¿Dónde estás?

[PARTE 29]

(POV. NARUTO)

La cama tembló, me desperté justo para ver a Sasuke abrir la puerta de la habitación y salir, estaba seguro de que había tenido otra pesadilla. En el último mes he dormido en mi casa por lo que no he estado con Sasuke, estaba seguro de que se había ido a dormir al sofá, habíamos decidido vivir en mi casa así Sasuke no tendría malos recuerdos. Me levanté y le seguí, estaba en el sofá, sentado, mirando a la nada.

-¿Pesadillas? ¿Estás bien?.- pregunté antes de sentarme a su lado y observarle.- ¿Quieres agua?.-

-Lamento haberte despertado, estoy bien, se me pasará... Puedes volver a la cama, estarás cansado.- dijo él con calma sin apartar la mirada del suelo.

Cogí su mano y entrelacé nuestros dedos, me sentía en calma, por fin, apoyé mi cabeza en su hombro y dejé salir todo el aire. Él me miró, pude notar cómo se debatía entre decirme algo pero, al final, no dijo nada y se quedó mirando a la nada, ausente.

-Vamos a dormir, Naruto, estarás cansado. Aprovecha para dormir mañana también, vamos.- dijo antes de levantarse y ayudarme.

Al día siguiente me levanté casi al mediodia, suspiré mientras pensaba que las cosas iban a ir mal si no hacía algo, estábamos igual que hacía una semana. Sasuke no estaba pero había una nota en la nevera diciendo que había ido a comprar.

- Ojalá hayas ido a comprar y no a buscar piso.- susurré mientras me servía un café.- Dame una última oportunidad, te prometo aprovecharla.-

Organicé un poco la casa y esperé a que viniera Sasuke. Tardó bastante así que comencé a marcar su número pero tocaron a la puerta.

- Gracias Naruto, no encontraba la llave.- dijo él cargado de bolsas.- El gran mercado estaba cerrado así que fui al barrio mas cercano pero tardé mucho, perdona, enseguida me pongo con la comida.-

- No hay prisa, te ayudo.- dije cogiendo algunas bolsas y dándome un beso de bienvenida.- Pensaba que te habías ido a buscar piso lejos de aquí.-

- ¿Porque? No necesito un piso, tengo uno ahí enfrente, además, aun no me has echado de tu casa.- dijo mientras cerraba la puerta y dejaba las cosas.-Cocino yo ¿Te parece? Ternera al vino y pasta a la parmesana ¿Te gusta?.-

Asentí y me acerqué a verle cocinar, me contaba que había encontrado una tienda de comestibles, cerca de allí y que tenía frutos secos. Me acerqué por detrás cuando pueso los platos y lo abracé con delicadeza.

- Te amos, Sasu... Te amo... Hace mucho que no te llamo "Sasu" ¿no?.- dije con cariño. Él terminó de servir los platos y nos sentamos a comer.- ¿Estás bien? ¿Te falta algo?.-

-No... Espero que te guste.- dijo con voz despreocupada pero me observaba de reojo.- ¿Está bueno? ¿Te preparo otra cosa?.-

-Está muy bueno, gracias, hermoso... ¿Saber? Nunca sé si te agradezco lo suficiente lo que haces por mí. Gracias por estar a mi lado, te amo.- dije con calma. Él se me quedó mirando, otra vez dudando sobre si hablar o no.- Dime... ¿Te pasa algo?.-

Suspiró y volvió a comer, decidí no presionarlo y cambiar de tema de conversación pero él apartó su plato y se frotó el rostro con abatimiento.

- La señorita Terumi lleva varios días siguiéndome y llamándome. Sobra mencionar que yo no contesto a sus llamadas pero... Siento que Kabuto está furioso... O peor... Nagato estará en cólera.- dijo con calma.- Tengo miedo, Naruto, miedo de que te hagan algo a ti.-

- Yo tengo más miedo de lo que te hagan a ti. Sasuke, no soporto verte sufrir, me encanta mimarte y oír tu risa pero me mata verte llorar. De Nagato se puede encargar Deidara, supongo que si se lo pido también Karin me ayudará y... Quizás deba hablar también con Mito... Es una mujer admirable.-

Sasuke me miró como si no terminara de comprender mis palabras y yo suspiré con cansancio, tal vez sólo deba dar una breve explicación.

-Mito... ¿Es alguna amiga tuya? ¿O una ex?.- susurró con curiosidad y nerviosismo.- No hace falta que involucres a nadie...- 

-Mito... Es la madre de mi madre... Lo que no significa que sea mi abuela. Pero es una excelente espadachín, su manejo con las espadas es realmente asombroso, además trabaja en la Policía Naval. Es la Directora General de la Policía Naval de Japón.- expliqué con calma.- Estarás a salvo... Y mi primo no te hará nada, si te soy sincero, no recordaba a Nagato, éramos muy pequeños la última vez que lo vi.-

Cuando terminamos de comer fui a llamar a Mito quien me comentó que podría ir mañana a visitarnos. Se lo agradecí muchísimo antes de colgar y volver con Sasuke quien estaba mirando la televisión con curiosidad.

-Cuando todo esto acabe... Nos casaremos, si quieres. Serás feliz, pero no te voy a obligar a nada.- Susurré en su oreja antes de darle un beso.- Además... Falta poco para tu cumpleaños.-

- No quiero regalos, Naruto. Te quiero a tí.- susurró contra mis labios antes de besarme con ganas.- Te amo, no lo olvides.-