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Diecisiete

"Demonios, solo soy un niño, ¿cómo voy a levantar uno?"

- There Goes My Life ; Kenny Chesney.

Hay muchas cosas de las que Louis tiene miedo, sinceramente. Puede ser etiquetado como un chico malo en la escuela, pero todavía es humano y tiene miedo de algunas cosas.

Uno de ellos es perder a Harry. Eso es definitivamente en la parte superior de su lista. Pero él piensa que hay algo al mismo nivel que perder a Harry. Algo igual de aterrador.

Tener un bebé.

Pero joder, ¿quién diablos quiere tener un bebé a los dieciocho? Y Harry solo tiene dieciséis (pronto tendrá diecisiete, pero aún así.)

Esto es en lo que Louis piensa a eso de las tres de la mañana, despierto y mirando al techo. Piensa que su madre y su novio van a hacerlo en su habitación, porque puede oír el crujido del colchón e incluso algunos gritos aquí y allá. Probablemente se olvidó de que Louis estaba allí.

El teléfono de Louis comienza a vibrar desde la mesita de noche. Mira para ver que Harry llama, lo cual no es bueno. Se supone que su bebé no debe levantarse a las tres de la mañana. Se supone que debe estar durmiendo.

Louis agarra su teléfono y se desliza hacia la derecha, sosteniéndolo en su oreja. "¿Hola?"

"Hola."

"Hola, cariño. ¿Qué estás haciendo? Se supone que debes estar durmiendo."

"Y-yo sigo vomitando. Oh, lo siento, ¿te desperté?"

"No, no." Asegura Louis. "Estaba despierto de antes. No te preocupes", se queda callado por un momento. "¿Quieres que vaya? Podemos abrazarnos."

"No tienes que pasar por todos esos problemas. Estaré bien solo."

"Harry..." Dice Louis severamente. "Voy para allá." Cuelga antes de que Harry pueda discutir, sentándose y metiendo su teléfono en el bolsillo de su buzo deportivo negro.

☾

"Hola." Dice Harry en voz baja mientras abre la ventana para Louis, que subió al mismo árbol que siempre sube y golpeó la ventana de la misma manera que siempre lo hace.

"Hey." Louis responde, inmediatamente toma a Harry en sus brazos. Huele diferente de lo habitual, más dulce, incluso. Su aliento huele a enjuague bucal cuando Louis se inclina para picotear sus labios. "¿Cómo te sientes? ¿Mejor?"

Harry asiente, enterrando su cara en el pecho de Louis. "Tengo sueño." Murmura en el pecho de Louis, haciendo que este se ría con cariño.

"¿Quieres que me quede? ¿No le importará a tu mamá?" Louis pregunta. Harry niega con la cabeza, por lo que Louis sube la pierna de Harry hasta su muslo para que pueda levantarlo. Lleva a Harry hacia su cama como un niño apropiado, arrojándolo suavemente sobre él. Harry se ríe al oír eso, abriendo sus brazos para que Louis lo abrace.

Louis hace lo que quiere, saltando sobre la cama y envolviendo a Harry en sus brazos. Harry tararea satisfecho, dejando que Louis lo abrace lo más cerca posible.

"Te amo." Susurra Harry.

"Yo también te amo." Louis responde en voz baja. Se quedaron quietos por un rato, disfrutando de la compañía de los demás antes de que Harry se disparara y comenzara a correr hacia el baño.

Louis inmediatamente se levanta y lo sigue, viendo como Harry cae de rodillas frente al inodoro y comienza a vomitar. Louis se arrodilla junto a él.

"Está bien." Louis murmura cansadamente, frotando la espalda de Harry. Harry estaba aferrándose a la taza del inodoro, los nudillos blancos y la cara sudando.

"¿Puedes traerme un poco de agua?" Es con lo que Harry responde. Louis asiente, caminando hacia la habitación de Harry para traer el agua que Harry había estado bebiendo antes.

Vuelve a encontrar a Harry vomitando nuevamente, haciéndole girar su boca. Louis deja el agua en el fregadero y se arrodilla al lado de Harry, comenzando a frotar su espalda otra vez.

"¿Estás bien?" Louis pregunta una vez que Harry se sienta de nuevo. Parece que el vómito se le acabó. Harry asiente, inclinándose hacia Louis y buscando el agua.

"Gracias." Harry grazna, y Louis responde besando la parte superior de su cabeza.