capitulo 5

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Tuvimos que descender por una pendiente bastante pronunciada y seguimos por donde él indicaba, hablamos todo el camino. Pero me molestó que a pesar de que él mostraba su pasado, yo tuviera que mentir constantemente.

Nací de un huevo en manos de un niño que quería ser entrenador, y así fue, pero cuándo tuvo otros pokemon no me gustó. Por ese motivo empecé a atacarles sin más, siempre cuando mi entrenador no se diera cuenta. Eso hizo que todos se compincharan para acabar conmigo, yo, pikachu, pokemon preferido de mi amo y no pude evitar que me acorralaran y me dejaran debilitado en mitad de un camino. Mi amo me devolvió a mi pokeball sin dejarme explicar lo sucedido, zoroark acertó con lo del entendimiento, entienden lo que quieren...

Tras salir por fin del centro pokémon y descansar fuera de la pokeball volvieron a molestarme el resto de los pokemon. Me atacaban, pero yo también lo hacía, y mas fuerte. Así que cuando mi amo llegó, me vio electrocutar a mis compañeros a pesar de que estos ya estaban todos debilitados de hacía rato. Procedió devolviendome a un profesor cuando yo no quería y le hice liberarme, pero no pensaba en dejarle, ni mucho menos. A partir de ese momento le perseguí y observe todos sus pasos. Cuando quise volver a ser su pokemon me mostré, pero él negó y me enfadé. Le ataqué también a él sin apenas darme cuenta, pero cuando vi lo vulnerable que era me retiré y no volví nunca, jamás...jamás de los jamases.

Al recordar aquello casi lloro delante de zoroark, pero saqué a relucir mi sonrisa de pikachu y lo evité a toda costa. No quería que me tomara por un pikachu malvado y agresivo que se hace el feliz por donde va...

-Ya hemos llegado, aquí tienen su laboratorio-dijo zoroark

Era una mina que parecía abandonada.

-¿Es esa mina?-pregunté, yo pikachu, extrañado.

-Si...-respondió zoroark.

Entramos en su interior a paso de tortuga y con un poco de miedo, pero yo estaba dispuesto a cualquier cosa...

La Aventura de Pikachu y el Zoroark TristeWhere stories live. Discover now