—Ya, mejor ve al grano. —Kim recargó su cabeza en las piernas del chismoso, y éste comenzó a jugar con su cabello. Seungmin amaba que le hicieran mimos, pero nunca lo diría en voz alta.

Jisung se inclinó hacia los chicos y habló en un tono bajo.

—Lo del golpe de Hyunjin no fue en realidad un accidente. —la quijada de Felix parecía que se iba a caer; mientras que Seungmin solo lo observaba con incredulidad sin moverse.

—¿Cómo? —Felix se acercó aún más, la intriga le ganaba. Lo bueno que él aseguraba y juraba que no era chismoso como Jisung.

—Eso que escucharon. Dicen que lo golpearon a propósito. Si se ponen a pensar tiene mucho sentido, el balón fue directo a su cabeza y le pegó con tanta fuerza que el pobre quedó en el piso completamente fuera de sí.

Las mejillas de Seungmin se pusieron calientes, y esta vez no era por el frío. El solo recordar la mirada de Hyunjin en su persona y la forma en la que lo llamo "Ángel" varias veces le había hecho sonrojar. Incluso por un momento se olvidó del frío que sentía.

—¿Quién fue? —las voces de sus amigos habían pasado a segundo plano para Seungmin; los escuchaba, pero no prestaba atención a sus palabras por estar en Hyunjinlandia.

—¿Me ves cara de que se quien fue? Si lo supiera ya te habría dicho, tarado. —una de las manos de Jisung dejó de acariciar la cabeza de Seungmin y dio un leve golpe en la de Felix— Nadie logró ver, y si vieron, no han dicho nada de nada.

—¿Crees que haya sido de nuestra clase? Muchos le tienen envidia por ser tan guapo, tal vez querían romperle la nariz o algo así.

—Menos mal que Seungmin le habló y el balón no le dio en la cara. —ante la sola mención de su nombre, Seungmin los miró sin comprender— ¿Qué? ¿Estás poniendo atención?

—Claro, por supuesto, sí. —Seungmin mintió.

—No te creo.

—Que poca fe tienes en tus amigos.

—Esperen, esperen, esperen. ¿Desde cuándo ustedes dos le hablan a Hyunjin? ¿Y por qué? —la mirada acusatoria de Felix era graciosa, pero a la vez daba miedo.

—Es que... ¿queríamos preguntarle algo sobre Jeongin?

—¿Están seguros?

—Sí, tan seguros como de que la luna está hecha de queso. —Jisung sonrió, y Felix estuvo a punto de atacarlo con más preguntas de no haber sido porque un muy feliz Jeongin entró al aula dando un fuerte golpe en la puerta que asustó a todos.

—Dios, que suerte que no había un maestro aquí, sino estaría en problemas por entrar así. —Jeongin le dijo a Hyunjin, que venía detrás de él.

—¡Innie! ¿Qué te trae por aquí? ¿No deberías estar en clase? —Seungmin retiró su cabeza de las piernas de Jisung para observar a los hermanos.

—Hoy me iré antes, tengo cita con el dentista. —señaló sus brackets dando una sonrisa y después la cambió por una mueca— Ojalá fuera una cita con Chan hyung y no con el dentista. —sus amigos rieron— Cierto, a lo que venía. —dio un pequeño aplauso y después miró a su hermano— Hyung quiere darle algo a Seungmin. —colocó su mano en la espalda del mencionado y le dio un empujón.

—Ah... sí. —Hyunjin caminó a paso rápido y nervioso hacia el trío de amigos; se detuvo frente a Seungmin -ya que Jisung se había movido hacia su mesa hace unos segundos- y le tendió una pequeña bolsita. Su vista nunca se posó sobre la de Seungmin, miraba a todos lados menos a él— Esto es por ayudarme ayer. Ya sabes, lo del balón la enfermería y todo eso. Lamento haberte causado molestias, y también lamento si dije algo que te incomodara. —una risa nerviosa salió de sus labios cuando Seungmin tomó la bolsita y le miró expectante, rascó su nuca con incomodidad, sabía que Changbin y Minho le miraban escondidos por la ventana, y también sentía la mirada insistente de su hermano.

¡hey, chico bonito!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora