Cap. 9 ¡Oh, no! esta vez me toca a mí.

2K 106 0
                                    

—La última vez que me obligan a entrar a un juego del infierno como ese. —Ivan nos da una mirada asesina mientras nos bajamos del martillo aún riendo, él sigue apoyado sobre Luke, tomando una larga respiración.— ustedes son malévolas.

—Lo siento soy-muy -joven y hermoso-para-morir. —Dana se pone a imitarlo con voz chillona y a los segundos Luke, ella y yo nos carcajeamos con ganas, ignorando la mala mirada que el azabache le da a la castaña.

—¡Es cierto!, soy muy hermoso y joven para morir, no como ustedes, ¡mundanos! —hace una pose diva soplándose las uñas, por lo cual nuestras risas aumentan más. — Ya desearían ser iguales a mi.

—Si clarooo. —murmure sarcástica rodando los ojos cruzándome de brazos. —¿Vamos a la montaña rusa?—pregunte haciendo un puchero, los tres se miraron mutuamente y el ojiazul negó al igual que el gesto que hacía con sus propias manos.

—¡Oh, no!, esta vez me toca elegir a mí. —interrumpe a Luke antes de que hable, mirándonos maliciosamente, rodamos los ojos, pues el Ivan vengativo nos hacía irnos a juegos que no eran divertidos y además, aburridos.

El tren para niños era un digno ejemplo de su "venganza".

—¿A dónde? —pregunta Dana haciéndose una coleta para después tomar mi mano.

—Iremos a al cementerio del manicomio.—aplaude sin quitar su mirada y sonrisa cínica de nosotros, uniendo sus dedos después como el señor Burns.

Eso sí no me lo esperaba.

—¡Estás loco sí crees que vamos a entrar ahí! — mis ojos se abren por la sorpresa y a la vez yo misma me delato con el poco temor que eso me causa, pero mi reacción sólo hace que se amplíe su sonrisa de loco guiñándome un ojo.

—¡Vamos, Emily! O... acaso le tienes miedo al cementerio y manicomio? —pregunta en un tono divertido sonriendo como un autentico desquiciado, peor que antes.

Lo que me daba más fervor era qué...

Para poder salir de esa atracción debes pasar por un manicomio abandonado, obviamente pero en el cementerio se complica la situación cuando sale un loco con motosierra a la vez que intenta matarte, una cosa que parece muy real para mi gusto.

No es que le tenga miedo a las cosas de terror, sino que tuve un pequeño trauma de pequeña ahí.

—¡Yo no quiero ir ahí!—exclame en protesta incómoda, mi mejor amiga ahora me estaba rodeando con sus brazos.

—¡Yo tampoco!—Ella se unió a mí en esta discusión, el castaño sólo miraba la situación callado cruzado de brazos con aburrimiento.

—Vamos chicas, ¿es que son amigas de Halley y Candy? —pregunto refiriendose a las chicas superficiales de nuestro antiguo instituto, las que claramente nos sacaban de quicio y viceversa.

Esa fue la gota que derramo el vaso.

—No, no tengo miedo y voy a entrar ahí. Más te vale que corras lejos después, loco Ivan. —murmure entre dientes olvidando cualquier viejo recuerdo.

—¿Correr?, eso lo harán ustedes, querida. —bramó él divertido, antes de tomar nuestras manos y que una sonrisa torcida apareciera en sus labios.— Vamos, ¿entonces?

Por los altavoces del parque empezó a reproducirse Wouldn't it be nice de The Beach Boys.

A Ivan se le amplió la sonrisa orgullosa en el rostro tarareando mientas que nosotras dos lo mirábamos mal.

—Vamos antes de que te parta lo que llamas cara, querido. —gruñó Dana soltando su mano de un manotazo, nuestro amigo rodó los ojos pero igualmente se apresuró a emprender el camino hasta la dichosa atracción aquella bailando en el camino, llevándose varias miradas de las personas a su alrededor.

Te Prohibo EnamorarteWhere stories live. Discover now