría la visita de Lory así que andaba de malas.

"Ojalas que el jefe entre normalmente..."

"¡Diablos! Me quedé dormido mientras Kyoko se iba, no pude despedirme de ella..."

– ¡¡Ren!! – irrumpió frenéticamente

– buenos días señor...

– ¿Por qué tienes que ser tan condescendiente conmigo? ¡Cambia esa cara!