DIBUJANDO NUESTROS SUEÑOS (Kyo ❤️Misaki) TERMINADA

NO ES UN SUEÑO

Reaccioné después de varios minutos, cuando Ijuuin sensei ya había desaparecido de mi vista. Llevé una de mis manos a los labios recordando esos besos que compartimos, estoy nervioso,hasta el corazón me sigue latiendo un poco fuerte, de seguro parezco tomate y ¡ya no sé ni qué pensar!

El ruido de la puerta de casa siendo abierta me trajo de vuelta a la realidad, volteé como en cámara lenta deseando que Takahiro no haya visto algo.

—¡MISAKI! ¿Qué haces ahí parado? De seguro pretendías llegar hasta que estuviera dormido ¿verdad? Pues te fallo niño...!¿Me estás oyendo?!

—...S..si...

—Entonces entra de una vez y ¿Qué haces con ese abrigo que no es tuyo?

El abrigo... ¡mierda!.... piensa Misaki....piensa.

—¡¡Tōdō!!

—¿Tōdō?

—Si..mi amigo Tōdō me lo dió porqué hacía frio...—contesté con temor, si me lo preguntaran diría que le tengo más miedo a mi hermano que a mi madre cuando aún vivía.
Takahiro me veía serio mientras cruzaba los brazos y entré a casa casi arrastrando cada pie, un olor a cigarro inundó mi nariz, seguro que está nervioso, él suele fumar cuando algo le inquieta.

—¿Y bien? ¿Dónde andabas? Dijiste solo un rato y ya pasan de las 10 Misaki.

—F..fui hablar con una persona que me ayudara para mejorar mis calificaciones y después estuve en la torre de Tokio, el tren se demoró y por eso llegué a esta hora.

—¿Y quien es esa persona que te asesorará? No me salgas con que es alguno de tus amiguitos, porqué ya te conozco y sé que te la pasarás perdiendo el tiempo como todo este semestre. Entiende que a partir de la Universidad serás responsable de tu vida y cuando puedas, comenzarás a trabajar, no te quiero aquí en la casa de holgazán y no me vengas con que quieres ser mangaka.

Y aquí vamos con lo mismo de siempre, a veces no te soporto hermano

—No sé porque estás molesto
nii-chan, pero déjame decirte que me he hecho responsable de mi vida yo solo, tú jamás estuviste conmigo, no recuerdo presencia tuya más que de unos cuantos días mientras fui niño. Desde que murieron mamá y papá me quede solo, mientras tú te las has pasado viajando por tu trabajo y si te molesta los gastos, recuerda qué hay una cuenta a mi nombre de donde se ha pagado todo. Y no estoy de holgazán, está casa se mantiene limpia gracias a mi, lo poco o mucho que sé hacer, lo aprendí por mi mismo, hasta ir al colegio. ¿Y por qué? Porque sin consultarme me cambiaste de escuela y  no te tomaste ni la molestia de llevarme y no es que sea tonto o miedoso, pero un niño de 8 años por lo menos necesita guía el primer día

Takahiro me miraba con el ceño fruncido, no entiendo que es lo que le enoja. He intentado no ser una carga pero él no lo ve así.

—Está vez mejorare las notas, presentaré examen para Tōkyō y Mitsuhashi, seré responsable— mi voz esta por quebrarse ¿Por qué no puede ser un hermano cariñoso conmigo?

—Quiero que me digas en donde y quien te dará clases, espero no me estés mintiendo, vete a dormir Misaki— fue lo único que dijo.

Subí despacio las escaleras, entre a mi habitación y me dejé caer en la cama, unas lágrimas salieron por mi rostro, mientras intentaba limpiarlas un mensaje llegó a mi móvil

" Habernos encontrado no fue ninguna coincidencia, tampoco fue casualidad, gracias por compartir este día conmigo, deseo poder verte mañana"

—¡Sensei!— mi sonrojo hizo que me olvidara un poco del regaño de Takahiro y limpié mis ojos con el dorso de mi brazo, mire de nuevo el abrigo de Ijuuin, huele a él.