With all of my heart [Yoonmin] ©

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—Bueno... uhm... —rascó su nuca.

Yoongi quería decirlo, moría por hacerlo. Quería gritarlo a los cuatro vientos, pero no sabía cómo lo tomaría Jimin. Tampoco sabía si este estaba listo como para aceptarlo frente a las demás personas. Después de todo, como si haber perdido a su esposa fuera poco, era la primera vez que salía con un hombre, y eso podía ser complicado en una sociedad de mente cerrada. Más que nada para él, quien apenas se había dado cuenta de sus sentimientos por el mayor y de sus nuevas preferencias.

—Está bien, no me digan, lo entiendo. No quieren dec--

—Yoongi y yo estamos saliendo.

—Jiminnie... —dijo casi en un susurro con una sonrisa en sus labios.

—¡No puede ser! ¡Eso es genial!

Seokjin los atrajo a ambos en un abrazo. Se sentía feliz por ellos.

—¡En serio los felicito!

—¡Gracias!

—Bueno, debo irme. Que pasen buenas noches.

—Igualmente, hyung.

Luego de que Seokjin se haya retirado, cansados, los otros dos se cambiaron para meterse bajo las sábanas de la cama del menor, quien fue rápidamente abrazado y besado en la frente por Yoongi.

—Lo siento, no puedo evitarlo

—No lo sientas.

—¿En serio está pasando esto? ¿No es un sueño?

—No lo es.

—Porque te juro que tengo miedo de despertar.

—No lo harás, porque no es un sueño —rió.

—Yo... dime si algún día llego a ir muy rápido, o si algo no te agrada. No quiero arruinar las cosas.

—Empezamos a salir hace tres horas, no pienses en cosas malas, ¿Sí?

—Es que, en serio, no me lo perdonaría.

—Tampoco yo, así que, si notas lo mismo conmigo, no dudes en decirme.

—Ey, ¿Cómo podría desagradarme algo de ti?

Yoongi se carcajeó en silencio y lo acercó más a su cuerpo, como si eso fuera posible. Jimin se acurrucó, sintiéndose extraño, pero bien; deseando en aquel instante que nada de eso se acabara.

—¿Puedo preguntar... por qué me dijiste que sí?

—¿Por qué no diría que sí?

—Ya sabes... no te gustaban los chicos, no querías dejar que nadie entrara a tu vida de esta forma, seguías aferrado al pasado... y no fue hace mucho.

—Es verdad, pero te conocí, Yoongi. Te conocí y revolucionaste mi mundo. Eres siempre tan amable, tan atento, tan inteligente, das todo por los demás... eres un sol. Desde que te conocí, fuiste el mío. Al principio, no sabía qué ocurría en mi interior, pero lo deduje más tarde. Lo noté cuando no quería que nos vayamos cada uno por su lado, luego de habernos visto; cuando sentí esa inexplicable necesidad de tener que estar junto a ti, de tenerte cerca, de hablar contigo acerca de cualquier cosa... no es algo que pueda negar cuando es tan obvio y tan verdadero. Es cierto que fue muy repentino y que pude haber esperado un poco más, pero eso sería engañarme a mí mismo y engañarte a ti, porque yo ya estoy seguro de lo que siento.