- No tardo ¿esta bien?.- y le besó la coronilla.

- Vayan con cuidado.

- Sí.- contesto la rubia poniéndose nuevamente de pie.

Estaba a punto de salir cuando Lexa la llamo.

- ¿Clarke?

- ¿Si?.- contestó volteándola a ver.

- Nos vemos prontito.

Sonrió.

- Nos vemos prontito Lexa.

...

A pesar de todo el ajetreo, salieron de casa a buena hora. Clarke le ayudo a Alex a meter su mochila en la cajuela e iniciaron el viaje de camino a la escuela.

Se encontraban escuchando las noticias cuando Alex rompió el silencio entre ambas.

- ¿Mami?

- ¿Si Alex?.- dijo bajando el volumen y girando a verla en lo que se encontraba en rojo el semáforo.

- ¿Crees que podría ser una buena hermana mayor?

La pregunta la tomó por sorpresa y la sonrisa que traía desapareció, notó a su hija mirando sus zapatitos que se movían de un lado a otro.

Alex al no escuchar respuesta miró a su mami.

- ¿Crees que podría ser una buena hermana mayor?.- repitió la pregunta un poco mas fuerte pensando que quizás no la había escuchado antes.

- ¿Quieres tener un hermanito?.- preguntó Clarke.

- Yo pregunté primero mami.- y su mirada se fue otra vez a sus zapatitos.

El claxon del coche de atrás se escuchó y la rubia vio que se había puesto el verde.

Siguieron su camino.

- Yo creo que no hay nadie en este mundo mejor que tú para ser una hermana mayor.- respondió y de reojo observó a su hija sonriendo emocionada.

- ¿En verdad mami? ¿lo crees?.- dijo juntando sus manitas esperanzada.

Clarke se rió ante el gesto.

- Claro que sí mi amor.- dijo mirándola rápidamente antes de voltear a la calle.- Entonces...¿quieres un hermanito o hermanita?

- Sí.- dijo decidida.

- ¿Por qué no quisiste responderme eso antes?

- No quería desear tener un hermanito si no podía ser una buena hermana mayor.

La doctora sintió como su corazón se apretujaba en su pecho, era hermoso lo noble que era su hija.

- Pero tengo un poco de miedo.- continúo Alex.

- ¿Por qué?

- Porque nunca he sido una hermana mayor antes.

- Yo no sabía como ser mamá cuando te tuve pero aprendí con la ayuda de tu abuelita y tía Raven.

- Mamá me dijo que podía ayudarme.- y su tonó de voz revivió otra vez.- Dijo que ella tampoco sabía lo que era tener hermanos pero que me ayudaría a descubrirlo...si es que pasaba.

"Lexa..." pensó la rubia.

- ¿Eso dijo mamá? ¿Entonces ya le platicaste que quieres un hermanito?

- Sí.

- ¿Cuándo?

- Hace unos días mami, cuando no estabas aquí.

Llegaron a la escuela pero Clarke notó que aún tenían tiempo, no quería interrumpir esta conversación con su hija.

- ¿Qué mas te dijo mamá?

- Me dijo que ella también quería que yo tuviera un hermanito.

La ojiazul apretó el volante con sus manos, no es que lo que su hija le acababa de decir fuera algo nuevo. Ella sabía desde hace mucho que Lexa quería que volvieran a ser madres pero desde entonces nunca habían vuelto a tocar el tema.

Y sabía que Lexa lo hacía por ella.

- También me dijo.- continúo Alex y Clarke la miró.- Que a veces las cosas no pasan aunque queramos.- ahí estaba otra vez sintiendo su corazón encogerse.- Y que no debemos ponernos tristes por eso...

- Mamá es muy sabia.

Alex volteó a ver a su mami porque no entendía lo que le acababa de decir.

- Pero el día siguiente, Nicole, mi compañera de clase me platicó sobre una fuente de los deseos en el parque del centro.

- ¿En serio? ¿Una fuente de los deseos?

- Sí, se trata de una fuente donde si lanzas un moneda ella hace que tus deseos se cumplan.

- Wow ¿es mágica?

- Sí.- dijo su hija entusiasmada.- Le conté todo a mamá y ella me llevó a la fuente.

Clarke sintió su boca secarse al instante.

- Me lleve mis ahorros para asegurarme que se cumpliera mi deseo.- siguió relatando la pequeña.- Pero mamá me dijo que con una moneda estaba bien, que se trataba mas de las ganas que del dinero.- su hija hizo una pequeña mueca de que no estaba tan de acuerdo.- Mamá también lanzó una moneda a la fuente.

La doctora sintió como sus ojos empezaban a traicionarla.

- Me dijo que había pedido que todos mis deseos se cumplieran...si quieres luego te llevamos para que tus deseos también se cumplan mami.- dijo su hija mientras abría una de las bolsas de su mochila.- Ten.- dijo dándole una moneda.- Guárdala para que cuando vayamos puedas pedir el deseo a la fuente mágica.

Clarke tomó la moneda y asintió con la cabeza, sabía que si hablaba no podía evitar que las lagrimas salieran.

Escucharon que alguien golpeaba el vidrio y voltearon a ver, era uno de los niños de la clase de Alex que la saludaba, la pequeña lo saludo de vuelta y fue cuando la rubia aprovecho para sacar un pañuelo y secar sus ojos.

- Creo que ya me debo ir a clases mami.

- Si mi amor, espera yo te abro.- dijo Clarke saliendo rápidamente del auto.

La rubia llevó a su hija de la mano hasta la entrada del colegio, se aseguró de que una de las conserjes la acompañara a su salón antes de retirarse de ahí.

Llevaba en la mano la moneda de su hija, al entrar el coche se le quedó observando.

- Lexa...-susurró antes de besar la moneda y guardarla entre los compartimentos de tarjeta de su cartera.

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Cortito pero importante ☺️

Gracias a todos por sus comentarios y bonitas palabras 📝 Por todas las estrellitas que dejan en cada capítulo 🌟 pero principalmente por el tiempo que nos regalan para continuar leyendo esta historia ❤️

No tengo mucho tiempo porque estuve escribiendo entre clases jaja sorry si hay errores. El capítulo pasado y este realmente siguen siendo parte de mi idea de capítulo final pero ando de poco a poquito.

Nos leemos prontito 🎈]

Take my body (Clexa)Where stories live. Discover now