• Prólogo •

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Tucumán, Argentina. 2005.

¡No estaría entendiendo porque estás con esa cara! — Emitió sentándose a su lado en un espacio que quedaba en la cama.

¡Tengo un huracán de emociones! No te imaginas. — Emitió sin siquiera moverse de su lugar.

— Soy toda oídos, Luz. Te escucho.

Se levantó, y luego se recostó en el respaldo de la cama, haciendo un lugar para ella.

— Por un lado siento felicidad absoluta, Va a jugar en River, uno de los clubes más grandes, pero...

— Pero lo vas a extrañar. — Interrumpió su hermana. Ella solo asintió.

No es egoísmo, me encanta que triunfe, esta escribiendo su futuro, pero es mi mejor amigo Sol. Siento que si se me va me falta algo.

— ¿Hasta cuándo lo vas a seguir teniendo en la friendzone Luz? — Emitió desarmando su pelo. — Se nota de acá a España ida y vuelta lo que los dos sienten por el otro.

— Me da miedo perderlo.

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Tucumán, Argentina. 2017

— ¡MAMÁ VOS ESTAS LOCA! — Se exasperó Sol y luego bajo la voz al notar que su hermana podría llegar en cualquier momento. — ¿No fue suficiente todo lo que sufrió por Joaquín, para que ahora tenga que sufrir esto también?

— ¡Por favor Sol, es solo una cena!

— Una cena incómoda para todos, ¿En que estabas pensando?

— ¡Buenas llegue! — Se escucho la voz de Luz en el living, seguido de los ladridos de Nala que le daba la bienvenida. — ¿Dónde están?

— ¡En la cocina, hija! — Respondió Danna, mientras Sol negaba con la cabeza. Luz saludo a ambas y luego miro a su hermana.

— ¿Pasó algo? — Preguntó.

— ¡Mamá tiene algo para decirte! — Le emitió con una sonrisa y luego con una mirada irónica a su madre.

— ¿Ma?

Danna suspiro y luego hablo. — Joaquín viene esta noche a cenar.

— ¿Que? — Respondió con su voz ya entre cortada. ¿Qu-Que Dij-Dijis-Dijiste?

— Luz, Joaquín viene esta noche a cenar, con su nueva novia. — Sentenció y una lágrima rodó por el rostro de su hija menor.

— ¡Perdón, me tengo que ir! — Emitió como pudo y salio corriendo para la calle.

— Déjala. — Emitió Sol al ver que su madre iria tras ella. — No quiere que la molesten.

Y también se fue dejándola sola en la cocina.

PERFECTA • Joaquín Correa • [Wattys 2018]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora