Capítulo 27

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26 de Noviembre de 1916

Amiens, Francia.

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Las ventanas las comenzaban a cerrar, los primeros copos de nieve comienzan a caer. La música a todo volúmen mientras en su fondo los ecos de la agonía.

El que estaba a lado mío estaba sentado, apoyándose contra la pared jugando naipes el solo, mientras que el de mi izquierda tan tranquilo.

Pude ver pasar a una enfermera que de repente chocó con un doctor y tiró toda la charola de utensilios al suelo.

Se encontraban recogiéndolos a su vez, veía pasar una cara conocida. De una enfermera que ya había visto, hicimos contacto visual.

Ya la había visto en el hospital de campaña de Samogneux, tras las colinas de Verdún.

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Y de la misma forma, ella me observaba, desconcertada. Camina de regreso. Apenas podía levantarme por los vendajes, pero me arriesgué.

Traté de sentarme y me vino un dolor espantoso, gemí.

Ella se acercó y me recostó de nuevo.

- A tí ya te había visto antes...

Ella replicó: - Creo que no.

Eres Harneik.

Ella se quedó congelada, me miró asustada.

- ¿Cómo sabes mi nombre?

- Tu me lo dijiste... Soy Peter ¿no recuerdas? Hablamos por unos instantes.

- Veo a muchos soldados todos los días.

Fue en Douaumont, cuando nos hicieron retroceder. Creí que había muerto, y a decir verdad. Ya no le veía sentido más a mi vida; estoy harto de esta guerra.

- Todos lo estamos.

- ¿De dónde eres? - Le pregunté.

- Soy de Flensburg.

- Nunca estuve ahí.

- Hace mucho frío, no hay casi días soleados como los de Francia.

- Ojalá nos hubiéramos conocido antes. Le contesté.

Ella en una sonrisa sutil, me observa mientras me ajusta los vendajes.

- ¿Nos volveremos a ver? - Pregunto.

- No lo sé... ¿tiene novia, soldado?

- Soy Peter para tí.

- Bueno... Peter ¿tienes novia esperando en casa?

-Estaba comprometido, quiere dejarme.

- ¿Y se puede saber por qué?

- Porque estoy en esta guerra.

El salón se pintó de blanco y negro, ella sostuvo mi cabeza y me acarició, a mis ojos viendo, triste.

- Me tengo que ir, Peter. Ojalá te recuperes pronto.

- ¿Volveré a verte?

- No quisiera, no sé si vuelva a verte.

Se dió la media vuelta y se fue.

Me recosté y cerré los ojos.

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