Hijo de la mafia [NamJin] (lemon +17)

Capítulo 30 (final)

El tan ansiado día había llegado, Jin y Namjoon unirían sus vidas legalmente para ser una familia oficialmente.

La cernemonia había comenzado, en el recinto estaban las personas más importantes para la pareja; ambos se miraban con los ojos brillantes y una sonrisa que nada del mundo les haría borrarla.

Para ser sinceros era una ceremonia pequeña pero perfecta para aquellas dos personas.

La hora de los votos había llegado y era hora de dejar fluir sus palabras, esas que venían sólo del corazón.

-Jinie, mi hermoso Jinie. Hemos pasado por tantas cosas, desde cosas dolorosas hasta cosas que nos llenan de alegría pero hemos podido pasar todo aquello gracias que nos tenemos el uno al otro; se que he cometido errores y tu has sabido perdonarlos bien dicen que el amor no juzga, el amor todo lo vence y todo lo soporta, contigo lo comprobé.
Jin de verdad te amo y agradezco que me permitas pasar el resto de mi vida contigo.

Las lágrimas se hicieron presentes en Jin quien sonreía de oreja a oreja.

La ceremonia finalizó con muchos aplausos y buenos deseos, así que era hora de la pequeña recepción que se había organizados en la casa de la madre de Namjoon.

Era una pequeña reunión donde estaba su familia y seres más cercanos.

-Quiero hacer un brindis- JungKook atrajo la atención de todos en la fiesta- quiero desearles lo mejor en la vida y la felicidad eterna a mis dos hyungs que a pesar de todo han sabido salir adelante, además de que fui testigo de sus demostraciones de amor y lo digo literalmente- todos en el lugar rieron, logrando que las mejillas de Jin tomaran una tonalidad rojiza.

La pequeña reunión iba pasando bastante tranquila, la hora del baile llego y la pareja tomo lugar en el centro de la improvisada pista. La música comenzó lenta dejando a aquellos dos en su mundo perdidos.

Estás sacando un tipo diferente de mí. 
No hay una red de seguridad debajo. Estoy libre cayendo en ti. 

Te enamoraste de hombres que no eran como aparecían. Sí, atrapados en una cuerda floja, ahora estamos aquí. 

Namjoon cantaba en el oído de Jin mientras este estaba  recargado en el hombro de su ahora esposo, la pareja estaba tan absorta en su mundo que no noto cuando más parejas se sumaban a ellos a su alrededor.

Al final de la noche ambos habían bailado con sus seres queridos, pero el baile mas tierno de todos había sido cuando cada uno bailo con su pequeña hija.

La fiesta había terminado, y lo más esperado para ambos, pero en especial para Namjoon y eso era la luna de miel.

Después de haber dejado a su pequeña al cuidado de la madre de Namjoon, ambos se dirigieron al aeropuerto.

-A donde iremos Joonie?- pregunto un curioso Jin.

-Es un secreto bebé, no seas desesperado- Namjoon atrajo a Jin por la cintura y deposito un casto beso en los labios de su ahora esposo y dejo reposar su cabeza en el hueco del cuello de Jin, para terminar embriagado del aroma de su esposo.

(...)

Después de una vieja de unas cuantas horas, la pareja llego a su destino, Jin se sorprendió al ver que su destino había sido Hawaii.