Capítulo XXI: Un cuento (2° Parte)

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Luego se acercó al castaño ahora humano y lo vio dormido en el piso.

-¡Oh! ¡Qué hermoso joven! ¡Tal vez debería despertarlo con un beso! -Dijo de una forma dramática, pero no estaba actuando, así era el rey con tinte L'Oreal.

Se acercó al castaño dispuesto a darle un beso, pero el castaño le roció gas pimienta en los ojos haciendo que el rey se retorciera de dolor en el suelo.

-¡A mí, nadie me besa sin mi consentimiento! -Dijo mientras se levantaba.

Y como el rey teñido estaba ardido por el gas pimienta y el rey llorón se ahogó en el garrafón, el ex-genio se convirtió en el rey del pueblo del tinte y él fue feliz para siempre.

Fin.

Todos se quedaron con la boca abierta al principio... y luego se carcajearon un rato. Fue bueno divertirse molestándose entre ellos un rato, hasta Ford se rió un poco, le gustó el final de Bill.

El resto de la noche la pasaron entre bromas, uno que otro juego y luego, Will invitó a Dipper a nadar.

-¡Será divertido! -Dijo el peli-azul, pero Dipper no parecía convencido.

-No sé... es que... ¿Y si nos da mucho frío? -Preguntó Dipper sentado en un tronco.

-Apenas va a terminar el verano, tenemos tiempo, por favor. -Will empezó a suplicar, entonces el castaño suspiró resignado.

-Está bien. -Dijo aún sin estar convencido, y Will lo jaló antes de que éste se arrepintiera.

El castaño se quitó la camisa y se quedó con sus bermudas, esperando que el agua no estuviese muy fría, y como había hecho calor en el día, la temperatura era agradable. Will entró a su lado.

-¿Sabes nadar? -Preguntó el guitarrista.

-Más o menos. -Admitió el chico algo apenado, pero a Will le pareció tierno, lo tomó de la mano y ambos se sumergieron en el agua. Comenzaron a chapotear, a jugar e incluso a empujarse un poco.

Dipper empezó a sentirse en confianza y le siguió el juego a Will, pues cuando no estaba con sus guarradas le parecía tierno y gracioso.

Después de una hora ambos salieron y al llegar con los demás, no se habían perdido de mucho, pues estaban tomando un poco y riendo como idiotas. Dipper les sonrió y se metió a su tienda a cambiarse.

Cuando salió, se unió a la fogata para escuchar sus tonterías, pues él no tomaba, no le gustaba el alcohol, pues sentía que le quemaba la garganta, pero en su lugar tomó refresco de una lata.

Contaron chistes, historias graciosas y locas, entre otras cosas. Dipper supo muchas cosas vergonzosas de Bill, pero más que carcajearse como retrasado, se reía pero sabía que el rubio era un humano que también se equivocaba y también le pasaban cosas, ya no lo veía como un fan ve a su ídolo, sino que le parecía más humano.

Recordó esa vez que se tomaron de las manos y sintió una corriente eléctrica desde su mano hasta la punta de su cabello, cuando lo besó en la mejilla, su piel era suave y cálida, y cada que ambas miradas se encontraban, era como si lo demás no existiera.

No era un estúpido ni un negado, ya había pasado por esa etapa de la pubertad en la que te preguntas ¿Me gusta? o como un inmaduro que niega sus sentimientos por orgullo. Lo admitía para sus adentros, Bill le gustaba, pero no tanto como Anthony, se podría decir que él amó a Anthony, y no sentía por Bill ese amor al mismo nivel, el que ese sentimiento creciera dependía tanto de él como del rubio, decidió dejar las cosas en un "veremos".

A las dos y media de la madrugada, Ford estaba dormido en su tienda, sabía que si se quedaba dormido con los chicos, al día siguiente despertaría con la cara pintada con plumón permanente... de nuevo.

Gideon y Robbie durmieron en una tienda, pues sólo había cuatro y Ford los distribuyó, dejando a Will solo por petición de Dipper, pues de dormir con Bill a dormir con Will... dicen por ahí que de los males, el menor.

Will se fue a su tienda con unas copas encima, pero se quedó dormido a medio camino y de la cintura para arriba, su cuerpo estaba en la tienda, y de la cintura para abajo se quedó afuera en la arena.

Bill, que aparentemente aún estaba lívido, entró a la tienda aún riendo un poco por ver a Will caer dormido a medio camino. Dipper entró tras él acomodando su bolsa de dormir.

Después de unos minutos, el rubio se calló.

-Sabes, Pino... -Dijo Bill después de unos momentos. -Cuando fui con Gideon por los dulces... él me preguntó si tú me gustabas. -Dipper dejó lo que estaba haciendo y miró al rubio, el cual estaba recostado en su bolsa sobre sus codos sin mirar a Dipper, con las mejillas ligeramente ruborizadas y una sonrisa tonta.

-¿Y qué le dijiste? -Preguntó el castaño con temor.

-En realidad no quería responderle... -Bill se enderezó y se sentó. -He tenido mala suerte con el amor... y no quiero entregar mi corazón tan fácil...

-Sé a lo que te refieres. -Dijo el menor sentándose junto a Bill.

-No, no lo sabes. -Bill soltó un bufido. -Anthony te amaba... te amó hasta el final...

-Sí... pero igual no pudo evitar dejarme... y no me refiero a él... él no ha sido mi único novio. -Admitió Dipper con una sonrisa seca. -Tuve otros dos antes, pero... la relación terminó bastante mal.

Bill rió también con amargura. -Ahora sabes por qué siempre te pregunto cómo saber quién es el ideal.

-Y siempre te responderé lo mismo. -Dijo Dipper con una sonrisa sincera hacia el rubio. -Tú lo sabrás, llegado el momento.

Bill lo miró y también le sonrió. Se tomaron de las manos, y luego el cantante miró sus manos entrelazadas.

-¿Sabes? La pregunta a lo que me dijo Gideon... es que tú me atraes... tal vez... podríamos hacer que este sentimiento creciera... si es que me correspondes. -Susurró Bill mirando a Dipper, quien tenía las mejillas rojas y miraba al piso.

-Si decido corresponderte... si este sentimiento crece... ¿Me amarías para siempre? -Ambos sin darse cuenta, empezaron a acercarse lentamente.

-Si prometes no romper mi corazón... -Dijo Bill en un tono más bajo empezando a rozar los labios de Dipper. Dipper notó el olor a alcohol en el aliento de Bill, y se dio cuenta que quizá al día siguiente el rubio no recordaría nada... pero quería intentarlo, quería besar a Bill, saber qué se sentía besar al rubio.

Al final, ambos juntaron sus labios en un beso que al principio fue tímido, pero luego se hizo un poco más profundo.

El fotógrafo y el rockero (BillDip) Completo.Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt