Capitulo cincuenta y siete - Veintiocho-El mago

192 18 0
                                    

—Fye...

¿Quién... Es? Esa mirada roja, su preocupación... Su... Su olor.
Volví a sentir esa sed incontrolable.

—Oh, para ya — Ashura volvió a inyectarme algo, de nuevo dolor. Ya no quiero sentir. Esta vez era como si me doblaran con fuerza cada músculo, comencé a retorcerme en el piso.

—¡Dejalo! ¡Maldito! — Era la voz de ese hombre, sonaba desesperado.

—Quieto — amenazó Ashura.

Dios... Como duele, creo que estaba llegando a mi fin, era un alivio, sentir esto por más tiempo seria estar en un infierno, mi cordura se desvanecia, escuchaba a ese hombre gritar mi nombre y Ashura se había alejado un poco, asombrado.
Mi mágia y ese lado que me volvía loco se estaban descontrolando.

No se como ni en cuanto tiempo, pero ataqué a Ashura. Él estaba tan sorprendido como yo, ni siquiera sabía que estaba haciendo. Obviamente él lo esquivó. Un mago débil como yo no podría hacer...

Mis uñas crecieron largas y como lanzas. Lo atravece con ellas. Ashura estaba frente a mí, con la boca sangrando. Me sonrió. Y dijo unas palabras que no pude entender. El descontrol pasó, volví en mí, el dolor volvió a mi cuerpo, las uñas que se habían clavado en su cuerpo volvieron a ser como antes y Ashura cayó, por reflejo traté de agarrarlo pero este cuerpo no lo soportó. Ahora el gran rey estaba en el piso, y yo a su lado, escuchando sus jadeos.

—Fye... Aún falta...

—¿Qu-e estas diciendo?

—Falta... Fal-falta... — dio el último respiro y todo quedó en silencio... Por solo tres segundo, antes de que el mundo comenzará a temblar.

DolorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora