cap 29

3.2K 146 87
                                    

- ¡¡Justin!! ¡¿Me esperas, por favor?!- gritó _________ corriendo detrás del rubio que continuaba con su escapatoria a toda marcha. Desde su posición, la castaña observaba con el ceño fruncido cómo el rubio iba apretando y ciñendo cada vez más fuertemente sus puños mientras ella se preguntaba si alguna vez lo alcanzaría. Pero finalmente lo hizo, al final de un pasillo desierto.- Justin, detente.- ordenó tomándole la mano para retenerlo. Él acató aunque miró a su esposa surcando su cara con una rabia de la que ella no era culpable pero por la que sin lugar a dudas pagaría de todas formas.

- ¡¡¿Qué quieres?!!- vociferó el chico totalmente enervado por el enojo que sentía.

- Hablar contigo.- contestó ella sin amedrentarse a causa de la evidente furia de su marido.

- ¡¡¿De qué?!!

- Deja de gritarme que yo he venido para que hablemos bien. Quiero saber qué es lo que pasó allí dentro.

- ¿Dentro de dónde?- preguntó más calmado aunque sin saber muy bien lo que decía.

- Sabes bien de dónde. ¿Es verdad lo que dijo de tu madre?

Ante aquella pregunta y los ojos indagadores y tiernos de la castaña, Justin bajó la vista pero rápidamente volvió a enfrentarse a la mirada marrón para asentir levemente sin poder borrar de su rostro la tristeza que le causaba recordar la muerte de su mamá a pesar de todos sus intentos por evitar que le afectase. De inmediato, ________ se lanzó al cuello del rubio y lo abrazó con la dulzura y la compasión que le eran propios, tratando de transmitirle a través de aquel gesto todo lo que sentía la situación de su marido sin necesidad de pronunciar palabra. El rubio se sorprendió un poco por la efusividad de su esposa pero no pudo más que experimentar un extraño sentimiento de agradecimiento, así pues rodeó la cintura de la mujer y hundió su cabeza en la maraña de cabello castaño. Se mantuvieron en esa pose por unos segundos sin importarles lo inaudito que resultaba una escena tan íntima entre ellos que no constara de ningún tipo de deseo sexual y por raro que parezca tampoco para el la tenía.

- ¿Qué pasó?- inquirió una vez que se separó unos centímetros de su esposo.

- ¿Cómo que qué pasó?

- Con tu madre, ¿qué es lo que pasó?

- No quiero hablar de ello.

- Vamos, Justin, te hará bien desahogarte. ¿Se lo has contado a alguien alguna vez?

- No.

- ¿Ves? Necesitas decírselo a alguien. Me lo puedes contar a mí.

- No quiero.

- ¿Por qué no? Te quiero escuchar.- insistió la chica haciendo uso de su terquedad. El joven la miró directamente a los ojos y vio autenticidad en ellos pero él no estaba dispuesto a contarle esa confidencia a nadie, más que nada porque los recuerdos ya eran demasiado dolorosos reviviéndolos en su mente como para aumentar el dolor trasladándolos a palabras. 

- Lo siento, _______, pero no puedo y no quiero hablar de esto.

- Pero ¿por qué nadie lo sabe? . 

- Se decidió que era mejor ocultarlo.

- ¿Por qué?

- No puedo contestarte eso, te dije que no quería hablarte del tema.

- Pero…- comenzó ella, sin embargo al mirar la expresión seria de su marido desistió y pasó su mano por el cabello rubio tratando de suavizarlo y lográndolo según indicó el suspiro que el chico exhaló al contacto de su mujer al tiempo que se relajaba cerrando los ojos. – Sólo quiero que sepas que cuando quieras contarme yo te escucharé.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 30, 2014 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

un plaser ser tu esclava(justin bieber y tu HOT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora