Once (día 3 último)

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-No, algo está mal, en serio -la miré fijamente.

-Esta weá parece película de terror culiao, mejor cállate -me obligó.

Sonó mi celular, estaba más asustado que la conchatumare.

-¿Aló?

-Hola, Fabián -era la voz del culiao que me mandó las fotos de la Dominic.

-¿Vo' qué querí? -me chorié.

-¿Te contó la Domi? -se cagó de la risa.

-¿Qué cosa? -rodé los ojos.

-Pensé que te lo había dicho, como estás en una cabaña con otra mujer -aguantó la risa.

Salí rajao a mirar por la ventana, nadie hueón, las cerré.

-¿Cómo sabí tú eso? -me asusté.

-Fabián, erís papá. Por eso se fue la Dominic, en esa fiesta que hicieron como despedida, la dejaste embarazada. Lo supo cuando ya se había ido. Ahora ese bebé tiene más de un año, y aún está en Iquique, si no me crees, anda y pregúntaselo -cortó.

Solté el celular y miré a la Cote.

-¿Fabián?...-me miró y se acercó a mí.

Me fuí a la pieza y ordené mis cosas.

-¡FABIÁN QUÉ TE PASA HUEÓN! -me quitó la mochila y me miró fijamente.

-Y-yo -tartamudié -, me tengo que ir, déjame por favor -le supliqué.

-No, Fabián, dime -tiró mi mochila y me empujó a la cama.

-¡MI PAPÁ SE MURIÓ! -grité. Agarré mi mochila y salí a tomar un taxi pa' irme rápido a ver a la Dominic.

**
Toqué más fuerte la puerta. Hasta la patié.

-¿Qué te pasa? -me abrió la Dominic.

Pasé como si fuera mi casa y la miré.

-¿Es verdad que estabaí embarazada, y que la guagua es mía? -me miró sorprendida pero se calló unos minutos.

-Sí -se sentó en el sillón y se puso a llorar.

Me senté con ella y la miré, ¿y si la guagua chica también era de ella?

-Y tu hermano, primo la weá que sea, ¿dónde está? -le tomé la cara para que me mirara.

-Es mía también -me abrazó y se puso a llorar más fuerte, la Oriana dos.

La separé de mí y me fuí a la pieza a ver a la guagua.

-Ya, ese hueón es el papá de la guagua? -me alteré un poco.

-No. Es un hueón de...es un hueón de Iquique. Me vine porque tenía que decirte lo del bebé. Además de que me echaron del colegio de allá -me trató de tomar la mano pero la empujé.

-Quiero verlo...o verla al cabro chico...-la miré.

-Tiene 3 años -suspiró -, los cumplió ayer y no estuve con él -miró hacia abajo.

Me pasó su celular y me mostró una foto.

Era igual a ella, por mi parte no se parecía, tal vez en los ojos, pero los míos son más claros

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Era igual a ella, por mi parte no se parecía, tal vez en los ojos, pero los míos son más claros.

-¿Te vas a Iquique? -la miré sin entregarle el celular.

-Sí, pasado mañana -suspiró y la miré.

Me metí a su whatsapp. Tenía el número desconocido agendado como: Pablo ♡.

Entonces ¡El hueón que estuvo acá es el número culiao! Oh conchetumare, maraca culiá.

Le entregué el celular y salí de la pieza.

-Me voy contigo, te llamo -dije sin mirarla.

-Ya...perdón -me tocó el hombro y yo salí.

Si esa guagua era mía, y la de la pieza era de ella..además de que es maraca, significa que allí tuvo otro novio más o sea tal vez ninguna guagua es mía.

No soy ná pelao.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora