Take my body (Clexa)

Cartas

Clarke, Wells y Alex, se encontraban terminando de comer en el restaurante favorito de la pequeña.

- ¿Puedo ir a jugar un ratito?.- preguntó Alex mientras giraba sobre la silla para poder ver el área de juegos del lugar.

- Lo que diga tu mami.- respondió en seguida Wells señalando a la rubia.

Clarke le mandó una mirada de "Traidor", antes de voltear a ver a su hija.

- Pero mi amor, acabas de comer.- empezó a decir la doctora de la forma mas dulce posible.- Te va a hacer daño.

- Pero todos los niños están jugando.- dijo la pequeña.- Mira, ese lleva el pan en la mano y esta jugando.- continúo, en seguida señalando al niño del que hablaba.

- Ve a jugar un ratito.- dijo Wells.

- Yupiiiiii.- expresó la pequeña

- No, Alex...- dijo la doctora pero ya era muy tarde, en menos de un segundo la pequeña se encontraba subiendo las escaleras para echarse del tobogán.

Clarke volteó a ver a Wells, ahora sí molesta.

- Sólo va a jugar un ratito, no es para tanto.- se excuso el hombre.- Además tu no has probado bocado, se iba a aburrir esperando.

La rubia volteo a ver su plato, se le había olvidado por completo comer.

- ¿Qué pasa?.- preguntó Wells.- Todo el rato has estado distraída.

La doctora lo miro, respiro profundo. Tenía que hablarle de la visita de Lexa, debía hacerlo, aunque supiera que todo lo referente a la morena era delicado e incomodo para ambos.

FLASHBACK

- Gracias por estar siempre al pendiente de mi.- dijo Wells mientras se sentaba para poder comer lo que la rubia le llevaba de cena.

- No digas eso, sabes perfectamente que lo hago con mucho gusto.- contestó la rubia acomodando la bandeja sobre las piernas del muchacho que estaba en cama.

Al retirarse, sintió como Wells le había agarrado una mano. Ella volteó a verlo extrañada.

- ¿Qué pasa?.- preguntó la rubia.

- Eso es lo que yo quiero saber.- contestó el chico.

- No sé a qué te refieres.

- Llevas semanas triste, te he escuchado llorar en las escaleras .- empezó a relatar Wells.- Y pareciera, mejor dicho, siento como si todo el avance de nuestra relación como pareja hubiera regresado al punto de inicio.

Su semblante era de angustia.

Clarke no sabía que decir, sus ojos se sintieron pesados. Es verdad, había llorado en las noches porque llevaba semanas buscando a Lexa para decirle que estaba esperando un hijo de ella pero no la podía encontrar, la morena no le contestaba sus cartas.

- Yo...lo que pasa...es que...yo.- dijo titubeando la rubia, no sabía que decir y no quería llorar por alguien más delante de Wells.

- No había querido tocar el tema porque tú no lo habías hecho pero.- dijo Wells y tomo un respiro profundo buscando valor.- ¿Hay alguien mas?

La rubia no pudo evitar sentir la culpa en todo su cuerpo, la vergüenza por haberle fallado a su amigo, a su compañero, le estaba pegando ahora. Ella sabía muy bien que los sentimientos por parte de él eran puros y honestos, pero Lexa, lo de Lexa había sido diferente.

Las lagrimas se derramaron por su rostro, el chico lo tomó como una afirmación.

- Lo lamento mucho.- alcanzó a decir la rubia entre llantos.