Romántico empedernido, excesivamente egocéntrico, chantajista nivel profesional, capitán de americano e irresistiblemente atractivo. No es su culpa (o tal vez si) que sea perfecto, tiene más años de los que quiere admitir y adora crear fantasías en...
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Mi cabeza punza sin parar, no he abierto los ojos por que el dolor no me deja. Oigo los ruidos de varias personas a mi alrededor pero son como zumbidos. ¿Qué ha pasado?
Oigo un gemido de dolor a un costado mío y en se momento recuerdo a que he venido y que ha pasado. Mi mejor amigo es quien emite ese sonido. Abro los ojos.
Me encuentro con los ojos morados de Scott, del chico que hace unos días no éramos nada. No puedo comprender como una persona puede cambiarte en tan sólo un segundo, sólo le basto un momento de su vida para hacerme suya. Y el presentimiento de que es para siempre me agrada. Sus ojos cambian de color a naranja y si tuviera que describir como lo hacen seria como... cuando dejas caer una gota de jabón al agua, cuando impacta con ella cae lentamente hasta pigmentarse por completo. Así cambian de color los cambiantes y es tan fascinante como la primera vez que lo vi. Miro al rededor mío y noto que Asher tiene amarrado al cazador no se donde consiguió la cuerda y no quiero preguntar. Cassidy esta ayudando a Alex a levantarse.
Y es ahí cuando reacciono. Me levanto rápidamente sin importarme los mareos, sin importarme nada.
—¡Alaska!— sonríe Alex pero sigue estando asustado y tembloroso— yo te escuche, escuche tu voz y...—lo abrazo por que no quiero hablar, Alex es mi mejor amigo y nos entendemos tanto que no necesitamos palabras para saber como estamos—estaba en mi casa y había un tipo con ojos blancos el-el me pidió que le dijera todo de ti y no se lo dije... ya no recuerdo nada más— me abraza más fuerte, como si quisiera comprobar que estoy ahí y lo estaré, siempre.
—no pasa nada, Alex—sonrío— ya esta todo bien—el me mira y frunce el ceño
—¿porqué tus ojos son morados?—pregunta y mi cuerpo empieza a temblar, me he quedado muda
—Cassidy, duermelo—habla Scott y después de unos segundos siento todo el peso aplastarme de Alex. Lo han dormido.
—¿alguien... pu-puede?—digo, vaya, Alex es flaco pero... como pesa. ¿O seré yo la débil?. Scott me quita el cuerpo de mi amigo y lo deja en la cama— ¿porqué lo han dormido?—pregunto
—pregunto de más—dice Cassidy— tienes dos opciones, o le decimos la verdad o le borramos la memoria—suspiro— tú decides
—¿lo puedo pensar?— ellos asienten
—lo llevaremos a mi casa y al cazador, mi padre decidirá que hacer— trago saliva, su padre me odia— y hablaremos, sobre lo ocurrido— agrega Scott—vámonos.
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