Black and White [Trad]

Capítulo 3 : Ahora y Entonces

Jimin pone a Yoongi en la cama, pero el Omega se mantiene firme en sus niveles de bebé koala. El Alfa tiene que quitarle los dedos. Es doloroso hacerlo, tanto física como emocionalmente. Jimin quiere quedarse, acurrucarse en la cama con Yoongi. Pero solo puede imaginar cómo reaccionaría el Omega al despertarse.

"Probablemente tratarías de sacarme los ojos", le susurra Jimin al hombre dormido.

La mirada pacífica en la cara de Yoongi se evapora rápidamente. Con cada paso que Jimin le quita, el Omega se vuelve más agitado, una mirada templada estropea sus impresionantes características.

Jimin suspira, con el pecho apretado. Apaga el interruptor y se dirige al dormitorio de invitados. El Alfa se da una ducha rápida antes de que se acomode entre las sábanas. Encuentra que no está cómodo, no importa cómo se acomode. Pero está tan cansado que no le importa. A los cinco minutos, se queda dormido.

No está seguro de cuánto tiempo ha estado fuera cuando oye el primer llanto. Agonizante, temeroso, perdido. Los ojos de Jimin se abren. Viene del dormitorio principal. Yoongi está en algún tipo de problema. Su cerebro alfa le grita que se levante. Todavía confundido, y torpe por el sueño, Jimin se abalanza sobre él, golpeando sus dedos en varios objetos.

Yoongi está en problemas. No hay tiempo para pensar en mantener sus dedos seguros.

Cuando Jimin finalmente se dirige a la suite, se da cuenta de que Yoongi no está en el peligroso peligro previsto. El Omega está teniendo una pesadilla. Al acercarse, Alfa Park escucha las palabras entre los gritos desesperados.

"Por favor", Yoongi ruega en su sueño, "No me hagas más daño".

Eso es trágico. La frenética de jimin. Él no puede soportarlo. No está seguro sobre la ciencia de las pesadillas, pero decide despertar a Yoongi sacudiéndolo suavemente.

"Oye", susurra Jimin, "Despierta, es ..."

En un abrir y cerrar de ojos, las uñas de Yoongi se aplastan contra la tráquea de Jimin. Su mirada es ancha por el terror. Jimin se maldice a sí mismo. El Omega está en posición de arrancarle la garganta. ¿Cómo podría ponerse en un estado tan vulnerable?

"-Sólo un sueño", Jimin ahoga.

Es una eternidad en los cinco segundos que tarda Yoongi en llegar a sus sentidos. Sus ojos parpadean con reconocimiento, y deja ir a Jimin.

"Se supone que debes dejar que la gente duerma sus pesadillas", gime Yoongi, lanzando una mano sobre sus ojos.

La ciencia, correcto.

"Lo siento", Jimin logra susurrar. El Alfa lentamente retrocede, "Te dejaré volver a dormir".

Incluso en la oscuridad, los ojos azules de Yoongi son visibles, luminosos y brillantes. Ahora mismo brillan con pánico. 

"Espera."

El alfa en él se detiene, como si esperara órdenes.

"¿Puedes...?" Yoongi pierde los nervios y mira hacia otro lado.

Jimin se erige como una estatua de piedra, pero es dura. Olas de emoción brotan dentro de su cuerpo. Su mente sigue pensando en cosas cada vez más peligrosas, imágenes pintadas con calor, el dulce olor a menta, suaves exhalaciones de placer.

"¿Puedo qué?" Jimin pregunta, con la mandíbula apretada.

"Nada," dice finalmente Yoongi. "No importa."

Jimin quiere insistir en el tema, pero es tarde en la noche, casi en la madrugada, y ya no quiere estresar al Omega. "Descansa un poco."

El Alfa está en la puerta cuando oye un grito sumiso y roto. Cada nervio en su cuerpo cobra vida. El uso de llamadas de lobo son obsoletos en la vida moderna. La elocuencia del lenguaje básicamente lo ha vuelto obsoleto. Los alfas no necesitan usar su llamada para que su manada caiga en línea. Simplemente tienen que decir: 'Ponte en la línea'.