13: Lado "A"

541 57 21
                                    

Narrador omnipresente.

La cafetería Fairy Tail, extraño nombre ¿no? "Cola de hada" ¿Las hadas tenían cola? Pues no se sabía ya que para varias personas estás no existen, entonces ¿Porque le pusieron de esa forma? Bueno simplemente que el dueño, el cual casualmente es el coordinador de la escuela, se le ocurrió el nombre cuando estaba acompañado de una peculiar planta verde en pedacitos y enrollada en un papel, bueno en fin.

(N/A: Por si se lo preguntaban, si, la cafetería se llama igual que ella preparatoria)

Toda la pandilla se encontraba ahí, Levy, Erza, Gajeel, Juvia, Jellal, Gray, obviamente Lucy y un lastimado Natsu, al cual Lucy tenía que ayudar a que pudiera tomar de su malteada de fresa, pobre en verdad que Erza y Levy lo habían echo sufrir esa mañana.

-Espera Lucy, estoy bien, estoy bien- intento tomar el solo de su malteada -Auch.

-Cariño deja de hacerte el difícil, vamos te ayudaré- el chico se sonrojó al escuchar "cariño" salir de la boca de su amada rubia.

-Está bien, nena, todo por mi muñequita- sonrió el chico acariciando la mejilla de su novia haciendo que los chicos pusieran una expresión de asco pro lo empalagosos que eran y que las chicas soltaran un suspiro como si fuera una telenovela mexicana.

-No es posible que unas chicas te haya dejado así flamitas, qué vergüenza- dijo Gajeel mientras reía.

-¿Que? ¿Algún problema Gajeel?- Erza se levantó de su asiento y empezó a tronarse los dedos.

-¿acaso crees que las mujeres somos más débiles?- preguntó enojada la pequeña peliazul.

-No es que más débiles si no que más- y se callo al recibir un golpe en la cara de parte de su "querida" amiga pelirroja.

-¡Je! humillado por una mujer que pateti- no puedo terminar porque su amiguita Erza le dio un golpe aún más fuerte provocando un "Gray-Sama" por parte de su amiga peliazul.

-¿Alguien más?-  gritó la peliroja enojada haciendo que todos quedarán callados, incluyendo a los que no estaban en esa mesa.

-Erza cálmate un poco- intento hablar Juvia mientras él daba palmadas en la espalda intentando que se sentará.

-S-Si, vas a hacer que nos echen- dijo la rubia -de nuevo- una pequeña gota cayó por su frente.

-Hm si lo pones de esa manera está bien- se volvió a sentar como si nada hubiera pasado, "Que bipolar" pensaron la mayoría de los comensales de ahí e igualmente sus amigos.

-Aquí están sus hamburguesas chicos- la mesera puso cuatro platos con hamburguesas gigantescas, más que el rostro de algunos.

-Mm a comer- Natsu froto sus manos preparándose para tomar la grasosa hamburguesa entre su manos y darle un mordisco.

-No acabarás primero que yo cerillo andante- gritó Gray empezando a comer la hamburguesa.

-¡No me quedaré atrás!- el chico de piercings imito la acción de Gray.

-¡Que las chicas también pueden competir idiotas!- Ahora Erza se había unido a ellos, catsup, mostaza entre otros líquidos sin identificar salían volando por toda la mesa, manchando todo a su alrededor incluyendo a las chicas y al chico.

-¿No se supone que compartiríamos la comida?- preguntó una pequeña azul en vos baja a su mejor amiga.

-No los interrumpas, se pondrán peor de lo que ya están- susurró la rubia mientras algo de mostaza caía en su cabello.

-¡Usted puede Gray-Sama! ¡No se quede atrás!- apoyaba la chica peliazul con grandes pechos a su amado.

