Let Go. RM

Capitulo tres.

Me encontraba en la cafetería de la escuela con Jin el bendito martes apenas había empezado para mí lo bueno es que pude levantarme un poco tarde ya que solo tengo dos clases ¡alivio!

—oh no ahí viene pesadilla -dijo mi amigo viendo en dirección a la entrada yo también gire mi cabeza y rodé los ojos.

Se escucho un silencio muy grande y un gran ruido de algo golpeándose en mi mesa, mire a Jin rápidamente ya que él miraba con los ojos asustados y muy abiertos.

—cielos -susurre muy bajito.

—¿acaso no entiendes? ¿Acaso tengo que explicártelo? -gritó muy fuerte se oía sus respiración muy pesada, yo me sobresalté un poco ¿está loco?

—¿qué te pasa eh? -gire mi cabeza hacia arriba y lo mire enojada.

—tu pequeña eres la que no entiende, te dije que te vería hoy temprano y no apareciste ¿qué eres? -me encaro se notaba muy cabreado.

—¿crees que yo en mi sano juicio iría con alguien como tú? ¡Ja, ja, ja! -sentí como me jaló de mis muñecas y me apego a su pecho.

Me miraba muy serio y no despegaba la vista de mis ojos yo trataba de quitarme de encima pero no pude sí que tiene fuerzas el imbécil, de un momento a otro sus manos pasaron a mis caderas y se acercó bastante a mi. Y ¡boom! Planto sus labios en mi me quede estática por unos segundos y después le di en su entrepierna ¿idiota? Esa palabra le queda muy corta ¡imbécil! Eso es lo que es. Vi cómo me soltaba rápidamente y se retorcía por el dolor.

—aprende a comportarte imbécil -con eso me retire de ahí y Jin venia atrás de mi.

—Dae creo que viene detrás de nosotros -susurro muy espantado Jin.

—¿qué? -gire mi cabeza, pare en seco y efectivamente venia atrás de nosotros ¿qué no se cansa?

—¡ven acá Dae Jin o te arrepentirás! -su grito fue muy fuerte y con mucho odio.

Le lance una mirada de odio tambien y seguí caminando no sin antes agarrar de la mano de Jin ya que éste se encontraba muy asustado le apreté la mano y le di una mirada cálida, él se espanta con los gritos y esto no era la excepción.

—tranquilo Jinnie ya pasó, calma -sentí como su respiración se aceleraba y caía en shock.

—lo siento, lo siento, lo siento por favor -decía mientras lágrimas caían de sus ojos hacia sus mejillas, yo lo abrace más y trate de quitarle las lágrimas, maldigo a ese imbécil.

—ya Jinnie calma, todo estará bien ya se fue -agarre sus mejillas y conecte mi mirada con él, de un momento a otro Jin palideció más de lo que ya estaba y miro hacia un lado, empezó a temblar todo su cuerpo. Cuando siento que me jalan muy bruscamente lastimándome la muñeca, mi mirada se conecto con la de ese imbécil.

—¡parece que tengo que lastimarte para que me hagas caso! -gritó más fuerte y pude escuchar más sollozos de Jin, estaba cayendo en ansiedad, quería safarme de su agarre pero ahora sí no pude me lastimo la muñeca y no tenía fuerzas.

—escúchame imbécil, déjame de una vez por todas ya pedí perdón ¡lárgate! Yo no tengo porque estar obedeciendo todo lo que me digas, eres la peor persona que he conocido en este mundo ¡ojalá te pudras y te coman los gusanos! ¡Te odio! Déjame en paz es la última vez que te lo digo ¡YA! -grite muy fuerte estaba desesperada y solo quería ir con Jin y consolarlo el no estaba bien, de pronto sentí como me soltaba yo ,e gire y fui a abrazar a Jin. Gire hacia atrás y ya no estaba ¡gracias!

—ya hermoso, ya se fue ya no tienes porqué estar así -lo abrace más y le limpie las lágrimas que aún estaban en sus mejillas.

—¿vamos por una buena comida Jinnie? -trate de animarlo, este me miró con sus ojos rojos, sorbió su nariz y asintió tratando de hacer una sonrisa.

Jin tiene un pasado algo doloroso, por eso entra en pánico cuando alguien grita enojado o golpea, es muy frágil pero Jin es un chico con un corazón inmenso por eso es mi amigo porque está ahí en las buenas y malas.