Not a Kidnapper's Hands~Yoonmin

Capítulo 25

JIMIN POV

Desperté a causa de una mano que daba suaves caricias en mi mejilla, así que abrí los ojos y me encontré con mi dulce ex-secuestrador. Sus labios estaban corvados formando una linda sonrisa y sus ojitos felinos estaban enfocados en los míos. Me sonrojé y le sonreí aceptando que la imagen que el y yo estabamos interpretando en ese momento era hermosa a mis ojos. Quería despertar así siempre.

-Buenas noches-dijo acariciando mi cabello y acercandose a mis labios. Dio un beso muy corto en estos y continuo recorriendo mi piel desnuda.

-Es verdad, ya es de noche-reí sin dejar de mirar a Yoongi, con el gran miedo de que fuera un sueño y estuviera por despertar- deberíamos levantarnos para comer algo.

Yoongi me vio algo divertido, dándome la ligera sensación de que sabía algo que yo no, y ese "algo" estaba relacionado a mi. El se acercó y me besó con la suavidad que parecía carecer, excepto cuando estábamos a solas. Seguimos con la corta sesión de besitos hasta que volví a Tierra firme y supe que debíamos levantarnos. El asintió y se levantó para buscar si ropa, que estaba mezclada con la mía por todo el piso de la habitación. Cuando se levantó, pude ver su cuerpo por completo. Sus cicatrices y músculos ligeramente marcados, las marcas de unas uñas y chupetones hechos por mi.
Dios! Se ve perfecto!

Comenzó a vestirse y sonreí al enterarme del puchero mental que hice por dicha acción de parte de "Suga".  Me senté y sentí la dolorosa punsada allá abajo, lo cual hizo hacer una mueca de la que Yoongi se rió.

-Y crees que así puedes bajar a cenar?- se burló tomando mi camisa y lanzandola hacia mi-yo voy por comida, tu quédate aquí.

Se acercó para darme un suave beso en la frente y retirse.

-hyung!-llamé su atención- te amo.

El sonrío ante mis palabras.

- yo también te amo, Mochi.

YOONGI POV

Salí de la habitación consciente de que olía a sudor, pero la verdad es que no queria bañarme aún. Además de que me sentía demasiado relajado para tocar agua fría. Caminé por los pasillos hasta llegar a la escalera que daba al piso inferior, en el cual probablemente estarían los hermanos de Jiminnie, Jhope y Taehyung. Al llegar al final de las escaleras, me encontre con la mesa gigantesca, en donde estaban sentados cuatro personas... Jhope, Taehyung y... el señor y señora Kim.

No puedo negar que sentí temor, pero una de las ventajas de ser Min Yoongi es disimular que el miedo no esta en su diccionario. Cuando todos notaron mi presencia, me apresuré a hacer una suave reverencia, pero no pasó ni un segundo cuando escuché una de las sillas ser empujada violentamente. HoSeok se había levantado e ingenuamente intentó golpearme, sin embargo, se nottaba que no tenía experiencia ni habilidad en esa area, como para realmente ser capaz de vencerme, así que solo detuve el golpe con la mano y lo torcí. Hoseok se arrodilló por el dolor hasta que le solté.

-No planeaba causar ningún problema, solo quiero llevarle algo de cenar al enano. Si me disculpan-intenté ir a la cocina, pero la voz de Taehyung se hizo conocer.

-Como podemos saber que no estas jugando con él? Eres su primer amor y te ama con locura desde hace tiempo, pero tu lo abandonaste. Y aun así planeas que te dejemos caminar por nuestro hogar como si nada hubiera pasado?-reclamó él sacandome de quicio.

-Comprendo que mis hijos están siendo muy hostiles con usted, pero no hay manera de expresar nuestra preocupación de manera sutil-se expresó esta vez la señora Kim. Fue entonces donde decidí hablar de la manera más seria y sincera que nunca.

-Yo amo a Jimin y cada cicatriz en mi cuerpo representa el dolor que siento cuando no lo tengo cerca. Le causé daño y por eso creí que irme seria la mejor manera de pagarle a Jimin por mis malas acciones, pero no hubo día en estos meses en el que yo no deseara saber de él. Ya me decidí a dedicar mi vida a ese lindo mocoso y nunca jamás me retractaré de eso. Podrás odiarme, cazarme, encerrarme tras las rejas por lo que he hecho, pero siempre volveré para protegerlo.

-Que le hiciste?-preguntó el padre cabizbajo.

-fui yo quien lo secuestró hace unos me--no terminé la frase cuando escuché al señor Kim levantarse y tomar la silla para golpearme con ella.

Me lo merecía...

Una de las patas golpeó mi cabeza y con la fuerza del hombre, logró noquearme. Antes de que pudiera seguir pensado, todo se volvió negro y frío...

Lo siento, Jimin...