Fin de la eternidad

Capítulo 4. El inicio del fin

Sólo hay una guerra que puede permitirse el ser humano: la guerra contra su extinción.

Isaac Asimov

26 de mayo, 2016.

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(Suena la alarma)

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(Suena la alarma)

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Miracle se levantó de su cama, apago la alarma y seguidamente se comenzó a cambiar.

-Ya en la sala

Ahí está tu desayuno- dijo su mamá.

Él se sentó en la mesa y dirigió su mirada hacia el televisor.

Conductora de TV: 25 víctimas y más de 200 heridos dejo el atentado ocurrido ayer en la concurrida zona comercial Tabata, hasta el momento se desconoce los motivos de este atentado, así como también quienes lo perpetuaron, seguiremos informando....

Ya me voy a la escuela...- dijo Miracle.

Cuídate hijo - respondió su mamá.

-Ya en la escuela (Entrada del salón de clases)

Mientras Miracle se encontraba sentado en su carpeta, esperando a que la profesora llegase, el capto que muchos de sus compañeros le observaban, se murmuraban entre ellos, lo miraban como sintiendo lastima por él, quizás por lo ocurrido el día de ayer...el solo agacho la cabeza para evitar hacer contacto visual.

Eh... Hola Miracle...eh, que tal, ¿te sientes bien? ... dijo su compañera María.

(Que espera que diga, ¿qué estoy bien?, la respuesta es obvia, ni siquiera hay necesidad de preguntar, quien se podría sentir bien sabiendo que su padre murió)- pensó Miracle.

Esto...quería decirte que...mmm...- dijo María.

...Lo que María quiere decir es, que todos aquí te acompañamos en tu dolor, queremos que sepas que todos te apoyamos para lo que necesites, así que, si te sientes mal dínoslo...- dijo Cesar.

Exacto Miracle, estamos preocupados por ti, no nos gusta verte triste- dijo Juan.

S-sí, todos estamos aquí para acompañarte, después de todo somos como una familia- exclamo María.

Si, exacto- dijo Elizabeth.

Si- respondió Cesar.

Todos comenzaron a decirle que no se sintiera mal, que podía confiar en ellos en lo que sea.

(Somos como una familia eh...nunca me dirigen la palabra, cada vez que he tratado de hablarles ustedes optan por burlarse de mí, nunca han sido considerados conmigo, y ahora que sucede esto vienen conmigo e intentan consolarme eh...vaya hipocresía, no puedo soportarlo......no ...no...no...váyanse) – pensó Miracle.

-No te sientas mal...

-Estamos aquí para apoyarte...

(Váyanse, déjenme solo, váyanse...)

-Animo...

-Superaras esto...

No...no...no - murmuro Miracle mientras temblaba.

De pronto la profesora apareció por la puerta.

Todos a sus asientos, están en horario de clase- dijo la profesora.