capítulo dos

473 11 2
                                    

Zoroark no se adaptaba bien con mis amigos del valle, le sujerí que fuera conmigo a escuchar y contar cuentos por el medio día, él no quiso pero le obligué con el conocido chantaje pokemon.

-Si no vienes te enviaré yo con mi famosa pokepatada. ¿Entiendes?-dije yo, pikachu

Zoroark suspiró

-Me lo pensaré-dijo zoroark

-No te lo pensarás, vendrás-dije yo, pikachu.

En pleno mediodía , bajo un árbol nos preparábamos mis amigos y yo y...bueno, zoroark, para comenzar la sesión, todo el mundo traía cantidad de comida para comer todos juntos. Casi todos trajimos bayas, menos un bunelby que consiguió unas galletitas saladas. Todos le felicitamos por semejante hazaña, pero nos enfadamos todos cuando este dijo que no quería compartirlas.

-¿Quien será el primero en contar un cuento?-pregunté yo, pikachu.

Unánimemente dijeron todos al mismo tiempo  "¡Pikachu!". Me alegré mucho porque siempre querían que contara yo los cuentos. Decidí seguir con la historia de siempre.

-Pikachu y su amigo sentreet llegaron a un volcán. Como sentret tenía miedo, pikachu le pidió que no le acompañara a la cima y que si le pasaba algo huyera y dejará la aventura. Pikachu notó que estaba a treinta grados centígrados y aceleró el paso; más adelante supo que que el suelo que pisaba estaba a más de setenta grados y comenzó a avanzar con saltitos para no quemarse los pies mientras decía "hay"-todos rieron porque yo estaba imitando los saltitos mientras ponía caras raras- Después pikachu vio que el volcán entro en erupción y deseó con todas sus fuerzas que no le cayera ningún pedrusco de lava endurecida, ni que le alcanzara la lava líquida que bajaba lentamente de la montaña, ese fue de hecho el último deseo de pikachu porque no sobrevivió y su amigo quedó destrozado y se prometió a si mismo que lograría conseguir el orbe del poder del trueno.

Todos aclamaron mi historia y decían "bravo". Yo estaba feliz de que les gustara mi historia y casi no podía contenerme de la emoción. Busqué a zoroark pero no aparecía por ningún sitio. Salí de entre la multitud y lo encontré sentado bajo la sombra de un árbol un poco apartado, no dije nada y me senté a su lado. No decíamos nada pero creí que por su mirada, seguía triste. Tenía claro que ocultaba algo, pero no conseguía saber que era.

-Tienes mucha imaginación-dijo zoroark

-No tanta-dije yo, pikachu.

Pasó mucho rato de silencio hasta que zoroark se levantó y pudimos irnos, tanto que era ya de noche. Yo me aburrí muchísimo, pero no me importó porque él era mi nuevo amigo.

Después de marchar de debajo de aquel árbol me dijo que le siguiera, yo no sabía lo que quería. Me llevó al que me dijo que era su lago favorito, la luna se reflejaba sobre él y me pareció muy bonito.

-¿Sabes una cosa?-preguntó zoroark

-¿El qué?-pregunté yo, pikachu

-Hay gente que me está buscando-contestó zoroark.

-¿Por qué?-pregunté yo, pikachu

-Aunque me cueste hablar de esto te lo diré. Soy un pokemon muy fuerte en comparación con los de mi especie.-dijo zoroark

-Ya, eso lo sabía desde el mismo momento en que te vi-dije yo, pikachu.

-¿Como?-preguntó zoroark

-Porque eres el mejor en todo-respondí yo, pikachu

Cuando volvimos habían desaparecido los pokemon. Zoroark no dijo nada, yo me pregunté que había pasado sin obtener respuesta. Después de unos instantes buscando por los alrededores comenzaron a venir pokemon que culparon a zoroark de que pasaran humanos por allí y zoroark les dio la razón, en realidad le buscaban a él. Así que se fue, yo no lo entendí,porque los pokemon estabamos bien y a todos nos buscan humanos de todas partes, muchos campaban a sus anchas por el bosque del conocido valle pokemon, fue una casualidad que nunca coincidieran con nosotros al pasar por nuestro bosque, donde nos reuníamos todos los pokemon que no queríamos tener entrenadores. Zoroark se había ido pero yo salí en su busca para cumplir mi misión, que dejará de estar tan afligido y tan solo.

Gracias por leer...

La Aventura de Pikachu y el Zoroark TristeWhere stories live. Discover now