You Will Never Forget It

Capítulo 18

— ¿Hola? — contesté con la voz un poco débil, quería que supiera que su llamada me había despertado, aunque no fuese así.

— Ah, hola... ¿Te desperté? — preguntó cómo si la respuesta no fuera obvia.

— Sí, así que espero que sea importante — bufé.

— Solo quería saber cómo estabas — contestó.

<< ¿Acaso este tipo era bipolar? >>

— Ve al grano Jesse — rodé los ojos — ¿Qué quieres? — pregunté

— ¿Por qué crees que quiero algo? — contestó con otra pregunta — Lo único que quiero saber es cómo te encuentras — por alguna extraña razón sentí mi estomago revolverse al oír esas palabras, definitivamente este tipo era bipolar.

— Me encuentro bien, ahora iré a dormir — dije con la intensión de colgar.

— No no no, espera — dijo evitando que cortara la llamada  — ¿Estarás mañana en la ceremonia? — preguntó.

— ¿Eso importa? — contesté fría.

— Bueno... — hizo una pequeña pausa — A mi me importa — tragué saliva al escucharlo.

— Vamos Jesse — bufé — No estoy para bromas, tengo que irme y te juro que si vuelves a llamar te patearé el trasero — le advertí y el rió como si se tratara de alguna especie de broma.

— Solo contéstame y prometo no molestarte lo que resta de la noche... ¿estarás? — suspiré rindiéndome y no me quedo de otra más que contestarle.

— Si, estaré. Pero te advierto que si buscas hacerme cualquier tipo de broma, pedirás al cielo no haber nacido — el rió pero yo hablaba enserio, ¿como es que un día me odia y el otro se preocupa?

— ¿Siempre amenazas a las personas cuando intentan ser amigables? — rogué a Dios que sus cuestionamientos pararan de una buena vez.

— Solo cuando se que en realidad no buscan ser amigables — contesté.

— No quiero tener problemas contigo Madd — suspiró —Solo busco poder tener una buena relación contigo— sus palabras sonaban sinceras aunque en el fondo sabía que no.

— Bien — bufé —Entonces si lo que quieres es llevar una buena relación conmigo lo primero que debes hacer es dejarme dormir, estoy bastante cansada — contesté, aunque en realidad no pensaba llevar una buena relación con Jesse Foster, solo buscaba que me dejara en paz.

— Esta bien, te dejaré — suspiró — Te veo mañana entonces— apreté ambos ojos deseando que eso no sucediera, aunque claramente iba a pasar.

Colgué y volví a cerrar mis ojos, pero esta vez para intentar dormir. La llamada me había quitado el sueño, tenía muchas cosas en mente; La ceremonia, las regionales, mis amigos y familia en Houston, Cristine, Jesse, el secuestro.
Lo que más me aturdía fueron las palabras que sacó Mara en el estacionamiento sobre el supuesto secuestro donde habíamos estado todos nosotros, eso definitivamente no me lo esperaba, este era mi miedo desde el comienzo...encontrar respuestas que quizá no hubiese querido, pero... no puedo quedarme sin saber nada sobre el porque, cuando y como sucedió todo esto.
Puedo decir que nunca en mi vida me había sentido tan confundida como ahora, mi vida había cambiado en cuestión de minutos. Hace unos días me encontraba con Alessia y los chicos hablando sobre cosas estupidas que nos pasaban en la escuela, en Houston...donde debería estar, donde mi nueva vida está y no pienso dejar todo lo que me ha costado volver a construir por personas y situaciones del pasado. Aunque quisiera terminar con esto de una buena vez... no puedo, quedarme sin saber nada sobre ese acontecimiento me generará más dudas el resto de mi vida, y ahora tendré que averiguar lo que fue de ese secuestro que seguramente en un tiempo marcó mi vida como la de mi familia.

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Nueve treinta de la mañana y Nani ya se encontraba levantándonos a todos, escuché el azotón que dio en mi puerta justo después de salir de mi habitación y en ese momento abrí los ojos, encontrándome con aquel vestido blanco que me pondría esta tarde, bufé y tapé mi rostro con una de las almohadas. Cuando de repente escuchó una vez más la puerta abrirse

— Ya se, ya se Nani. Me levantaré en unos minutos más, solo déjame procesar el martirio por el que pasaré hoy — dije aún con la almohada en el rostro hasta que sentí mi cama hundirse

— ¿ Te parece si procesamos el martirio juntas? — preguntó una voz dulce que claramente no era Nani, sino Sophie

Quité la almohada de mi rostro

— Creí que tú eras la más entusiasmada — dije con los ojos entrecerrados y la voz débil, la luz de la habitación me lastimaba.

— Así era, pero en realidad solo será uno de los miles de eventos que tendremos — se encogió de hombros, parecía desanimada.

— ¿Miles de eventos? — pregunté y ella asintió — Quizá este sea el único en el que yo esté, y eso porque no tengo opción — me impulsé un poco para lograr sentarme.

— ¿No te piensas quedar? — preguntó y yo negué con la cabeza, sus ojos ya no tenían el brillo que ayer reflejaba al comprar su vestido.

— Tengo una vida allá Sophie, no puedo. Además no tengo nada que hacer aquí, lo único que he conseguido al llegar aquí es confusión y degradó — contesté fría .

— ¿T-te desagradamos? — su voz se cortó al preguntar y su rostro lucía preocupado.

— Oh claro que no, tú no... ni ninguno de ustedes, simplemente hay gente en especial que no es de mi agrado por algunas actitudes que toman — la preocupación de su rostro desapareció y parecía lograr comprender.

— Supongo que hablas de Jesse, y quizá sobre Cristine también, a mi abuela no la puedo defender del todo, ha hecho muchas cosas de las que a veces no logró comprender su porqué, pero si de algo estoy segura es que nos ama, incluyéndote; tal vez no lo veas así pero quieras o no todos somos familia, y aunque no hayamos pasado tiempo como una, quizá ella trata de compensarlo con todo esto. Ninguno de nosotros vive aquí Madd, así que no eres la única fuera de tu hogar, todos tenemos una vida ya construida... pero también hay una pequeña parte aquí. Una de las razones por las cuales todos queríamos venir fuiste tú — me quedé pasmada al escucharla.

— Creímos que nunca te volveríamos a ver, y cuando Cristine anunció que llegarías ninguno de nosotros dudo en venir — esbozó una sonrisa sincera y yo bajé la mirada, aunque me costaba reconocer lo que había dicho, tenía razón.... ellos también eran mi familia.

— Y en cuanto a Jesse, creo que deberías darle una oportunidad, no quiero que me consideres una chismosa pero anoche mientras subía logre escuchar un poco de tu charla con el — bufé al escucharla y solté una pequeña risa.

— Quizá en verdad solo quiere conocerte y lograr tener una buena relación contigo, podrá ser un idiota pero también en un tiempo fuiste importante para el... así que no creo que sea un completo idiota como para arruinarlo todo después de tantos años — ambas reímos, no tenía respuesta a todo lo que me había dicho, quizá tenía razón en ambos temas, tal vez yo estaba siendo bastante negativa.

— Bueno, creo que es hora de que nos preparemos para la ceremonia, será mejor que me vaya y te deje — suspiró y se levantó de mi cama dirigiéndose a la puerta

— Sophie... — solté y ella volteó. — Gracias — asintió con una sonrisa y salió de la habitación.