❛White Night❜ 🠔 {YoonJin}ܟ

02. ❛ Malos días❜

—¿Lo admiras como para tener su polla entre tu pequeño trasero de crío? —pregunté obsceno, volviendo a sonreír caluroso cuando vi en él un tomate. Dio indicios de querer golpearme y rápidamente lo frené, tomando con debida delicadeza su antebrazo— Dudo que Gasparín se enamore de un chiquillo tan posesivo, de tal modo que... Te recomiendo parar ese comportamiento irrazonable —y suspiré, flaqueando mi rostro de superioridad—. Ve a descansar, llámalo o qué sé yo. Hace unas mañanas recogió toda su mierda y se fue, quiero pensar que volverá para clases. Y ojalá muerto, ten una bonita tarde. —Me di la vuelta y cerré lentamente la puerta, con su rostro aún petrificado y el mío expresando su obvio cansancio. Me acerqué al mueble que compartía con el monstruo ése y busqué rápidamente mis pastillas, apunto de colapsar.

Como dije, no fue hasta hace una semana después que nuevamente entramos en conflictos. El tema de mi tapizado no había quedado concluido y, cuando me enteré que el cerdo bastardo de Min había mantenido relaciones sexuales -en la misma maldita cama que yo utilizaba para tomar mi sueño rejuvenecedor-, fue cuando la bomba estalló.

Esa tarde me había ido a descansar con Kookie y conocí a Tae, su compañero de cuarto. Ambos lucían bastante cercanos y estaría mintiendo si dijera que no me puse celoso, porque así fue. En todo momento jugué con la cintura de mi amigo y entrelacé nuestros dedos, buscando la peculiar sonrisa que Taehyung no había quitado en ningún momento de la noche. Me sorprendí de la familiaridad con la que me trató y hasta me sonrojé de lo mucho que me toqueteaba. Era un alfa descarado, pero me agradaba. Esa noche concluí una amistad envidiable...

Y pudo haber sido el mejor día en años si no fuera porque a la mañana siguiente, me encontré al petulante ''prostituto'' personal de Yoongi. Salía de nuestro cuarto y lo observé con una ceja alzada. Su ropa estaba desordenada y apestaba a Min. El problema inició cuando pasé por su lado y lo empujé por equivocación. Lo malditamente juro por mi difunta abuela que no fue mi intención. Pero no era hasta que, mientras exageradamente me empujaba de vuelta, que empezó nuestra riña. Yo pidiéndole disculpas y él chillando. Yoongi salió de la pieza y varios hicieron lo mismo, observando en nuestra dirección. Me harté y grité, diciéndole que no era para tanto y que ya había sido suficiente del teatro que había armado.

Entonces lo dijo. ''¿Sabes qué? Olvídalo, tienes razón. Este es un teatro, ¡como el que armamos Yoongi y yo en tu maldita cama, bastardo!'' y se fue dignamente. O al menos así quiso verse, porque después de eso empecé a reírme como loco. ¿Quieren saber por qué lo hice? No tengo ni la menor idea. Sólo me dio por actuar así. Empecé a reírme de la rabia, quizá porque no quería verme pisoteado. O tal vez porque todos nos observaban en aparente asombro. Le grité que lo llamaría para pedir su servicio y entonces me adentré a nuestra habitación, cerrando detrás nuestro y empujando a Yoongi contra la cama.

—¡Estúpido guarro de mierda, ¿no tienes respeto por tus compañeros?! ¡¿Sueles ser así de inconsciente todo el tiempo?! ¡¿No querías que respetara tus gustos, eh, no me lo pedías hace días?! ¡Entonces respétame de vuelta, imbécil! —Lo dije tan rápidamente, mirando con desesperación las sábanas revueltas que evidenciaban cualquier accionar que pudiera haberse llevado a cabo ahí, que ni siquiera me molesté en golpearlo. La ira me cohibía. Toda esta circunstancia me tenía emocionalmente mal. Sólo rasguñé su camiseta y agaché la vista, sentándome en su regazo después de haberlo montado.