♡ 13 ♡

8.5K 1.2K 403
                                    

Después de haber dejado a su pequeña en el jardín de niños, Jimin fue a trabajar. Era ese su primer día en su nuevo empleo. Estaba emocionado y, a la vez, tenía miedo. Sabía que sus horarios eran mejores y que su salario sería muy bueno, pero no llegaría a tiempo para retirar a su pequeña hijita. Ya no podía contar con Min Ji, y no tenía a nadie más.

Una hora y media había pasado desde que había comenzado a trabajar en la computadora de su oficina. De pronto, escuchó unos golpes en la puerta de la misma.



—Adelante.



El señor Kim, su jefe, ingresó al lugar para poder supervisar al recién llegado. Caminó hacia él y observó la pantalla por unos segundos, esbozando una sonrisa.



—Muy bien hecho, Park. Veo que estás entendiendo rápido cómo nos manejamos aquí.

—Gracias.



El hombre, quien no era mucho mayor que él, lo miró con curiosidad. Jimin se veía decaído, lo cual era evidente a kilómetros. Además, tenía unas notables ojeras bajo sus ojos, como si no hubiera dormido bien la noche anterior.



—¿Está todo bien?

—Sí, sólo... un par de sucesos desafortunados, es todo.

—¿Qué pasó? —preguntó y, con confianza, se sentó sobre el escritorio, llamando la atención del menor.

—Estoy preocupado por mi hija.

—¿Tienes una hija? —se sorprendió.

—Sí. Sun Hee. Tiene cuatro años.

—Vaya, eres un padre bastante joven.

—Lo sé, pero lo quisimos así —sonrió, recordando a Eun Ji.

—¿Y qué le pasa a ella? ¿Por qué te preocupa?

—Bueno, mi esposa ya no está, y sólo conozco a una persona que podría cuidarla. Sin embargo, esa persona la trató mal. Lo descubrí recién ayer —negó con la cabeza—. No puedo ir a buscarla al jardín de niños y--

—Jimin, tranquilo —sonrió amablemente—. Escucha, en realidad, no tengo que hacer esto, pero dejaré que salgas temprano por unos días hasta que puedas encontrar a alguien. Incluso, si quieres, puedes buscarla y traerla aquí hasta que tengas que salir, eso no es molestia, pero será sólo hasta que encuentres a alguien.



Jimin miró al suelo, pensativo. Quería aceptar, pero no era su idea tener que incumplir las normas de su trabajo desde el primer día. Mordisqueó sus uñas y sintió una mano sobre su hombro.



—Tranquilo, no pasa nada. Ve cuando tengas que ir, yo te cubro. De todas formas, pensándolo bien, ni siquiera es necesario —rió suavemente.

—Gracias —sonrió—. En serio, muchas gracias. Prometo que no pasará durante mucho tiempo.

—Está bien, no te preocupes.

**************

Jimin bajó de su auto y miró la hora en su celular. Acababa de llegar diez minutos tarde.

With all of my heart [Yoonmin] ©Where stories live. Discover now