Después de esa extraña escena donde lo que mayormente se veía era comida saltando por los lados y los chicos comiendo ¡No! ¡Mejor dicho tragando! Decidieron salir a dar una vuelta por el vecindario o bueno la pequeña parte urbana del pueblo que contaba con varias cafeterías, uno que otro edificio, escuelas primarias y algunas universidades, entre otros puestos de zapatos, ropa, etc.

-Miren lo que trajo la basura- se burlo un chico rubio apoyado en la entrada del lugar.

-Lo que faltaba, los niñitos de Fairy Tail- dijo una chica de cabellos negros y chaqueta de cuero.

-¿Que hacen aquí demonios? Saben que este no es su territorio- dijo enojado el chico pelinegro.

-Ah pequeño Gajeel, ya no estamos en la secundaria el pacto acabo- río un chico de cabellos grises -Los demonios andamos donde queremos ¿O no Jackal?

-Claro que si Ezel- respondió el rubio con una sonrisa maliciosa en su rostro.

El rubio empezó a pasearse al rededor de la pandilla, los veía a todos, los reconocía a todos, sabía cada una de sus debilidades y lo que les afectaba, excepto por el pelirosa, el era el que tenía más ventaja ya que no sabía nada de él.

-Gray Fullbester- se puso al lado del chico mencionado -Tú padre era un gran miembro en nuestra pandilla, que mal que se retiró, oh por cierto ¿Aún golpea a tu madre?

-Eres un bastarado- estaba a punto de darle un golpe en la cara pero una pelirroja lo detuvo.

-No le hagas caso Gray, lo único que provocarás es una pelea callejera y que el shérif nos detenga de nuevo- intento calmarlo la chica con una voz sería y serena.

-¡Titania! ¿Que me cuentas de ti?- preguntó una chica de cabello verde con mirada maliciosa -¿Tú padre aún se acuesta con todas las mujeres del pueblo y te da regalitos para que no le cuentes a tu madre?

-Kyoka- susurró con desprecio la chica de cabellos rojos, la linda rubia se acercó a ella con una mirada triste y le dio unas palmadas en la espalda intento que dejara de pensar en eso, el chico de cabellos azules también quería acercarse a ella pero la rubia le había ganado.

-¡Miren quien la está consolando! ¡La princesita! Dime Lucy, ¿Como se siente que después de que tu padre no volviera de la guerra tu hermana mayor fuera a buscarlo porque tú no parabas de llorar? ¡Cuando todos sabemos que tú padre está muerto!

Adoraban molestar a la rubia, les gustaba hacerla llorar desde que estaban en primaria, sus gritos eran música para sus oídos y sus lágrimas eran como el trofeo que más les gustaba ver, pero ¿Porque la agredían más a ella? Simplemente porque era la más débil de todas ellos, tal vez solamente porque la conocieron cuando era pequeña o simplemente porque era la verdad.

-¡Que no está muerto! ¡El aún está vivo y mi hermana también!- gritó una rubia a punto de llorar, eso le dolía, que hablaran de su padre y de su hermana.

-Seguro quemaron su cadaver en una hoguera para no dejar rastros- se burlo la chica de cabello verde.

-¡Cállense!

-Y a su hermanita seguro que también la quemaron- comentó el chico de cabellos grises.

-¡Ya basta!

-¿Que nos vas a hacer? Débil- preguntó de nuevo la de cabellos verdes con una gran crueldad y arrogancia.

Esa gota fue la que derramó el vaso, ya no soportaban el que se burlaran de ella, que la humillaran de esa forma y con la palabra "débil" habían colmado su paciencia.

Lo único que se puedo ver es cómo la chica llamada "Kyoka" caía al piso mientras sangre caía de su nariz para luego caer fuertemente contra el pavimento y a la rubia con su puño extendió, lágrimas en los ojos y una gran expresión de odio, todos en ese momento se sorprendieron al ver lo que había echo, la pequeña Lucy que no dañaría ni a una mosca había golpeado a alguien, sin duda está sería una pelea interesante.

Extraños y divertidos 50sWhere stories live. Discover now