Flor de luna

76 5 0
                                    

-Si están de acuerdo pidamos la consulta al elfo. El sabrá qué hacer- da media vuelta para retirarse de la estancia. Odia las reuniones repetitivas y sin salida que acostumbran.

🐲🐲🐲🐲🐲🐲

-¡Es un dragón!- exclama furioso uno de los ancianos.

El rey, sentado en un trono improvisado en una de las plataformas tendidas en el aire sobre las ramas altas del Árbol Sagrado, observa divertido al grupo de ancianos enojados.

-¿Y?- dice mientras mira a lo lejos a su hija y su nuevo compañero, un dragón de escamas negras, volando.

-¿Y?- el anciano está tan rojo del enojo que parece experimentará combustión expontánea en cualquier momento.

-Mouhco, calma- otro anciano coloca su mano en el hombro del elfo furioso. - Señor, entiendo que el dragón es el regalo de la demonio Tiranía, ¿pero no le parece irresponsable dejar salir al dragón cuando se llevaron al inframundo para evitar que los siguieran cazando? Ese fue el tratado que se hizo con el gobernante del inframundo-

-Eso fue hace milenios, no es justo para los dragones seguir escondidos cuando ya no están en peligro de extinción-

Sienten como ráfagas de viento golpean fuerte sus cuerpos. Zu se acercó demasiado a la plataforma mientras es perseguida por el dragón. Al parecer juegan a las atrapadas.

El dragon intenta frenar a tiempo pero va demasiado rápido

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

El dragon intenta frenar a tiempo pero va demasiado rápido. A tropezones logra aterrizar sin tirar la plataforma. Una de las ramas golpea con fuerza parte de su tórax, expulsando el aire de los pulmones del dragón, y fuego.

Los ancianos empalidecen.

-¿Fuego?- grita el anciano antes furioso -¿desde cuando exhalan fuego?-

-Pues, en el informe que se entregó el siglo pasado sobre el estado de los dragones, desarrollaron fuego por su alimentación y hábitat- dice el rey mientras revisa en la pantalla - holograma que se despliega cada vez que pasa su mano frente su rostro.

-¡También le regalaron cadenas de accesorio para manos y pies!- el anciano hace un movimiento rápido y muestra la imagen de las manos y pies de Zu, con sus nuevos accesorios de metal dorado de fina diseño y textura, recorriendo la delicada piel de sus extremidades.

El rey quiso hablar pero el mismo anciano paso la imagen a una dónde aquello cambia de accesorio a garras en sus manos y tacón de punta afilada en sus pies.

-¿Está loco?, ¿Cómo puede dejar que le den cosas peligrosas a su hija?-

Los ancianos se alejan un poco del elfo enojado. Está bien que den consejos, pero no cuestionar de esa forma al rey.

Guardias, de pie a los lados del asiento de su rey, descruzan los brazos y hacen sonar sus lanzas contra el piso, en advertencia.

Kurt mira al elfo con el ceño fruncido, la barbilla unos centímetros más arriba.

Mi pequeña ZuWhere stories live. Discover now