Capítulo 2

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Me desperté con todo el cuerpo entumido, me dolía el cuello y la espalda adoloridos. Me levante del piso, vi de espaldas a aquel sujeto con el que había compartido habitación.
Su espalda se marcaba y su piel canela resaltaba.
Intente atacarlo por la espalda, me subí a la cama sin hacer mucho ruido, pero el fue más rápido que yo y me detuvo en el intento, aprisiono mi cuerpo entre él y la cama, sujetaba fuertemente mis muñecas hasta punto en que me dolía.
Su mirada penetrante, recorría mi rostro como queriendo grabarse cada milímetro de mi rostro, por un instante muy largo. Al notarlo el sonrió.
-Quieres probar mis labios?- me miró a los ojos, me dio una sonrisa de lado y poco a poco comenzó a acercarse a mi, cuando estábamos a pocos centímetros cerré los ojos instintivamente pero pasaron algunos segundos pero no pasó nada, abrí los ojos y el me miraba riendo.
-Creiste que te iba a besar?- me quedé en shock- pues si lo haré...
Sin previo aviso beso mi cuello, eso envío miles de sensaciónes por mi cuerpo.
Se levanto de la cama y se limitó a terminar de vestirse, me quede tirado en la cama mientras él salía de la habitación.

Minutos después que se fue me levante de la cama y vague un poco la habitación hasta que entró una chica con uniforme de sirvienta, traía una charola llena de comida; me miró y dejó la charola en una mesa de centro la cual estaba entre dos sillones. Al salir hizo una reverencia, me acerque a aquella mesa y al ver toda esa comida mi estómago comenzó a rugir, me senté en uno de los sillones y comencé a comer. La comida estaba deliciosa y me recordó a la comida que preparaba mi madre.

Al terminar de comer, baje la charola a la cocina y planeaba lavar los trastes, pero aquella chica no me dejó. Así que decidí dar un paseó por la casa, comencé por la recepción la cual era bastante grande y luminosa, después seguí al cuarto de televisión en el había una pantalla bastante grande y a los costados habían algunas consolas y un montón de videojuegos, además de unas enormes bocinas y un cómodo sillón.
Seguí mi camino y llegué a lo que parecía ser la biblioteca o estudió. Una de las paredes estaba completamente tapizado de libros, había tres escritorios y en cada uno había una computadora, había una pequeña sala y una mesa de centro. Me acerque a la estantería más baja y comencé a observar los títulos que habían. Cuando e aburrí prosegui mi camino, hasta que me tope con una puerta que parecía dar al jardín, me acerque, pero dos tipos con traje me impidieron salir, mire a aquellos tipos y ellos ni se inmutaron.
-Yo cuidaré de él- alguien habló detrás de mi, gire y me encontré con uno de los tipos que me habían traído hasta aquí, él era un tanto alto, tenía cara de bebe, cabello castaño y una nariz un poco grande a lo común.
Aquellos tipos asintieron y me dejaron pasar, abrieron la puerta y salí al jardín seguido por aquel chico.
El jardín era muy hermoso y grande, había montones de flores y árboles; comencé a pasear por el jardín hasta que llegué a unos columpios que estaban al fondo del jardín.
Me senté en uno y comencé a balancear lentamente. Un recuerdo invadió mi mente; tenía unos seis años y mis hermanos ocho y nueve, estábamos en un parque al que mis papás nos habían llevado. Mis hermanos y yo competiamos por ver quien se columpiaba más alto y ellos nunca me dejaban ganar.
Cuando regrese a la realidad una lágrima descendía por mi mejilla, además de que ese chico estaba sentado junto a mi, me miraba con el ceño fruncido.
-Hola soy Jeon, pero puedes decirme Kook- extendió la mano hacia mi pero me nege a aceptarla.- ¿Como te llamas?
-Jin- respondí sin mirarlo.
-¿Te gusta el jardín?
-Sí
-Sabes es un proyecto de mamá, a ella le encanta la jardinería y todo eso, pero como ahora no esta nosotros cuidamos el jardín.
-.....
-Se que estas molesto y que no quieres estar aquí, pero es mejor que te vallas acostumbrando, no saldrás de aquí hasta que Nam Joon se cansé de ti y busque a alguien más.

Dicho esto el tal Kook se fue dejándome sólo en mi miseria.
El resto de la tarde la pase en aquel jardín hasta que empezó a oscurecer. Entré a la casa y de inmediato un exquisito olor inundó mis fosas nasales. Seguí aquel aroma y llegué a la cocina; aquella chica preparaba la cena.
-Creo que necesitas ayuda...- esa chica me miró y sonrió apenada.
-No, esta bien puedo sola...
-Segura?....- me miró por un momento y aceptó.
-Humm está bien, me puedes ayudar a terminar de cortar los vegetales?- asenti y puse manos a la obra.

Cuando todo estaba listo me lave las manos y me despedí de la chica.
Antes de salir le dije.
-Por cierto me llamó Jin.
-Yo me llamo Soo Min.

Al llegar a las escaleras la puerta principal se abrió y entró el tal Nam Joon entró seguido de dos tipos con traje. Él me miró y me sonrió, yo sólo me límite a subir hacia la habitacion; antes de abrir la puerta me detuve y sonreí como tonto, mis mejillas se sentían caliente.
Sacudi la cabeza y entre a la habitación, me deje caer en el sillón me quede viendo a la nada.
-No vas a cenar?- Nam Joon me saco del trance.
-No tengo hambre- dije sin mirarlo.
-Humm y eso?- él se paro frente a mi y se inclinó hasta quedar a centimetros.
-Sólo no tengo hambre- lo mire por un instante y desvíe la mirada.
-Pues yo si tengo hambre- Su voz tomo un tono más grave y su mirada se oscurecio, pasó su mano por detrás de mi cabeza y comenzó a besarme salvajemente, me rehusaba pero termine por rendirle y me deje llevar por ese beso.
Me levante del sillón y pase mis brazos por su cuello y el poso sus manos en mi cadera para acercarme más a él, me llevo hasta la cama sin romper el beso, me tiro a la cama y se subió en mi....

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Hijo de la mafia [NamJin] (lemon +17)Kde žijí příběhy. Začni objevovat