Al abrir los ojos, me encuentro que Bruno sigue durmiendo. Su rostro demuestra que está descansando pacíficamente, sin ninguna preocupación y eso a mí, me sirve para comenzar bien el día.
Me levanto, tratando de no despertarlo. Lo primero que hago, es ir a tomar una ducha, mi cuerpo quedo tengo por todo lo ocurrido, en especial mi cuello y nada mejor que un poco de agua recorra mi cuerpo.
Cuando salgo, escucho pasos en el pasillo, asomó la cabeza y veo como Meli se dirige a la cocina, se puede ver que arrastra los pies, debemos ir a la universidad y el cansancio no la deja despertar.
Me visto, acomodo mis cosas en mi mochila y salgo de la habitación. En la cocina, Meli está sentada mientras juega con la cuchara en su té.
—¿No pudiste dormir? —pregunto sirviendo mi café.
—No, la verdad que no. —Se reclina en la silla. —Estoy feliz de que hayamos podido rescatar a Bruno y por fin se sepa quién fue el culpable de todo, pero no puedo dejar de pensar que me utilizó.
—Imagino como te debes sentir. —Me siento frente a ella y tomo su mano. —Pero eres demasiado para un tipo como él, te mereces algo mejor.
—Gracias. —Acaricia mi rostro. —Mi vida no sería la misma sin ti.
El timbre de la entrada nos asusta, es temprano para que alguien nos viniera a visitar. Confundido, voy al living y, por la ventana, me fijo quién es.
—¿Qué haces tan temprano aquí? —pregunto cerrando la puerta. —Se supone que deberías estar en una hora.
—Lo sé, perdón es que necesitaba verlos y saber si estaban bien —dice Ana abrazándome. —Anoche Mel me contó lo sucedido, así que decidí venir un poco más temprano para poder hablar.
—Ana, deberías haber aprovechado para dormir —bromeo. —Ven, con Meli estamos desayunando todavía.
Los tres nos podemos a platicar sobre lo ocurrido el día anterior y de los sentimientos encontrados que tiene mi amiga. No solo Bruno y yo salimos lastimados, sino que ella también. Pensar en la gran ilusión que tenía al respecto de su relación, me enoja; me doy cuenta que ella en verdad lo quería, y él solo la uso para plan.
Ana se quedó con Bruno y nosotros nos marchamos para la universidad, el día está gris, seguramente lloverá en algún momento.
Durante el camino, trato de animar a mi amiga poniendo música, busco en mi teléfono alguna canción que le guste y por suerte, la encuentro. Cuando el sonido empieza a llegar a nuestros oídos, ella me mira.
—Yo sé que te gusta Demi Lovato no puedes negármelo. —Juntos comenzamos a cantar Really Don't Care es una canción animada, ideal para subir su ánimo.
El ambiente cambia, y nuestras risas se unen; el camino a la universidad se torna más agradable.
Llegamos temprano, aún la clase no comienza así que decidimos ir al bufet en búsqueda de algo para tomar. A pensar pisamos el lugar, un grupo de compañeros se acercaron a nosotros para preguntar cómo estábamos y sobre mi hermano; sin duda las noticias corren rápido, a pesar de no estar siempre conectados con ellos.
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Todo por ti, hermano © ["Hermanos" #1]
General Fiction"Eres tan frágil, tan pequeño aún. Todavía no conoces los males de este mundo, y espero que nunca lo hagas. La vida nos arrebató a quienes más amábamos y hoy nos tenemos el uno al otro. Intentaron separarnos por el simple hecho de no tener una vida...