Maldita Fantasía (DISPONIBLE EN FÍSICO)

C9:Enigma

—¿Porqué ha dicho eso?—toda mi cabeza arde y quiere explotar por toda la nueva información que me han dado y menos lo soportaré por que Scott me ha dicho... nada. Una vez que me dejo en claro que no compartirá sus poderes y después se fue, se me vino el mundo encima.

—Alaska, no todos los cambiantes son buenos—explica Cassidy

—Scott te ama, Alaska—Asher dice seguro—pero es un maldito necio, iré a hablar con el—y en un segundos, me quedo sola con la chica rubia. ¿Me ama? mi cabeza es un verdadero lío.

—todo cambiante nace con un alma gemela—habla Cassidy después de un rato—los cazadores... los que vimos ayer... no—trago saliva

—¿y porqué me quieren a mi?—pregunto, asustada

—no es nada personal, los cazadores son discriminados por algunos cambiantes y por venganza matan a su alma gemela para que queden igual—explica

—¿y qué pasa cuando matan al alma gemela de un cambiante o no están juntos?—pregunto pero, me da miedo la respuesta

—es como si te quitaran algo, te están rompiendo el alma— dice Cassidy—dios no creo a los cambiantes para separarse si no, para servir a la naturaleza juntos—explica— si, los cambiantes no estamos hechos para estar solos necesitamos una pareja para vivir... muchos cambiantes que han perdido a su alma lo han superado pero ya no son tan poderosos—asiento—los que no, como una flor, se marchitan con el paso del tiempo—suspira— y si no están juntos simplemente no se comparten poderes—todo el aire que estaba reteniendo se esfuma—y no comparten alma

—no se que decir—digo, sinceramente

—los cambiantes que han perdido a su alma, ocupan los altos cargos—frunzo el ceño

—¿porqué?

—porque ellos más que nadie, han sentido el más profundo e intenso dolor que podemos sufrir—y la verdad, no lo quiero sentir—su mente esta despejada de cualquier sentimiento y son buenos en las decisiones por que no les nublan el juicio

—¿me podrías explicar más de los poderes?—pregunto, cohibida

—claro...—habla pero la interrumpen

—perdón por interrumpir pero, Alaska tendrás que venir en unos días— la voz de la madre de Scott se hace presente—John vendrá—le dice a Cassidy y sus ojos se tornan morados

—¿para que quieren que venga?—pregunto, los ojos de Jane que eran azules ahora son grises

—John es el cambiante quien se encargará de tú caso—responde Jane sonriendo

—¿qué caso?—frunzo el ceño—si soy el alma gemela de Scott no es muy diferente a lo que han visto— respondo

—es cierto—dice Jane—pero, no es normal que un cambiante no pueda ejercer sus poderes en su alma gemela—mi cabeza va a explotar, no entiendo

—Alaska, es normal que un cambiante quiera ejercer sus poderes en su alma gemela—explica Cassidy—pero, Scott no puede en ti

—Cassidy puede, yo puedo, Asher puede— interviene Jane—pero Scott no, no tiene ningún poder sobre ti y eso, no es normal.

—¿Vas a dejar de negar a Alaska?—oigo la voz de mi hermano. No respondo.

No puedo tenerla por que le harán daño y eso, es lo que más me duele. Se que no soy el único que tiene miedo a estar con su alma por la culpa de los cazadores pero, si soy el único al no poder ejercer ningún poder sobre Alaska. Ella tiene una especie de bloqueo que le han impuesto. 

—no la puedes negar por una simple razón—continua Asher—la amas

—eso es de todos los cambiantes—le informo. Estamos en mi lugar favorito. La biblioteca, que tiene una puerta directo al bosque

—no, un cambiante la ama en el momento en que ejerce sus poderes—dice Asher—tú la amas desde el momento en que la viste—cierro los ojos, no se que hacer.

Amo a Alaska con todo mi ser, pero la amo más como para alejarme de ella. Mierda... no se que hacer.

—yo tengo una solución para que puedas estar con ella— miro a mi hermano con sus ojos amarillos

—¿porqué demonios todo te divierte?— rodeo los ojos

—por que todo tiene una solución y nadie la quiere ver—frunzo el ceño

—dime, genio tú gran solución—me río

—¿cuantos cazadores hay en el mundo?—pregunta

—como unos diez—respondo—Rixton es el líder—digo, todos los cambiantes lo saben

—la respuesta esta en frente tuyo, hermano— me mira con cara divertida pero yo me pongo a pensar en que carajos tiene de obvio. Soy mayor que Asher por veinte años y sin embargo, toda mi vida me ha abierto los ojos más que nadie

—sigo sin ver lo que tú vez—me río—eres como un sabio—bromeo

—¿tú porqué crees que era el consejero real de la reina Victoria?—rodeo los ojos pero igualmente me río

—lo hiciste en sus últimos años de reinado—se ríe

—y se que, debí aparecer en los libros de historia—sonrío—tienes que matarlos, Scott—mi sonrisa se esfuma—si matas a cada uno de los cazadores, aseguras una eternidad de paz junto a Alaska—y casi, puedo sentirlo— también le estas asegurando paz a todos los cambiantes y sus almas gemelas

—es una muy buena idea, Asher—trago saliva—pero, ¿por donde empezar? pueden estar regados por todo el mundo

—yo te ayudaré—me dice mi hermano, seguro

—bien... lo haré, por Alaska— Asher asiente y cuando estoy apunto de entrar a la casa Asher me agarra del brazo

—Alaska es un enigma, Scott—frunce el ceño—aún no se por que tus poderes no influyen en ella pero se que, te ama— todo mi estómago se mueve con eso. Asher tiene el poder de ver más haya, que es más lógico, sabio y curioso que otros. Sabe la mayoría de las cosas, es como tener a un genio en casa

—gracias—respondo

—y no te tardes tanto tiempo, Scott—vuelve a decir—si no te apresuras no podrás darle a Alaska la inmortalidad y de nada servirá matarlos si lo haces cuando Alaska ya este en un asilo—trago saliva

—me daré prisa—aseguro.