Buscando a Mamá (BAM#1)

3

Lucas estacionó unas cuadras atrás del bar al que iría con Farkle. Su amigo seguramente ya se encontraba adentro tratando de enganchar alguna chica.

Lucas recordó la ultima vez que había salido, aunque tampoco fuera que había pasado mucho, a un así sentía que debía de por un momento de olvidar él hecho de que tenia una hija. La noticia de ser padre a los diecisiete le había echó cambiar su vida completamente. Amaba a su pequeña, aun teniendo en cuenta de que había sido producto de una noche donde ni su nombre recordaba, desde entonces media la cantidad de alcohol que consumía.

—Pensé que no vendrías— comentó Farkle cuando vio a Lucas acercarse a la mesa que compartía con una rubia.

—¿Cuando te he fallado?— contesto Lucas, quien se sentó a la par de su amigo y tomo de la bebida que su amigo tenia, ni si quiera sabia de que que se trataba pero necesitaba olvidar un poco él hecho de que había dejado a Lili.

—Te presentó a Lucia— Farkle señaló a la chica que tenia al lado. Lucas se acercó para darle un beso en la mejilla y la chica le sonrió coqueta. Si a Farkle no le importaba, esa noche Lucas termino con esa chica sexy que tenia al lado de él.

(....)

Maya se encontraba esperando fuera de la habitación de la niña, una de las empleadas le había indicado él camino para después despedirse de ella, ahora si, eran sólo Maya ya la pequeña.

Maya no sabia que era lo primero que debía de hacer, ¿Debia entrar o tocar la puerta?, al final decidió que sería una mejor opción la segunda. Cuando escucho una pequeña voz diciéndole que podía pasar abrió encontrándose con una habitación rosa, llena de juguetes y un gran armario. Solo esperaba que la niña no fuera como las niñas mimadas que solían molestarla cuando ella salía al parque a jugar.

—Hola— dijo Maya. Se acercó un poco.

—Hola— contesto con una sonrisa la niña. Llevaba una pijama de ositos y se encontraba tratando de capillar su cabello.

—¿Quieres que te ayude?— preguntó Maya al ver como Lili se quejaba de los jalones que daba a su cabello. Lili asintió y Maya se acercó, tomo él cepillo y delicadamente comenzó a cepillar él cabello.

Cuando Lili había visto entrar a la chica una alegría inmensa la invadió, ella esperaba encontrar a una anciana malhumorada, de esas que su padre solía contratar o una chica con voz chillona que no le prestaba atención y solo estaba ahí por su padre; pero en cambio encontró a una chica que percibió su simpleza desde que la vio, además ahora la ayudaba con su cabello, ni un jalón le había hecho. Por un momento Lili imaginó que era su madre y que situaciones como esas eran tan comunes en su vida. Valla que necesitaba una madre.

—¿Como te llamas?— preguntó Lili.

—Maya

—Tienes un bonito nombre.
¿Cuantos años tienes?

—20

A Maya le pareció tierno como Lili había comenzado a sacar conversación. Sin duda llevaba unos minutos de conocerla, pero ya le tenia cariño.

—Bueno, tu papá dijo que debías cenar y después ir a la cama— dijo Maya cuando termino de cepillar el cabello.

—¡No!— replicó molesta Lili, era viernes, mañana no tendría que ir a la escuela, ella quería dormir hasta tarde. —¿Podemos hacer algo después?—Maya río de los pucheros que había hecho Lili.

—No, tu padre puede molestarse— Y valla que Maya le tenia miedo a cometer algún error.

—El no se va a enterar, además siempre que sale con él tío Farkle siempre llega tarde.

Maya pensó por unos minutos, no sonaba tan mal la propuesta, seguramente era cierto lo que Lili decía y Lucas llegaría tarde, así que si no ponía a dormir a Lili temprano ella terminaría durmiendo también.

—Esta bien, piensa algo mientras cenas— Lili la abrazo. Al principio Maya se sentía sorprendía y un poco incómoda, pero después aceptó él abrazo y ambas sintieron algo especial.