• Veintitrés •

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Lucy dormía en el dormitorio para recuperar energías luego de la noticias nuevas. Me dirigí a la sala y la señora Layla se puso de pie al verme no tan amigable, y no era para menos, ella y su marido no apoyaron en lo absoluto a Lucy durante su divorció.

- Hermosa - cargué a Luna y la apegue a mi pecho para proteger sus oídos del ruido de las sirenas que se apoderaron de las calles.

- Natsu, vaya - Sonrió sin ninguna pizca de gracia - Supongo que estas contento de haberle arruinado la vida a mi hija.

- Fueron ustedes quienes le arruinaron la vida al casarla con Gray - Ella se enojó haciendo notar más sus arrugas de la frente - Lucy me amaba, y me amará siempre a mi.

- Fuiste tú quien se fue y la dejó a su suerte - Dijo seria - Lucy era tu prometida - Frunci el ceño - No se los dijimos ya que era la única forma de hacer que se enamoren sin la presión de saber que estarían juntos quisieran o no.

- ¿Mi prometida?

- Te fuiste y para no romper nuestro acuerdo con tu padre, él decidió casar a Gray con Lucy - traté de controlarme ya que mi pequeña estaba conmigo - No te extraña que Gray se allá "enamorado" justamente de ella.

- Son de lo peor - dije entre dientes - Dejen de meterse en nuestras vidas. No me importa lo que ocurrió en el pasado. El presente es lo que cuenta y mi amor por ella venció cada obstáculo que nos pusieron todos ustedes.

- Supongo que conoces a Zeref - esto no estaba bien, ¿Qué estaba ocurriendo a nuestras espaldas? ¿Por que ellos conocian a ese bueno para nada?- Zeref será el esposo de Lucy.

- ¡No diga estupideces! - Enloqueci - ¡Por qué juegan con la vida de su propia hija! ¡Dejen que sea feliz a mi lado!

- Lucy es nuestra única hija. Ella es el futuro de la familia Heartfilia y no puede vivir en estas condiciones. ¡Zeref apareció y sin duda es el hombre indicado para ella! - No comprendí- Él proviene de una familia muy prestigiosa.

- Sólo quieren dinero.

- Exacto, aunque yo diría éxito - mi pequeña comenzó a llorar - Sólo te advierto que tus posibilidades de casarte con mi hija son nulas mientras no tengas un rol importante en la sociedad, un gran estatus.

- Que...

- Ve y habla con tu padre - ¿Cómo sabía de eso? - Gray ya no nos importa, pero si tú recibes tu herencia tendrás el camino libre para casarte con Lucy. De lo contrario, ella deberá contraer matrimonio con Zeref o otro hombre.

- ¿Mi herencia? - Sólo buscaban el dinero de mi familia para hacer crecer la suya.

- Por desgracia, creo que no te queda otra opción más que hacer lo que te digo, o perderás a Lucy - Me sentía entre la espada y la pared, ella tenía razón, no me quedaba otra salida.

No quería ser un títere para mis padres, pero si no accedo perderé a mi Lucy y a mis hijos. Tengo que usar mi genio y actuar con astucia, debe haber otra opción.

- Volveré dentro de dos días.

Me quedé estático mientras ella se dirigía a la salida. Oí el ruido de la puerta cerrarse y volví a la realidad. Luna estaba más calmada ahora, la presencia de esa mujer la incomodaba.

- Natsu, lo siento - la suave voz de Lucy me hizo voltear a ver la puerta que conectaba con el pasillo.

- Lucy, no... - Ella sentía vergüenza, y todo debido a que vio y escuchó mi conversación con su madre - No tienes la culpa.

- tienes razón, no debo acercarme a Zeref - Me aproximo serio.

- Mi amor... - agarré su cabeza y la puse en mi pecho, junto a la carita de mi pequeña que cargaba en el otro brazo.

- ¿Qué haremos? - dijo preocupada- Mis padres siempre cumplen con su palabra. Hallarán la manera de obligarme.

- Iré con mi padre - Ella se tenso.

- No, Natsu, tengo miedo.

- Siento que Gray sabe algo, no creo en las palabras de tu madre - Ella acarició la mejilla de Luna y sonrió - No perderé el tiempo, iré.

- Ten cuidado.

Ella cargó a Luna y yo tomé las llaves del coche. Salí del apartamento con el abrigo en mano y encendí el coche. Gray seguía viviendo en la casa que compartió con Lucy, por alguna razón no quería salir de ahí y ahora necesitaba una respuesta que solo él me daría.

Para cuando llegué a su vivienda, ya eran las ocho de la noche. Estaciono el coche y toco el timbre dos veces. Unos minutos después él abrió la puerta y se quedó asombrado de verme ahí.

- Natsu - su cara se tornó sombría - ¿Qué crees que haces aquí?

- Hay que hablar - Él me iba a cerrar la puerta, pero puse mi pie - te interesa mi parte de la herencia, ¿No es así?

- Mierda - lo dejé en duda - Pasa.

Entré y me ubique en uno de los sillones de la sala. Observé el lugar y había más orden del que imaginé. Gray de seguro había contratado una limpiadora. Él volvió con una botella de alcohol y dos vasos de vidrio.

- ¿Quieres? - Yo negué y el hizo una mueca de fastidio - Sigues siendo muy correcto.

- Lucy me espera y no quiero asustarla - pensé que se molestaría, pero no, ni siquiera le importó - Sabes lo que están tramando nuestros padres.

- No, ni me interesa - No le creía- Felicidades, pronto tendrás otro bebé.

- No cambies el tema - me enfade- Estoy dispuesto a darte todo si me ayudas a huir con Lucy.

- ¿Huir? - rio - ¿A dónde? ¿Te volviste loco?

- Lucy puede abortar en cualquier momento - Él quito toda gracia de su rostro - No te interesa, pero a mi si. Te daré todo lo mío si me ayudas, hermano.

- ¿Estás seguro? - Asentí.

- Ayúdame, te lo ruego.

- Bien - terminó de beber su vaso de alcohol y lo dejó a un lado - Admito que me interesa mucho tu propuesta.

- Eso quiere decir que mis padres si piensan darme la herencia, ¿Verdad? - se quedó seco - De lo contrario no te interesaría.

- imbécil, me engañaste.

- Aún puede ser todo tuyo, Gray.

- Natsu - había un brillo de ambición en sus ojos.

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Continuará***

°• A Base de Errores •°  ||Lemmon|| #Wattpad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora