El error perfecto (Romanogers) #Terminada

Capítulo 30

STEVE ROGERS (1 semana después)
Nat cumple hoy 31 años, cosa que me vuelve loco. Tenemos que preparar muchas cosas en menos de 3 horas.

Ahora me acabo de despertar, no duermo mucho, la verdad, pero me gusta estar con Nat tumbado. Me gusta verla dormir, como todos sus músculos se relajan por completo durante esas horas, sus movimientos mientras duerme, las caricias que da a su barriguita cuando siente a la pequeña moverse.

En este momento me limito a acariciar su mejilla mientras escucho su relajada respiración. A mí pesar, me levanto de la cama y me quito la manta de encima lentamente para no despertarla.

Salgo de la habitación y pico en la de Peter, que no hace falta esperar un segundo que ya sale.

-¿Estabas detrás de la puerta?-pregunto sorprendido por la rapidez.

-No, es que ya estaba despierto...-responde sonriente.-Vamos a preparar el desayuno.-añade bajando las escaleras.

-Espero que le guste mi regalo...-digo nervioso rascándome la nuca.

-Claro que sí, créeme que le encantará. Se nota que os queréis, bueno, eso es poco, pero no te preocupes, ella dirá que sí, eso seguro.-responde Peter posando su mano en mi hombro.

-No te entusiasmes en la cocina, no tocaras nada que toque el fuego. Tú preparas la masa y yo la cocino.-le digo al ver que sonríe al llegar a la cocina.

-Tienes las recetas de todos los platos, ¿verdad?-pregunta él al ver que no sabe qué debe hacer.

-Sí, impresas y por si acaso descargadas en el móvil, pero no sé encontrarlas...-respondo encogiéndome de hombros sacando los papeles con las recetas.

Lo que le he comprado como regalo es algo realmente especial, llevo mucho tiempo pensándolo y creo que es el momento indicado. Bueno, lo será esta noche.

Hacemos el desayuno más elaborado que hemos hecho jamás. Hemos preparado Brownies, tortitas, gofres, bacon y huevos fritos. Todo esto en tan solo 30 minutos, no sé cómo es que no hemos quemado la cocina.

Ponemos todos los platos en la mesa y hacemos batidos de chocolate para los 3 (bueno, la bebé aún no tiene batido propio).

Cogemos el plato de los brownies y le ponemos velas de cumpleaños.

Subimos a la habitación de nuevo, a la que es de Nat y mía, y entramos en ella.

Ella se remueve al oírnos entrar y Peter enciende las velas. Nat abre sus ojos y entonces nos mira.

-¡FELIZ CUMPLEAÑOS!-decimos los 2 a la vez con una gran sonrisa.

Ella sonríe también y se levanta de la cama fregando sus ojos para ver mejor.

-Gracias, chicos, sois los mejores...-dice ella con gran felicidad.-Os quiero...-añade sonriente.

-Nosotros también pero pide un deseo y sopla las velas, que si no da mala suerte.-dice Peter cruzándose de brazos.

Ella ríe y sopla las velas.

-Mis 2 hombretones...-añade después besando las mejillas de Peter y luego besa mis labios.-Creí que no os acordaríais...-dice Nat cogiendo un brownie del plato y empezando a comérselo.-Está muy bueno...-termina mientras mastica y saborea el pastelito de chocolate y nueces.

-Cómo no íbamos a acordarnos, eres mi madre y su novia...-responde Peter sonriente.

-Además, es tu último cumpleaños siendo la única chica en casa.-añado yo acariciando su barriguita.

Besa mis labios de nuevo pasando sus brazos alrededor de mi cuello, pero esta vez lo profundizamos un poco más, creando que sea más pasional. Dejo el plato de brownies encima de una mesita y paso mis manos a su cintura y la rodeo. Bajo mis manos llegando así a su...

-¡Vamos a desayunar, por favor, que me muero de hambre!-se queja Peter desde el comedor. Nat y yo tenemos que separarnos pero reímos.

-Ya vamos, drama Queen...-le dice Nat rodando los ojos.-Es lo que tiene ser padres...-añade ella dándome la mano y entrelazando sus dedos con los míos.

-Te amo.-digo sonriente.

-Y yo a ti, súper soldado.-responde ella riendo.

Llegamos al comedor y ahí nos encontramos a Peter comiendo todo como si fuese el último desayuno.

Nat y yo lo miramos sorprendido. Cuando se da cuenta de que le miramos, para de masticar para mirarnos.

-Es que ayer no cené...-se excusa él con la boca llena de gofres con chocolate.

-Bien, pues desayuna, cariño...-dice Nat riendo.

-Por cierto, esta noche duermo con el yayo...-dice Peter tragando la comida.

A Tony ahora le llama yayo, dice que abuelo es demasiado formal para ahora que tienen mucha más confianza entre ellos.

Los 2 le miramos confuso.

-Calma, sé que las parejas soléis, digamos que, "daros amor" por las noches, así que será mejor que yo me vaya con él y os dejo más tranquilos esta noche.-añade Peter creando que le miremos con los ojos como platos y un poco avergonzados con las mejillas rojas.