DIBUJANDO NUESTROS SUEÑOS (Kyo ❤️Misaki) TERMINADA

DIBUJANDO FALSAS ILUSIONES

Después de terminar la clase Chiaki me espero para ir a comprar mangas, Hatori se había retirado temprano de la escuela y me pidió acompañarlo. Caminábamos lento y hablando de mangakas famosos y de lo que nos gustaría crear.

Medio instituto nos veía salir, tal vez porque continuamente estábamos juntos creían que Chiaki y yo éramos algo más, lo cual estaba muy lejos de la realidad. Él era un pequeño de 14 años que estaba en Secundaria, un poco despistado, lo que lo hacía muy tierno, pero para mi solo era un buen amigo.

Los días continuaron su curso, después de aquel primer encuentro yo acudía temprano al aula solo para ver a Takahiro aunque sea de lejos, algunas veces lo llegue a ver con Usami Akihiko y se notaba que se llevaban bien o al menos eso me parecía.

Me tenía intrigado el hecho de que Chiaki dijera que frecuenta al hermano Haruhiko cuando él, ya es Universitario y rara vez se aparece por aquí después de que terminara la preparatoria.

Mientras, yo admiraba a Takahiro y apenas cruzando palabras con él llegue a quererlo; y no fui el único, sé que Akihiko también sentía algo por él.
Takahiro desprendía un aura que te hacía querer estar cerca y protegerlo.

Que equivocado estuve.

Fue un viernes por la tarde cuando llegué al aula y Takahiro se veía nervioso, pude ver tristeza en sus ojos y rastros de lágrimas.

Me acerqué a él tratando de ser amable y ese día por fin le dirigí la palabra

—¿Te encuentras bien?—pregunté como idiota sabiendo que no lo estaba.

—No es de tu incumbencia.

—Lo sé pero a veces es bueno expresar lo que nos lastima.

—No te conozco, a penas si nos hemos visto como para que quieras conversar conmigo.

—Pues hoy sería un buen momento para conocernos ¿no crees?— le sonreí amable y vi como se sonrojó, ese acto se me hizo muy adorable—Soy Ijuuin..

—Ijuuin Kyo del onceavo grado y te la pasas dibujando

—Pensé que no me conocías—volví a sonreír— y en efecto ese es mi nombre, tengo 16 años y como lo acabas de decir, me gusta dibujar y es un gusto por fin hablar contigo Takahiro Takahashi.

Extendí mi mano para saludarlo, la cual cogió con desgano.

—No creo que a tu noviecito le guste verte coqueteando con alguien más

—¿Novio? ¿Quién es? Preséntamelo porque yo también quiero conocerlo.

—No te hagas, es el mocoso de secundaria, noveno grado.

—Oh, ya estoy entendiendo, pero ¿que crees? Chiaki solo es mi amigo.

—De todos modos no deberías tomarte esas confianzas conmigo.

—Lo siento, no fue mi intención ¿Podría ayudarte en lo que sea que te esté ocurriendo?

—No, no puedes y si me disculpas me voy, tengo cosas que hacer.

Agarró sus cosas nervioso y se alejó de mi, llevaba el paso apresurado, salí para cerciorarme a donde se dirigía, no puedo dejarlo así porque algo grave le ocurre y por eso lloraba.
Casi al final del pasillo lo vi detenerse.
Me asome un poco más para ver que lo que hacía y la realidad se presentó frente a mis ojos.

Usami Akihiko lo abrazaba y él le correspondía, ahora entiendo porque dijo que no debía tener esas confianzas con él, Akihiko lo estrechaba en sus brazos con ternura, con amor.

Desilusionado di la vuelta para regresar a mi clase, ya decía yo que alguien tan lindo como Takahiro no podría estar solo.

La tarde pasó con una materia a la que no puse atención, suerte que el sensei se sentía enfermo y solo nos puso a redactar una pequeña historia. Yo parecía perdido en otro mundo, tratando de borrar la imagen anterior de mi memoria.
Pero fue inútil, mi mente solo dibujaba el rostro lloroso de Takahiro y después como se entregaba a los brazos de Usami.