¿Dónde estás?

[Parte 18]

Dedicado a: YulissaJanillePasari

(POV. NARUTO)

Me desperté y noté un peso en mi hombro, me giré para comprobar que Sasuke seguía durmiendo en mis brazos con una sonrisa tan hermosa como él. Estaba tan feliz de que me hubiese elegido que olvidé ir a poner la denuncia contra aquellos dos idiotas, menos mal que Sakura se encargó de todo, lo abracé antes de ir a hacer él desayuno y llevarlo a la cama.

-¡Naruto! No, no... Yo debí encargarme del desayuno, además... No quiero manchar las sabanas.- dijo. Parecía sentirse muy culpable y no sabía porqué.

- No pasa nada, Sasu, si se mancha lo pondré a lavar.- dije con una sonrisa antes de sentarme a su lado en la cama y mancharle la nariz con un poco de crema del café.- Ahora eres un payaso, porque tienes la nariz manchada... Pero eres mi payaso favorito.-

Él sonrió y me manchó la nariz de vuelta, me lancé a besarlo pero balanceé una de las tazas de café, manchando la cama, y Sasuke se paralizó, no comprendía qué pasaba hasta que vi la sábana manchada, Sasuke suspiró y habló antes de que yo pudiera.

- Intento... concienciarme... De que tú... Tú nunca... Me pegarás... Pero, no es tan fácil, Naruto, perdón. Voy a poner la sabana a lavar.- yo la sujeté en su lugar y la dejé en él suelo antes de sacar el edredón y lanzarlo al suelo , volví a acostarme y lo abracé de la cintura antes de besarle la frente.- ¿Qué pasa? ¿Porqué sonríes?.-

- Porque quiero quedarme en la cama contigo, luego pondremos la lavadora. No, Sasuke, jamás te pegaré. Tómate él tiempo que necesites, no pidas disculpas.- dije con una sonrisa.- Se me encogía el corazón cuando te agachabas esperando unbgolpe porque rompías algo, o decías tu opinión... Sasuke, no.... No te haré daño, y puedes acudir a mi cuando lo necesites. Quiero que confíes en mí.-

Sasuke sonrió con amor y me devolvió el abrazo, escondiendo su rostro en mi pecho y sonriendo.

-Me apetece hacer pasteles contigo, Naruto, mi hermano me trajo cosas para hacerlos pero no sé bien y me daba mucha vergüenza hacerlos para luego traertelos y que no te gustaran.- dijo Sasuke todavía escondido en mi pecho.- Quieres...¿Hacer los pasteles conmigo? ¡No es una obligación! Sólo era una idea para pasar el día...-

-¿Ibas a hacerme pasteles? ¡Oh! ¡Que tierno es mi Sasuke! ¡Eres mi peluchito lleno de azúcar de tan dulce que eres! ¡Sasuke iba a hacerme pasteles!- hablé emocionado, mientras Sasuke reía tímidamente y me observaba con amor.- Sí, quiero hacer pasteles contigo. Sí, sí, pasteles, pasteles.-

Sasuke dejó escapar una risa discreta mientras yo llevaba la bandeja a la cocina y hacía dos cafés más para que pudiésemos desayunar, junto con unas tostadas y lo dejaba en la mesa; se colocó una bata y decidimos desayunar en la mesa del comedor, viendo la tele con calma. Cuando me dispuse a fregar las cosas tocaron al timbre y frené a Sasuke cuando iba a abrir, dándole los guantes y diciéndole que no quería arriesgarme a que viniera ningún idiota a fastidiarle, aunque cuando abrí la puerta, lo que vi me extrañó.

-Buenos días. ¿Está Sasuke Uchiha?- preguntó una chica de pelo morado. Parecía preocupada y estaba muy nerviosa, eché un vistazo a Sasuke y él negó.- Me llamo Konan, fui la tutora de Sasuke... Bueno, sólo quería decirle que Kabuto ha puesto una demanda en su contra para que vuelva a la casa familiar... Si lo ve... Digaselo.-

Konan sonrió con tristeza y Sasuke salió a paso apresurado para abrazarla, ella se quedó atónita y comenzó a llorar preguntando si se encontraba bien y si allí estaba a salvo.

-Pensaba que eras Mei... La señorita Terumi nunca me fue simpática... Konan... No digas que estoy aquí, por favor.- dijo él con calma, la chica negó y se separó para darle una tarjeta.-¿Que es esto?.-

-El dueño... El dueño de Mond's ha fallecido... La clave es 2591... Creo que hay 250.000¥... Me tengo que ir... Si Él me descubre estoy en problemas... Cuídate Sasuke.... Kabuto y Neji te están buscando, Pain y Temari están intentando despistarlos pero no sé cuanto tiempo lo van a lograr...-

Konan le abrazó antes de darle un beso en la frente y salir corriendo para que Kabuto no se diera cuenta de que estaba por allí. Sasuke sonrió antes de cerrar la puerta y comenzar a llorar, Konan no lo había delatado, ella era la que le curaba las heridas del mal humor de Neji y de Kabuto, se preocupaba por él. Le estaba eternamente agradecido.
Le abracé por la cintura y le di un beso en la sien, ahora estaría tranquilo hasta que Kabuto y Neji aparecieran, sabía que tras ellos había una red gigantesca y el líder debía de estar increíblemente furioso.

-¿De verdad estas furioso?..... Eh....¿Nagato?.- susurró Sasuke antes de ir a guardar la tarjeta.

¿Quién era Nagato?