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Parte 5

"¿Que te parece esto?" Liss alzó una linda blusa blanca de corte en V. Yo sonreí.

"Muy linda" Dije vagamente. Ella miró tranquilamente y siguió con su busqueda.

Estos últimos días Steeve había estado bombardean mi teléfono, con no solo mensajes, si no tambien llamadas y estaba volviendome loca, para ser sincera. En el trabajo trataba de hablarme, pero siempre lo ignoraba o evitaba.

Lo quería mucho, lo quiero mucho, pero no me está ayudando a nada, no me hace fácil la idea de olvidarlo y creo que a este punto, el trabajo tampoco. Estar todo el tiempo, toda la noche, en el mismo turno; jueves, viernes y sábado desde las ocho de la tarde hasta las cinco de la mañana. Estaba casi asesinandome, porque aunque trataba de evitarlo, era obvio que él no lo hacía.

"¿Estás bien?" Preguntó Liss y yo asentí con una sonrisa.

"Claro, solo estaba pensando si este vestido me quedaría bien" Lo miré unos segundos, y lo coloqué frente de mi.

"Claro que lo hará" Tomó la parte de abajo, era un vestido de tela de durazno, de un color vino con mangas cortas. "Pero eso no evita que siga preguntando si estás bien" Me miró alzando la ceja.

"Si lo estoy, solo pensaba en Steeve" Giré los ojos al decir su nombre y ella solo suspiró. "Creo que tendré que cortar todo lazo con él" Admití y ella mordió su mejilla interior

"Puedes superar personas en tu vida viendolas todos los días" Ella me miró poniendo una mano en mi brazo.

"Lo sé, pero el no lo hará conmigo" Hablé, y antes de que ella dijera algo. "Creo que solo llevaré esto" Alcé el vestido vinotinto y unas gomas negras. 

"De acuerdo, como digas" Dijo ella dudosa.

Pasamos el resto de la tarde comprando y comiendo, los días entre semana, aunque eran los mejores para mí porque descansaba y, porque no estaba trabajando, eran los más aburridos. Me era divertido estar en el bar, no tomando, pero sí viendo a los otros tomar y pasar borrachos.

Mis días eran totalmente aburridos, pues la única persona con la que hablaba y me divertía saliendo a lugares era Liss. Las chicas que están en el trabajo era mis amigas tambien, pero solo las veía ahí, nunca nos hemos visto fuera del bar a voluntad o nos hemos llamados para hacer contacto fuera de este, siempre me las encontraba por pura casualidad, manteníamos conversaciones cortas y era todo. Creo que es solo algo que entienden los co-workers.

Al llegar al departamento, solo me dediqué a ir a la ducha y sacarme el sudor que llevaba todo el día. Liss hacía lo mismo, pero su razón era que Edmon estaría pronto aquí y la llevaría a cenar.

Debo decir que los martes y miercoles para mi eran como un domingo doble, tan aburrido y sin vida. Siempre sin hacer nada. Aunque hoy tendría un poco de diversión, si se puede decir así, porque me encargaré de hacer la compra. 

Me coloqué mis jeanes y una camiseta blanca, até mi cabello en una coleta y me coloqupe unas simples vans blancas. Salí de mi habitación y me dirigí a la nevera, para tomarun poco de coca.cola antes de irme.

Liss salió disparada a la puerta sin ni siquiera haber oído el timbre, saltó un poco antes de calmarse y abrir la puerta. Se lanzó a los brazos de Edmon que apenas y acababa de entrar.

"Hola, cariño" Dijo el chico cariñoso mientras plantaba un beso en los labios de ella. 

"Hola, lindo" Respondió, yo me reí e hice un sonido como si estuviese vomitando. Mi trato con Edmon era casi nulo, pero siempre era bastante satírico/juguetón. 

"Hola, C" Saludó riendo Ed y yo ondeé mi mano. "¿Como vas con la dieta" Dijo señalando mi lata de soda.

"A la perfección, no como la tuya" Dije divertida y el rió. "Voy a hacer las compras, me tardaré mucho, pero tengan en cuenta de que tengo llave y entro cuando sea" Alcé las llaves y ambos riendon, vacié el contenido de la lata y tomé la lista para la compra. "Nos vemos" Caminé a la salida y pasé por su lado.