━━ ⦗ lavender and velvet! ⦘
❝ ella era costosa, como
el trozo de terciopelo que
llevaba, pero ella exigía su
corazón, no su dinero. ❞
███████████ 𝙚𝙣 𝙙𝙤𝙣𝙙𝙚
él encuentra a su c...
─── ✧˖*。ﾟ ─── CAPÍTULO DOS CAFÉ AMARGO. ─── ✧˖*。ﾟ ───
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KAZ NECESITABA UNA TAZA DEL café más amargo que existiera.
Se sentía como si estuviera perdiendo la cabeza. Tal vez, era demasiado jactancioso para decir que la codicia era su palanca y su sirviente. Tal vez era el momento justo para que se volviera loco.
Era demasiado codicioso mientras planeaba el atraco más increíble de la historia. Irrumpir en la Corte de Hielo era una misión suicida y salir de ella era otra historia. Aparte de eso, treinta millones de kruges era una cantidad de dinero que podía cambiarles la vida. Y si morían, no habría piedad en eso.
Creía que estaba perdiendo la cordura. La codicia estaba jugando con su cabeza. Primero Jordie, ahora ella... solo que ella era más alta y ya no había mirada infantil en sus ojos; estos eran brillantes y su cabello rojo estaba trenzado, pareciendo terciopelo.
Era Lavender Elrod, la chica que le trajo esperanza.
Tan pronto como sus ojos se encontraron, su cabeza se llenó de las habituales pesadillas que tenía durante las noches: Jordie o ella, o ambos. No se permitió reaccionar aunque quisiera vomitar. Agarró su bastón con más fuerza mientras apretaba la mandíbula, los recuerdos de ella entraron en su mente, como si los recuerdos no lo hubieran atormentado durante años.
—Jesper.—repitió Kaz.
—Oh, sí. Um...—murmuró Jesper y colocó su mano sobre el hombro de Lavender, haciéndola parpadear más rápido y contener la tos.—Ella es Lavender Fahey, mi hermana.
¿Hermana?
—No dijiste que temías una hermana.—respondió Kaz con amargura en la voz mientras enviaba una mirada furiosa a Jesper, evitando la mirada de Lavender. Esperaba que ella se desvaneciera en el aire y lo dejara solo. Él no la quería aquí.
—La conversación no surgió.—Jesper contestó y miró a la chica más pequeña a su lado que estaba en silencio. Kaz supo que ella lo reconoció.
¿Por qué no dices nada? ¿Me crees si actúo así? ¿Crees que no te recuerdo? Di algo... pensó Kaz.
Kaz ya no podía seguir ahí, las dudas, los recuerdos, la tensión la estaban matando.—Puedes charlar con tu hermana más tarde. Tienes trabajo.—se dio la vuelta, preparándose para alejarse, pero luego se detuvo.—¿O es ella a quien pedí?
Las cejas de Lavender se dispararon al estar confundida acerca de lo que estaba pasando. El cuerpo de Jesper quedó inmóvil durante unos segundos, lo cual era inusual ya que siempre estaba en movimiento. Jesper olvidó por completo que Kaz le pidió que buscara a un medik para un trabajo y, en cambio, siguió apostando.
—No, eh, ¡no! Voy a buscar a un medik ahora mismo.—exclamó Jesper, ya que no había forma de que le dijera a Kaz que su hermana era una medik. Una muy buena. Jesper no quería que su hermana se involucrara en este negocio.
