Epílogo

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Era una mañana tranquila, de esas en las que el viento fresco soplaba de manera suave y mecía las copas de los árboles en forma armoniosa. El cielo azul claro tenía algunas nubes, el sol daba esa sensación de calidez sobre la piel y el tierno aroma de la hierba nueva que anunciaba la llegada de la primavera impregnaba todo el entorno. Ya comenzaba a sentirse el cambio de estación, ya el frío dejaba de ser frío y eran solo días frescos, ya los árboles volvían a retoñar y los capullos de flores estaban esforzándose por brotar.

Se dice que la primavera es la estación donde el amor florece, al igual que todos aquellos árboles de cerezo que pronto estarían llenando el aire de Seúl de preciosos pétalos rosados dispersos y un aroma dulzón. Pero el amor no siempre florece en primavera, a veces florece en verano, otoño o incluso el invierno. Aún en el más crudo de los inviernos podría florecer un amor bueno.

Chittaphon recordaba perfectamente que comenzó a tener ese tipo de sentimientos profundos por Johnny cuando era invierno, o al menos se dio cuenta de ellos en ese momento -o quizá fue antes y sólo lo ignoró-. Había comenzado a gustar de Johnny en invierno y se había dado cuenta de que se estaba enamorando en invierno. Para el tailandés el hecho de que sus sentimientos hubieran florecido en una estación tan gélida, dónde la vida de las plantas podría acabar, sólo era sinónimo de algo: era fuerte. Si su amor había sido capaz de florecer en invierno y comenzar a dar frutos a un mes de la primavera, bueno, ¿no era eso sinónimo de que podría ser realmente un amor como ninguno? El invierno era sólo una metáfora para los obstáculos, aún cuando casualmente sí había sido invierno cuando su amor comenzó a ser notorio.

Habían pasado casi dos meses desde que Johnny y él decidieron iniciar una relación, aunque él no estaba del todo seguro de sí su relación era de noviazgo o no. No era que dudara de los sentimientos de Johnny o de los propios, era sólo que no le había quedado muy claro si aquella confesión que se hicieron determinaba que eran novios o que eran una pareja que se estaba conociendo. Añadiendo a todo esto también estaba el hecho de que, por uno u otro motivo, él y Johnny aún no se habían dado un beso en los labios. Y realmente no era como si ellos no quisieran hacerlo.

Chittaphon recordaba todas aquellas veces que habían estado a nada de besarse y eran interrumpidos por algo, comenzaba a creer que un ente divino y supremo no quería que besara al estadounidense. Podía incluso contar las veces en que no pudieron besarse:

La primera vez había sido cuando Doyoung entró a su casa y los encontró en el proceso, cuando John estaba saliendo de la ducha; la segunda fue el día en que John le regaló el libro de La Potencialidad, en esa ocasión el celular de Johnny había soñado y los interrumpió; la tercera vez había sido en la biblioteca, pero Yuta llegó a buscar a su roomate para informarle de una fuga de agua en su casa; la cuarta ocasión... esa prefería no recordarla porque le daba mucho coraje; la quinta había sido en una salida que tuvieron con Doyoung y su ahora novia Jisoo, en ese momento la preciosa Jisoo los vio y comenzó a gritar emocionada -Ten descubrió que Jisoo era fujoshi (o eso dijo Yuta)-; la sexta ocasión fue cuando estaban en casa de Jaehyun jugando videojuegos -aunque Johnny no jugaba-, esa vez por azares del destino Taeyong llegó a hablar con el rubio y Ten se quedó a dos centímetros de poner su boca sobre la del mayor; la séptima y última vez fue cuando Chittaphon acompañó a Youngho a la librería y tratando de alcanzar un libro de un estante alto se resbaló, golpeó en la frente y John comenzó a verificar su golpe, estaban tan cerca que pudieron haberse besado y sentían la necesidad de ello, pero el chico que atendía fue al lugar tras oír el ruido para verificar que todo estuviera en orden. Definitivamente tenía una pésima suerte cuando se trataba de querer besar a su guapo novio o casi novio... o lo que fuese. Pero era suyo y era guapo, eso estaba muy claro.

La cuarta ocasión que no le gustaba recordar a Ten era la que sucedió el día de su cumpleaños. Aquel día pudo haber sido perfecto de haber logrado unir sus labios con los del filósofo, por desgracia la vida parecía no querer sonreírle del todo. El veintisiete de febrero había sido martes y por las benditas vacaciones había podido pasarla con total libertad, desde muy temprano recibiendo el amor de su familia mediante una video llamada con sus padres y su hermana, quienes se disculpaban por no poder ir a verlo y en la que él igual se disculpaba por no verlos... pero había tantos gastos que comprarse un boleto de avión redondo a Tailandia no estaba dentro del presupuesto. Ten también le había comentado a su familia en aquella vídeo llamada que había iniciado una relación con John, el chico al que invitó en Navidad, Kulisara dijo un "ya me lo esperaba" y sus padres solamente le desearon lo mejor y le dieron consejos sobre no dejar de lado la escuela, no permitir una relación tóxica y cosas así que un padre preocupado aconseja. Luego de aquella llamada de casi dos horas fue a ducharse, Doyoung había dicho que él lo llevaría a comer y luego irían de compras para que el tailandés obtuviera un lindo atuendo nuevo para la cena de cumpleaños que tenía planeada. Pero antes de siquiera poder ponerse sus prendas nuevas Ten se vio sumergido en llanto porque al llegar a su propia casa vio que había una fiesta sorpresa en ella, fiesta que John había arreglado y a la cual había invitado a Jaehyun, Yuta y a Sicheng y Donghyuk, estos dos últimos compañeros de clase de baile de Ten. Doyoung sabía de la fiesta y había sido quien lo distrajo todo el día. La fiesta fue realmente muy linda en compañía de todos, hablaron de un montón de cosas, bailaron, cantaron en el karaoke, comieron un montón de comida rica, partieron un pastel y Chittaphon recibió sus regalos. Cuando John ayudó al pelinegro a llevar los regalos a la habitación tuvieron un momento privado y tierno, donde el alto abrazó al menor y lo felicito de manera cálida, en el proceso elevó el rostro adverso para mirarle a los ojos y cuando estuvieron a punto de besarse la puerta fue abruptamente abierta por Mark, el novio de Donghyuk y primo de John, quien estaba buscando al estadounidense. Ahí murió el romance del momento y no les quedó de otra más que volver con los amigos a seguir celebrando. Un beso de John hubiera sido el mejor regalo de cumpleaños.

La Potencialidad [JohnTen]Where stories live. Discover now