Capítulo 43: Un día de locos

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Stitch

Estaba vagando por la casa, pero de pronto Jumba y Pleackley me obligaron a entrar a la cocina jalándome del cuello de mi ropa.

-¿Y ahora qué les sucede?-Pregunto mientras me acomodo la chaqueta.

-Escucha. Encontramos el Corazón de Te Fiti-Me dice Pleackley.

-¿Y me tiene que importar porque...?

-Porque prometiste ayudarnos a recuperarlo. Y para tu fortuna, el Corazón de Te Fiti está justamente en esta casa, a tu alcance perfecto-Me dice Jumba mientras me pica el pecho con su índice.

-¿De verdad? ¿Dónde está?-Pregunto yo.

-Lo tiene Maui. Ahora cumple tu promesa y ve a quitarle la piedra para que Pleackley y yo podamos irnos de aquí-Dice Jumba.

-Alto, alto, alto. No voy a meterme al cuarto de Maui a esculcar sus cosas. Eso puede causar malos entendidos y tampoco tengo ganas de pelear con Maui por la roca o robársela. Y no solamente porque puede aplastarme. Maui es mi amigo y no quiero hacerle algo así-Digo yo alzando las manos en señal de ser inofensivo.

-Tú nunca has dicho que no a hacer un trabajo. ¿Qué pasa ahora?-Pregunta Pleackley confundido.

-Ay, ya sé. Es porque Stitch finalmente está desarrollando sentimientos y ya se está encariñando con los mensos de esta casa. Y sobre todo se está enamorando de Lola-Dice Jumbra cruzando los brazos.

-Lilo. Y además de todo, no soy el único que comienza a encariñarse. ¿Me van a negar que Pleackley se une siempre a las piyamadas de las chicas y les trenza el cabello? ¿O que Jumba le pidió a Miguel que le enseñe a tocar la guitarra y juega basketball con Naveen y con Mickey?

-Nunca has roto una promesa. Y después de todos los años que pasamos criándote creo que es lo menos que puedes hacer por nosotros-Dice Jumba.

-Ah, y no hagas ninguna de las clásicas cursilerías de Fighter. Hiciste una promesa y ahora tienes que cumplirla, muchacho-Me dice Pleackley, y entonces los dos abandonan la cocina.

Alya

-Los gastos de comida han aumentado un cuarenta por ciento desde hace unos meses. Gastamos doscientos dólares solamente en galletas, Nutella y gomitas-Me dice Nino mientras hace las cuentas conmigo.

-Y gastamos trescientos dólares solamente en servicios de videojuegos, películas, música, y videos-Digo yo.

Este mes nos toca a nosotros dos hacer las cuentas de los gastos de Dream Fighters y es tremendamente aburrido y fastidioso. Estamos básicamente enterrados bajo montañas y montañas de tickets y tratando de mantenernos despiertos con litros y litros de cafeína. Y para colmo, nos damos cuenta de lo estúpidos que pueden resultar algunos de los gastos de la casa.

-¿Por qué pagamos quince veces la película de Bambi?-Pregunto confundida mientras leo el estado de cuenta.

-Porque la página no cargaba y le di click quince veces-Murmura Nino avergonzado. Yo solamente pongo los ojos en blanco.

-¿Bambi? ¿De todas las películas posibles escogiste Bambi?-No me contesta y baja la mirada.

-Y aparte alguien ha estado ordenando...¿¡veinte películas a la semana?!-Exclama él mientras lee otro estado de cuenta. En efecto, alguien ha estado comprando películas como loco y con el total podría comprarme un buen auto.

-Y te apuesto lo que quieras a que ninguno de ellos va a confesar-Murmuro yo. Las películas, además, son tan diferentes que no hay manera de saber si son el gusto particular de alguien.

Disney University 2Where stories live. Discover now