World Of Ravens (Fény 2#)

Capítulo 59

[Esmerald]

Miro a Iván, que está en la misma posición que yo y que todos los demás. Estando de rodillas, cubriendo nuestros ojos de los vidrios que explotan, ahora el ruido se ha detenido así sin más. Iván se convierte en humo y sale del hospital, hago lo mismo sin antes llevarme a Charlie y aparecer justo afuera de las puertas del hospital.

Busco a Iván con la mirada hasta que lo encuentro correr hacia la derecha, inmediatamente ubico a André y Thomas bajando por una vereda, supongo que estaban en la única cabaña que está en las alturas en la orilla del cráter. El vampiro le dice algo a la sombra y señala hacia el lado sur de la isla; en ese instante aparece el capitán Rogers, se acerca a nosotros preguntándonos que ocurre, pues dice que unos soldados lo obligaron ir a una gran cabaña que parece comedor.

— Es lo que vamos a averiguar —camino hacia Iván y André, al acercarnos a ellos el vampiro esta como loco hablando tan rápido que no le entiendo.

— Tranquilízate —dice Thomas con cara de angustia—. Iremos enseguida hacia esa zona.

— ¿Qué zona? —pregunta Rogers.

— Sur —dice alguien a nuestras espaldas, es Seung Ji, lleva un arma en mano, a su lado Allan y Yerik y otros diez soldados.

— Iré con ellos en aquella zona de la isla inhabitada —dice André—. Ustedes esperen aquí.

— Ni loca —digo yendo hacia él—. Voy contigo, aun luces más pálido que de costumbre y te noto mareado.

— Vamos los tres —dice Iván, él también luce algo desorientado pero sé que no puedo discutir con ninguno de los dos, mi chico mira a Thomas—. Quédate con Charlie, sabes qué hacer si algo se complica.

Thomas asiente, Charlie se queda con cara de no entender nada al igual que Rogers que permanece en segundo plano pero, noto su curiosidad mal disimulada. Miro a los tres líderes quienes asienten, dan varias indicaciones a los soldados que tienen a la vista y también por radio. Después caminamos hacia el lado Sur, subimos por una vereda y llegar a la orilla del cráter, por ese camino a simple vista se ve imposible de abrirse paso. Allan nos hace una señal, primero va él junto con dos soldados, después nosotros junto con Yerik y otros dos soldados más, al último van Seung Ji y el resto de los soldados.

Descendemos a paso lento, teniendo cuidado de poder herirnos con arboles caídos o resbalar en el lodo que se ha creado, no podemos aparecer en otro lado porque el terreno es incierto y pueda pasarnos algo. Al llegar hasta abajo, caminamos entre la selva hecha un completo desastre, miro al cielo y a pesar de que aun sigue nublado, no parece que haya pasado absolutamente nada, ni rayos, ni truenos y ni nubes negras a lo lejos.

— ¡Demonios! —exclama Yerik, rápidamente ubico a que se refiere y veo un extraño auto, aplastado por dos árboles.

— El pequeño Jeff ha muerto —dice Seung Ji acercándose al auto para rodearlo y ver los daños—. Fue un buen chico, mientras duro. Vamos.

— ¿Por qué le hablas como si fuese un niño de verdad? —le pregunto curiosa, el chico me mira con sus pequeños ojos rasgados.

— No sé —se encoge de hombros—. Empezó como una broma, lo utilizábamos para explorar estos territorios, creo que seguiremos a pie.

Nos adentramos a la selva destruida, Yerik propone hacer tres grupos y así explorar más terreno. André se va con Seung Ji y tres soldados hacia la izquierda, Iván va con Yerik y otros tres soldados, ellos prosiguen en la dirección en la que íbamos, mientras que yo voy con Allan y los cuatro soldados restantes hacia la derecha.